trece☆

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Ashton intimida, su mirada hazel es fría y dura, su ceño está siempre levemente fruncido, su boca en una fina línea, a veces tiene esta maña de fruncir hacia un lado su boca, me supongo porque está mordiendo el interior de su boca. Y quizás sus accesorios esotéricos no son lo que más me da escalofríos, sino cómo su mirada me escudriña cuando pretendo no darme cuenta.

Tenerlo justo en frente en una mesa del foodcourt del centro comercial, mientras comemos pizza y los demás hablan cosas al azar y se burlan entre sí, me hace querer esconderme. Jamás alguien me había causado esta sensación.

Y al parecer Luke lo nota porque deja de reír de algo que dice Bárbara (la chica preciosa y rubia platinada) para darme una sonrisa cálida.

Trato de esfocarme en mi trozo de pizza a medio comer, pero algo me hace alzar la mirada hacia Ashton; una de sus comisuras está elevada, suprimiendo una sonrisa, quizás una burla hacia mi persona porque es obvio para cualquier que pase cerca de nosotros, que yo no encajo con ellos.

Soy un punto blanco entre su vestimenta negra que llama la atención. "Góticos, satánicos, obradores del mal" eso diría mi madre si los viera.

—El otro día Bárbara le prometió una mamada al tipo de la barra si le daba bebidas gratis, el pobre imbécil cayó —cuenta Calum, negando divertido, Luke ríe. Yo me encojo en mi lugar.

¿Por qué acepté venir? Me había disculpado con Luke, había aclarado las cosas, ¿Qué trataba de mostrar?

Estoy incómoda.

—Oye, Julieta —me llama Bárbara, quién está sentada al lado de Ashton, esta lleva un trozo de peperoni a su boca y mientras masca me ve divertida.

—Es Juliette —corrijo antes de que vuelva a hablar, ella hace un mohín para quitarle importancia. Dirijo la mirada hacia Luke y él solo me observa atento.

—Sí, sí, dime, tengo curiosidad, ustedes esperan hasta el matrimonio para follar, ¿no es así? uhm, qué pereza.

Frunzo mi ceño ante la falta de censura que tiene ella, me encojo de hombros y asiento. Calum suelta una risa, y para mi sorpresa, Ashton se le une, Luke intenta no hacerlo también.

Me enojo, me entra una especie de molestia al saber de que se están burlando de mí en mi propia cara y que Luke, quién es el responsable de que esté acá en primer lugar, no haga nada lo hace todo peor.

—Se espera porque se tiene que llegar puro, sin pecado alguno, así es como está escrito —explico apresuradamente, haciendo que ellos me vean atentos—. Además es mejor esperar al indicado.

No quiero tener que ver sus expresiones, pero lo hago: Calum me ve con una ceja alzada, obviamente divertido al igual que Bárbara, Luke está haciendo su intento de mantenerse neutro y cuando veo a Ashton, este bufa y se cruza de brazos.

—Si quieres esperar al indicado, ¿Por qué diablos estás con Luke justo ahora?

—Ashton —musita Luke, en señal de advertencia, pero el teñido de negro no le hace caso y comienza a negar con gracia y descaro.

Me he quedado petrificada. Quizás él tenga razón.

—Bueno, Julieta, no cabe duda que eres más linda y pura que nuestro Romeo en cuestión —se mofa Bárbara para luego dar una gran y vulgar mordida a su pizza, le miro cómo lleva un pulgar a su comisura y chuparlo coquetamente hacia Calum, cuando él hace un gesto obsceno con su mano es donde aparto la mirada.

—Ya me quiero ir —aviso sin pensarmela dos veces, Luke me da una mirada seria, pero asiente a los segundos.

Nos levantamos, Luke saca un billete de su billetera y lo arroja en la mesa, seguido de despedirse vagamente de sus amigos, yo ni siquiera quiero volver a verlos.

—Cuídate, Juliette —oigo decir a Ashton a mis espaldas, giro mi cabeza para verle sobre mi hombro y entrecierro mi ojos, justo a como él lo está haciendo.

—Vamos —dice Luke, me toma de la mano, lo que hace que deje de ver a Ashton.

Ambos salimos del centro comercial, me suelto de su agarre, camino hacia una banca cercana y me dejo caer, casi derrotada y agotada, es como si ellos hubiesen drenado toda mi energía.

—Se estaban burlando de mí y no hiciste nada —me quejo, tomo una gran bocana de aire, dejo mi mirada en el suelo, con mi postura encorvada.

—Juliette, así son ellos...

— ¿Por qué querías que saliera con ellos?

—No sé, necesitas respirar otro tipo de aire, salir de tu burbujita cómoda —habla, se ha posicionado justo en frente de mí, sus palabras me hacen alzar la mirada con incredulidad. Nuestros ojos chocan, ambos transmitiendo emociones distintas.

— ¿Y eso por qué a ti te tiene que importar?

—Necesitas un empujón a la vida, ¿Crees que alguien como Michael lo va a hacer? Ja, solo es un tonto con privilegios elevados y dinero.

— ¿No es eso lo que somos nosotros también? Jóvenes con privilegio a todo.

— ¿Ves? Al menos eres consciente de eso, necesitas despertarte un poquito.

—Vale, ¿Y tus amigos góticos burlándose de mí lo hará?

Luke alza su mirada al cielo, quizás buscando paciencia. Me levanto de la banca y empiezo a caminar hacia el estacionamiento, sé que él me está siguiendo.

Cuando llegamos en silencio hasta su auto, me giro para verle.

—Ashton tiene razón.

— ¿Huh?

Lo que he dicho le ha sorprendido.

—No pienso tener algo serio contigo, ¿Por qué estamos aquí? —planteo, muerdo mi labio inferior con algo de inquietud mientras espero a que Luke diga algo.

—Te engañas tú solita, Juliette —bufa y me frustra que se esté tomando esto con cierta gracia—. Entonces, ¿Me estás diciendo que si justo ahora me acerco y te beso, te vas a alejar?

Trago duro. Su mirada azulada me escudriña, niego con recelo y paso a su lado, directo a la puerta del copiloto.

—Cállate y llévame a casa de una vez, por favor.

Luke reprime su sonrisa y asiente una vez.

—Sí, madame.

Tal vez sí he adquirido algo nuevo con Luke y es aprender a lidiar con su actitud descarada.

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Otra actualización¡! Estoy igual de sorprendida que ustedes jaja, me alegra que aun haya personas leyendo esta fic unu, voten y comenten pls, les tkm♡♡♡ síganme en insta: 0hn0ale ♡

dear god | lrhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora