Un daño irreparable.

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Autor.

tuve que resubir el capitulo asi que agradeceria que los que ya lo leyeron pongan otra vez su voto, si no quieren no hay ningún problema yo no obligo a nadie

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(Perspectiva de Ígaro)

Todo estaba cubierto por una espesa capa niebla, la visibilidad era casi nula, claro ese sería un problema para un ser humano común y corriente, pero cierto conductor de carruajes no le tomo mucha importancia a eso, este solo caminaba con normalidad, como si la niebla no existiera.(Ígaro en estos momentos estaba usando su forma "Humana") dicho conductor, seguía con su cara de aburrimiento, pero por dentro, estaba bastante preocupado.

(¿Donde se supone que está el señor Alex? sentí una presencia abrumadora hace poco, pero desapareció cuando la niebla apareció, estoy seguro de que esta niebla está hecha a partir de magia, o si no, podría sentir la magia de la señorita Mika con suma facilidad, pero ahora me es imposible encontrar algún residuo de ella... ¿Podría ser que algún enemigo lo suficiente poderoso, provocó algo como esto?...)

El preocupado Ígaro seguía caminando sin un rumbo fijo, hasta que, un destello de luz se pudo ver a lo lejos, Ígaro que obviamente vio el destello, empezó a caminar rápidamente hacia el.

(...Eso... Creo que es magia...)

El rostro de Ígaro se torció ligeramente al ver diez destellos más, estos eran de un color verdoso, de un momento a otro, los destellos desaparecieron momentáneamente... solo para dar origen a diez columnas de fuego que se alzaron sobre los cielos, estas eran del mismo color verdoso que los destellos anteriormente mencionados, median casi cien metros de alto y el sonido que generaban era ensordecedor, ya en este punto Ígaro estaba corriendo lo más rápido que podía hacia donde se originaron dichas columnas.

(...magia de nivel 5...)

Si, era un verdadero show de luces, lastima que no duraron mucho, ya que dichas columnas de fuego lentamente empezaron a desaparecer, era como si algo las estuviera absorbiendo, cuando finalmente las columnas desaparecieron, la calma reinó por unos segundos... y en la lejanía, una suave voz se pudo escuchar.

-Mi turno... (Alex)

Después de esas casi inaudibles palabras, unas luces de colores (más que todo, blancas) se podían ver en cielo, parecían estrellas siendo tapadas sutilmente por las nubes, las luces lentamente empezaron a descender, eran luciérnagas, eso es lo que pensaría una persona normal, pero a diferencia de otros, Ígaro al ver esto no pudo evitar dar un paso hacia atrás.

(HO, no, eso es magia acomulada.)

El conductor estaba rodeado de estás luces, no importaba si corría, no lograría nada.

una por una, las luces lentamente tocaron el suelo, unas cuantas de estás cayeron a unos pocos metros de Ígaro, este notando eso, intentó saltar hacia atrás lo más rápido que pudo, lastima que no era lo suficientemente rápido, pero... cuando las "luciérnagas" tocaron el suelo, empezaron a brillar más y más hasta el punto de...

-O no puede se... (Ígaro)

Ígaro no pudo terminar sus palabras, antes de que una gran explosión lo atrapará... con esta primera explosión muchas más vinieron, cientos de ellas.

Eran como fuegos artificiales, exceptuando que estos literalmente estaban dejando inmensos agujeros en lo que antes era un hermosa planicie.

Los escombros de tierra y piedra caían por todas partes, la niebla retrocedió rápidamente gracias a las ondas expansivas que generaban dichas explosiones.

El Señor OscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora