Diez
Zayn estaba sentado en uno de los sillones, hace una hora habían vuelto del restaurante, no habían hablado mucho sobre el tema, porque los tres estaban perdidos en sus propios pensamientos, cómo en ese momento, el rubio estaba en otro sillón, pensativo, Louis en la habitación intentando dormir, y fallando por el extraño frío que sentía en ese momento. Zayn chasqueó su lengua sin saber si hablar o simplemente permanecer en silencio.
—Siempre fue tú destinado. — decidió hablar el rubio, Zayn levantó su mirada hacia él, escucharlo desde otra persona hacia a su alfa ronronear, pero su mente seguía en shock, no parecía querer captarlo.
Estuvo años junto a Gigi, planeando su futuro con ella, imaginando cómo sería sus vidas juntas, el ser su alfa y ella su omega, y ahora era tan extraño pensar ello, porque de alguna u otra forma el destino lo iba a encontrar con Louis, no importaba la situación.
—Si.. — respondió vagamente, Niall regostó su cabeza en el sillón, para él había sido una sorpresa también, tenía mucho tiempo de conocer a Gigi, y ver lo que significaban el uno para el otro, y saber que eso había cambiado, que ya no era Gigi la que conviviría con ellos si no Louis. —Muy profundo lo sentía, sólo, no quería admitirlo.
Niall asintió, entendiéndolo.
—A nadie le gustaría admitir que estuvo pasando parte de su tiempo con la persona que creyó sería su compañera el resto de tu vida, para que luego el destino te abofetee, haciéndote saber que estabas equivocado. — razonó el omega, mirando al alfa tan herido, el lugar olía un poco pesado, cualquier omega estando allí se hubiera ido, pero Niall no.
—Ahora me parece estupido pensar en ella y que me duela tanto. — confesó Zayn, Niall negó, levantase del sillón en el que se encontraba para sentarse en el que estaba su amigo. Zayn lo miró, su semblante triste, y el olor confirmándolo.
—Tienes derecho a sufrirla Zayn, a llorar por ella, es justo, pasaron mucho tiempo juntos independientemente de lo que el destino realmente tenía para ustedes, se enamoraron, se amaron y aún la amas, eso no tiene nada de malo, aparte de ser un alfa, eres una persona también, no dejes que tu parte animal te consuma. — le hablo, suavemente, con una sonrisa alentadora, Zayn le correspondió aquella sonrisa, y se acercó al rubio, abrazándolo, a pesar de su personalidad tan extrovertida, Niall era uno de los mejores amigos que podía tener.
—Gracias, Niall. — dijo, el omega sonrió contra los brazos de su amigo, le agradaba ser de ayuda en esos momentos, Zayn era un increíble alfa, que había estado para él toda su vida.
Alfa
Frío
Alfa
Zayn se separó del rubio, levantándose del sillón, su expresión de alerta al escuchar a su omega quejarse, Niall lo miró entendiendo.
—Y-yo.. — quiso explicarse el alfa a tal reacción repentina, Niall negó, deteniendo las disculpas de su amigo, él entendía cuando un omega necesitaba a su alfa. —Gracias, ya sabes dónde puedes dormir y dónde están las cosas.
—Si, si, ve.
Zayn sonrió, caminando hasta la habitación en la cual se encontraba Louis, abrió la puerta suavemente, asegurándose de que él omega no se encontrara dormido, el castaño se volteó, mirando a su alfa, relajó su rostro, el alfa se acercó a la cama, preguntando con su mirada qué ocurría, a pesar de poder sentirlo por el lazo quería que Louis tuviera el derecho de expresarse.
—H-hola. — habló el omega, sus dientes castañeaban entre ellos, y su cuerpo temblaba, Zayn lo miró enternecido. —N-no quise interrumpirte, es que, he intentado dormir, pero este frío no me deja, perdón por molestarte.
