Chapter 23

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— Es inútil. No hay nada que podamos usar?

— No puedo ver más que paja, y madera.— dijo removiendose desesperado en la silla, haciéndola rechinar. Eso le dio una idea.— P'Kit, la silla. Es frágil, hay que tratar de romperla.

— Hay que intentarlo.

Removiéndose con cuidado de no caer, si pasara no podrían levantarse. Yo hizo uso de toda su fuerza para presionar las patas de la silla, si libera por lo menos las piernas, tendría más libertad para resolver que hacer con sus brazos. Siguió insistiendo con fuerza, hasta que logró quebrar las patas delateras.

Pudo ponerse de pie, mientras Kit ya había quebrado una de las patas y seguía peleando con la otra, corrió hacía atrás con fuerza, embistiendo la pared de espaldas para así quebrar lo que queda de la silla. Desatando la soga de sus extremidades, y fue a ayudar a su amigo.

— ¡Maldición, esta silla es más dura de lo que parecía!— exclamó molesto Kit.

— Por suerte la mía no, o estaríamos en problemas.— dijo desatando los fuertes nudos.— Listo.

— Bien, gracias. Ahora busquemos una salida o algo.

Inspeccionaron las paredes en busca de algún tablón suelto, un agujero, lo que sea.

— Necesitamos un plan.— mencionó Kit sin detenerse.— Si Parkna vuelve y ve que nos liberamos, puede fácilmente dispararnos, seguimos en desventaja.

— Su mente es retorcida, él no va a dispararnos sería muy rápido. Él quiere vernos sufrir, por eso fue por gasolina, va a incendiar toda la cabaña con nosotros dentro.— dije analizando la macabra situación.— Pero tienes razón, si llega y nos encuentra libres, será un problema para nosotros.

— Necesitamos algo para defendernos.

— P'Kit, mira.— Yo apunto a uno de los tablones, pero este está enmohecido en un costado.

— ¿Moho? ¿Qué significa? Además de que hay filtraciones en esta cosa.

— Eso mismo. Las filtraciones enmohecen la madera, volviéndola más débil, si aplicamos la suficiente fuerza...

— Podemos romperla, y hacer un agujero.

— Exacto.

— Yo, eres un genio.

— No. Solo es Biofísica.— tomó los restos de la silla.— Usemos esto para empezar a golpear.

Golpear y golpear, iniciaron su plan, esperando diera resultado. Cuando la madera corroída fue cediendo, golpearon con los pies esta vez. Pero en ese momento escucharon a un auto detenerse.

Parkna había regresado.

— ¿Qué hacemos ahora?— susurró Kit.

— Tengo un plan, pero es muy loco.

— ¿Qué tanto?

Mientras tanto Parkna hablaba por teléfono, bajando de la camioneta.

— Es un placer ayudar, lo que sea por un amigo. Si, sé que es difícil para ti, además de costoso. Esto es bueno para mi, estoy cumpliendo con servicio comunitario y tú no tendrás que encargarte de destruir esta fea cabaña, los dos ganamos.— dice mientras vacía el galón del liquido inflamable por el frente de la cabaña.— Recuerda decirle eso a mi oficial de libertad. Descuida amigo, gracias a ti, en serio.

Finaliza la llamada, sacando las llaves y quitando la cadena. Arroja el recipiente vacío a un lado para abrir la puerta. Su sorpresa fue grande al entrar y notar que en la habitación solo se encontró a Wayo.

Mi vida sin ti [Libro 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora