Secuela WhatsApp ➳ j.b

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Emma.

—¿Se puede saber en dónde jodidos estaban? ¡Casi llame a la policía!— grité una vez que entramos a casa.

—¡Jason nos ha perdido! ¡Le estábamos esperando y nunca llegó!— soltó Austin rápidamente en defensa de todos. Mire a Jason el cual abrió los ojos con sorpresa.

—¡Qué no es cierto! ¡Qué les he ido a buscar y no estaban!

—¿Eso es cierto Madelin?— ella nunca mentía.

—Él miente...— susurró.

—Madelin di la verdad.— reprochó mi novio.— Que he llegado al colegio y me han dicho que le han ido a recoger.

—Eso no es cierto. Tú te has ido. Nos dejaste. Tuvimos que comenzar a caminar por nuestra cuenta.— defendió Jacob.

—Que no joder, que han salido antes de tiempo, que me han dicho que los fue a recoger un tal Drew...

¿Había dicho Drew?

—¿Drew?— pregunté confundida. ¿A qué iba eso?

—Sí, eso, Drew.

—¿Niños han salido antes de tiempo.

Ellos negaron rápidamente.

—Estábamos en el parque mamá. No sabemos de qué habla Jason. Él nos ha olvidado en el colegio.

Me quede en silencio. Eso no podía ser.

—Más vale que esto que me están diciendo sea verdad.

—¡Emma que están mintiendo!— Jason volvió a reprochar.

—Hasta aquí. Solo espero que no sé repita.— advertí.

—Pero que ha sido culpa de Jason mamá...— lo interrumpí.

—Que no se diga más. Cada quién a su habitación.

No dijeron nada más y subieron.

—¿Estás seguro que te han dicho en el colegio?— le pregunte a Jason. Él asintió.— Es que por qué no me han llamado y nadie puede llevárselos sin mi consentimiento...

—No te mentiría nena.— dejo un corto beso en mis labios.

—Te he dicho que no me llames así...

—¿Por qué?

—Que no me gusta.

Él asintió.

Te recuerda a Justin. Lo sabes.

—Emma... ¡Emma!— el grito de Jason me saco de mis pensamientos. Me sobresalte.

—Lo lamento. ¿Qué decías?

—Que sí te apetecía la idea...

—¿Qué idea?

—No escuchaste nada. ¿Cierto?

Negué. Él soltó un suspiro.

—Lo lamento.— me volví a disculpar.

—Que si te querías comprometer conmigo.

Lo mire sorprendida. ¿Había dicho comprometernos?

—¿Casarnos dices?

Él asintió.

—Ya llevamos un tiempo de novios Emma. Creo que es tiempo de dar el siguiente paso. Somos el uno para el otro.

Claro.

—Acepto.— solté. No lo iba a pensar mucho. Él me miro sorprendido, como si no creyera mis palabras.

—¡Me haces feliz preciosa!

Ahora sí. ¿En qué me he metido?