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Una vez cambió su ropa por el uniforme del equipo de fútbol, el cual era el único cambio de ropa que poseía comenzó de nuevo su horario, como si nada hubiera ocurrido. Su rostro limpio y su cabello húmedo, algún corte en su rostro, pero nada que pudiera hacer que alguien se detuviera a prestarle atención.

Las dos siguientes clases fueron con la debida normalidad, de no prestar más atención que a su teléfono bajo su mesa. Esperando que después de haber dejado más de 15 mensajes a jimin le respondiera. No le había vuelto a ver, y aquello ya parecía que se iba a hacer una costumbre, su amigo aparecía y desaparecía tan rápido como lo veía. Apenas supo más de él tras una semana de ausencia a clases, y él, él simplemente había empeorado.

Sus padres trabajaban y su aspecto no parecía ser algo preocupante para ellos, o mejor dicho ellos ni siquiera levantaban la mirada para saludarle. Jimin ya no estaba, y Taehyung cada vez pasaba más tiempo con sus amigos, todos del equipo de fútbol, cosa que al castaño le aterrorizaba, no quería acercarse a ellos. No, ya había aceptado su soledad, su dolor, había aceptado los golpes y humillaciones, no había más que hacer. Una rutina era una rutina.

Y mientras más personas veían su aspecto menos se acercaban a él.

Jungkook había dejado de ser el chico flor.

Pero aquello no era dolor comparable a lo que sentiría aquel día, aquel dolor al cual no estaba preparado aquel dolor que sentiría como si le arrancaran el corazón para después aplastarlo .Jungkook no podía imaginar aquello peor.

Pero nunca pienses que algo no puede ir peor.





.・゜゜・.・゜゜・.・゜゜・.・゜゜・

Allí, de nuevo sentado solo, con su comida y a su alrededor aquellas personas. El castaño sabía lo que querían, así que les alargó una mano con dinero, que no tardaron en recoger. Los chicos se sentaron en la mesa con él. Dejando sus platos y comenzando a reír de chistes sin sentido. El menor quería correr, huir, pero sabía que mas temprano que tarde ellos le encontrarían, sabía que huir solo haría más golpes, más tortura, porque en realidad ellos ya no les interesaba que él saliera del equipo, ahora solo disfrutaban desquitándose con él.

Jungkook bajó su cabeza cuando un jugador sentado a su costado pasó un brazo sobre su cuello acercándole a su cuerpo, como si de manera amistosa se tratara.El castaño tragó en seco, sabía que comenzarían, y cada vez eran más originales, cada vez se les ocurría algo nuevo, algo más doloroso, algo más humillante.

¿Y qué cosa era más humillante que te golpearan frente a todo el mundo?

-Jungkook- habló un jugador llamándole la atención, otro chasqueando sus dedos y el resto mirándole con sus macabras sonrisas

-qué-balbuceó el castaño

-¿no escuchabas acaso?- el menor negó con la cabeza, justo al momento de sobresaltarse por el fuerte estruendo de su plato cayendo al suelo.

Jungkook se encogió sobre si mismo sin mirar a nadie, sin mirar nada pero sintiendo el silencio en el salón , sintiendo cada una de las miradas clavadas como alfileres en su piel, mientras iba a volver a ser castigado por la vida misma, el Karma quizás... algo malo tuvo que hacer en algún momento.

-recógelo, mira que desastre has montado- la voz se escuchaba lejana, pero aun así el castaño se arrodilló en el suelo recogiendo los platos y comida, justo antes de que otro plato cayera frente a él -ops

Y allí estaba, arrodillado, humillado, mientras todos le observaban y reían.

No tardó en llegar un plato de comida a deslizarse por su cabello y ropa, el castaño lo estaba esperando, lo sabía, no era la primera vez.Lo jugadores reían a carcajadas mientras el intentaba recoger el desastre que cada vez se agrandaba más. La indiferencia plasmada en su rostro.

El Chico Flor (Taekook /vkook )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora