OSCURO DESEO

Marta

Me acomode en la cama para tratar de dormir pero mi estómago rugia por el hambre que tenía.

Lo único que pude hacer fue ignorarla y ver como conseguía quedarme dormida.

*Estara bien? - le pregunte
La decisión es tuya Alex, va depender de ti- me dijo mirándome a los ojos
Quiero tomar la mejor decisión pero es que ya no puedo, si antes tenia problemas esto... Esto no puedo manejarlo - dije alterada mientras lágrimas amenazaban con salir de mis ojos
Lo se - me tomo de las manos - por eso estoy aquí. Te di una opción pero recuerda que - apretó mis manos en las suyas - pase lo que pase seguiré aquí
Le di una pequeña sonrisa y tome una de mis más difíciles decisiones *

-Buen día alegría - dijo Marta mientras entraba a la habitación

Seguía cansada pero me alegre de verla después de estos dos largos días.

-Toma- me extendió un plato de pan tostado con mantequilla y unos omelettes.

Me senté en la cama para tomar el plato y empezar a comer. Comí desesperada por el hambre que tenía.

-Me entere de todo lo que pasó en estos días - dijo ella mientras yo comía - Y dejame decirte que o eres muy valiente o muy tonta- me dijo dándome un golpecito en la cabeza

Me encogi por el pequeño golpe recibido por parte de ella.

-Retar al hombre que te tiene secuestrada requiere de valentía pero hacerlo también lleva sus consecuencias mi niña- dijo mientras una de sus manos sobaba mi cabello - Mira nada más como te dejo - dijo soltando un suspiro.

-No te preocupes por mi- dije dándole una sonrisa torcida

-Como que no me preocupe, te dejo sola un fin de semana y te terminan teniendo como un saco de boxeo- me respondió histérica

-Porque no estabas en estos días ? - mi curiosidad necesitaba saber

-Solo trabajo de 5am a 7pm los días de semana y los fines de semana los tengo libres - me explico - pero por como te veo voy a tener que modificar mi horario

-Te preocupas demasiado, además ya yo estoy bien- dije extendiendo el plato vacío - ya me voy a bañar

Me estire y me pare de la cama para ir directo al baño.

-El no te dijo? - pregunto Marta con un tono de preocupación

-Que? - pregunté ya sin saber qué pensar

Ella parecia indecisa en decirme hasta que lo dijo

-Ya no iras a trabajar - me respondió ella cabizbaja

-Que?! Porque?! - dije alterada

-No quiere que por ninguna razón salgas si no es con él - me comunico la noticia con pesar

-Pero que le pasa, no es suficiente tenerme aquí. Aun asi ahora me tiene completamente presa - me desespere

-Entiendo tu indignación mi niña pero por ahora solo puedes quedarte aquí como el joven quiere. - dijo ella rendida

-Oh no Marta iré a decirle todo, que me mate a golpes si quiere pero voy a esperarlo y a decirle todo - me decidí

-No niña tienes que aferrarte a vivir, es mejor que a que te mate por un capricho- me trato de convencer

-Que viva?! Que vida?! esto no es vida. Esto para mi ya es una cárcel.

Los nervios empezaron a apoderarse de mi. Camine por toda la habitación sin saber que hacer

-Por eso me tengo que ir Marta, ayúdame- dije yendo hacia ella

-Que, a que te refieres? - dijo confundida

-A escapar, ayúdame a irme, tal vez no hoy o no mañana pero tengo que hacerlo, por favor - le pedí a ella

-No, claro que no, estas loca?!- se negó alterada

Yo me sente en la cama y solté un suspiro antes de empezar a llorar

-Es que ya no lo soporto, ya no puedo seguir asi- dije entre mis sollozos

Marta me miró con algo de lástima. Sabía que lo que le pedía podía ser una locura pero era lo que necesitaba y podía sonar un tanto egoísta pero veía en ella la única forma de poder lograrlo.

-Ay mi niña, lo que mas quiero es ayudarte - soltó un suspiro - no te prometo nada pero voy a intentar sacarte de aquí

-Enserio? - pregunté con ilusión -

-Voy a intentarlo, vamos a sacarte de aquí -

Yo la abrace fuertemente en forma de gratitud

-Gracias, gracias no sabes lo agradecida que estoy - y mis lágrimas de impotencia pasaron a ser de felicidad

-Te dije que no es asegurado, porque esto no será fácil mi niña, pero poniéndome en tu posición entiendo tu impotencia.-me dio una de esas sonrisas que me calmaban. - Además ya no quiero ver esa carita mojada en lágrimas - dijo tomando mi rostro en sus manos

-Eres como mi padre - le dije recordando mi pasado

-Que? Mis manos son tan rústicas? - dijo en un tono ofendida que me hizo reir

-No lo decía por eso, solo que el me consolaba y me ayudaba a tomar mis decisiones - le explique mientras una nostalgica sonrisa apareció en mi cara

-Y que pasó con el, el y tu madre deben estar muy preocupados por ti, cierto? - dijo ella curiosa

-Mi padre murió y mamá, - hice recuerdo de ella sin saber como responderle a Marta - ella debe estar bien, es fuerte-le mentí.

-Ay como lo siento, mi tonta imprudencia- dijo lamentándose ella.

-No, yo estoy bien. Aunque con algo más de hambre la verdad - traté de desviar el tema para no aumentar su preocupación

-Ah entonces vamos a bajar y te preparo lo que quieras para que esa barriguita termine llena esta bien? - su hermosa sonrisa adorno su rostro

Esa sonrisa que calmaba mi tormenta interior.

Me sentí bien por cada una de sus palabras, por su apoyo y porque aún  sin conocerme era empatica conmigo.

Todo en ella me inspiraba paz, su edad era suficiente para que fuera una abuela mía pero para mí era como la madre que me hubiera gustado tener.

En todo este caos era mi calma, y me alegraba tenerla cerca. Pero por más bien que me sintiera con ella no todo era bello en este lugar.

Y desgraciadamente lo malo era más grande que mi felicidad junto a ella. La quería pero mi libertad era mi anhelo y eso ella lo entendía

-Alex, mi niña, me escuchas? - dijo en frente mio mirándome confundida

-Si, vamos- le di una amable sonrisa para seguirla afuera.

Hoy no sería el día de mi completa felicidad pero estando junto a ella respiraba un poco de libertad.

Nota de la autora: todos amamos a la Martita claro que si

Aquí capítulo 20 . Espero les halla gustado

Fue un poco calmado

(todos necesitábamos calma después de esos capítulos anteriores 😂)

La Alex se podrá escapar?

Lo sabremos leyendo

Por ahora voten, comenten y hagan sus teorías

Los quiero bye