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Narrador omnisciente.

Los elegidos iban por la autopista vacía, con los arboles y el azulado cielo alrededor de ellos. Escuchando canciones y contando una que otra anécdota de su vida.

Pero no todos con los mismos sentimientos. Yeosang y Seonghwa no se hablaban ni se dirigian una mirada, Yunho con Jongho trataban de que todo el mundo se enterara de lo mucho que se aman, muy contrarios a los primeros. Mingi resumía todo lo que ocurrió estando con los gorfes y como uno de ellos fue el causante de su cicatriz, Hongjoong escuchaba atentamente la historia de su pareja, San también escuchaba, pero también estaba atento de Wooyoung, quien hace poco descubrieron hace poco que si está respirando.

–Estoy esperando ver a los chicos.–decía con emoción Mingi refiriéndose a los hermanos híbridos.

–Me pregunto como estará Soobin.–el mayor del grupo sonrió pensando en el chico que ya consideraba un amigo–.Ya cumplí nuestra promesa.

–¿Cuál?. ¿La de volver por él?.– preguntó Yeosang molesto.

El ambiente que era agradable y entre risa, se transformó a uno incómodo en el que solo se dirigían miradas con preocupación y quizás un poco de nervios. Tener a esa pareja en una pequeña pelea les era imposible de sobrellevar.

–Ni sé que te hice, Yeosang–Trató de defenderse–Ya te expliqué lo de esa chica, estábamos bajo su...

–Si, claro...

–Silencio.–pidió San alertando a todos ahí–Está despertando.

Wooyoung despertó, estaba perdido y no comprendía la situación. ¿Qué hace él con los elegidos?, no recuerda lo que pasó después de su tortura en esa habitación sin iluminación.

Retrocedió, alejándose de San y queriendo evitar esas miradas de los ajenos en él. Chocando con una de las paredes de la camioneta, asustado por lo que podría pasarle, apenas y sale vivo de los gorfes, piensa que los elegidos podrían matarlo por todo lo que a hecho. Seonghwa paró y aparcó a un lado de la carretera.

–¿En dónde está Heechul, hyung?.–  preguntó el menor asustado.

–Tranquilo, Woo.–pidió con voz suave Seonghwa tratando de acercarse, pero Wooyoung se corrió para que no lo tocara nadie–Nos dirigimos al pueblo, Heechul no quiso venir.

El plan del menor era escapar con Heechul y su amigo Jun, no que escapara el solo con siete desconocidos, aparte de que los siete fueran los elegidos y que uno de ellos le tiene un odio gigante.

Mingi se acercó a Wooyoung sentándose frente a él. Sus miradas se conectaron, el menor esperaba lo peor, pero Mingi terminó por inclinarse un poco frente al peligris.

–Perdón por pensar mal de ti, nos protegiste estando allá y yo solo te traté mal. Lo siento.–se cruzaron miradas sorprendidas por la escena, no esperaban tales palabras viniendo de Mingi.

–No, no, no.–ahora era el menor quien se inclinaba ante Mingi– Todo pasó por mi culpa, quemé tu pueblo. Pensaba que no maté a nadie, porque ellos me lo decían...

Levantó la cabeza apenas viendo a los demás. Se sentía avergonzado, no podía creer que enserio fue engañado y usado tan fácilmente, se sentía como un infante inocente  e ingenuo que cree en las palabras de los adultos sin duda alguna.

–Fuí un estupido, solo por tener un poco de acción en mi vida y querer tener un amor, ayudé a Kai. Lo siento.–volvió a inclinarse, esta vez para todos los demás.

–Al fin se te bajaron los aires de grandeza.–comentó Jongho siendo codeado levemente por su pareja.– Me siguen doliendo tus golpes.

–Lo siento, eran ordenes de Kai.– respondió Wooyoung separando su vista del suelo–Hace un tiempo sabíamos que eras el elegido de la electrisidad.

Los Elegidos {Ateez}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora