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Harry no podía tener hijos.
______ no sabía cómo un hombre podía saber tal cosa, pero Harry  debía saberlo. Había sentido cierta angustia en su voz cuando se lo había contado. Sintió ganas de llorar.
Se sentó junto a la ventana con la cabeza apoyada contra el cristal. El fresco de la noche aún duraba. Se estaba bien. Le dolía la cabeza y tenía los ojos secos y polvorientos, como si tuviera arena dentro de ellos.
Le había costado una eternidad dormirse y luego tuvo sueños extraños. Pesadillas en realidad. Estaba buscando a un bebé, a veces por el campo, a veces por Londres. Hablaba con mucha gente, con Harry, con James, con una vieja, fea, tuerta y mellada. En uno de ellos sujetaba un niño, pero una mujer se lo arrebataba y desaparecía entre la niebla de Londres.
Apretó la cabeza aún más contra el cristal.
A lo mejor Harry se equivocaba. ¿Cómo podía estar completamente seguro? No estaba casado. Quizá, una vez casado descubriría que podía tener hijos.
Pero ¿y si estaba en lo cierto? Se frotó los ojos con fuerza pero no pudo evitar que le salieran unas lágrimas.
¿Le amaba lo bastante para desechar toda esperanza de tener alguna vez un hijo? No lo sabía.
Inhaló aire profunda y temblorosamente, secándose las lágrimas con el envés de la mano. Betty llegaría en cualquier momento con el chocolate. Sería mejor que se lavara la cara. No quería tener que darle explicaciones de por qué había estado llorando.
Según se levantaba, miró por la ventana. Había dos personas fuera, en la hierba. Era difícil distinguirlas desde lejos pero parecía que lady Felicity estaba con un hombre. No era ninguna sorpresa. ____ tan sólo esperaba que la chica encontrara un lugar apartado antes de hacer lo que se rumoreaba que hacía con los hombres.
Pero ¿quién era su acompañante? Era demasiado bajo para ser Harry, gracias a Dios, y demasiado ancho de espaldas para ser Liam o lord Peter. No estaría lord Niall enseñando a Felicity sus jardines, ¿verdad? ¿Quién estaba ahí fuera? De hecho, ninguno de los invitados tentaría a Felicity a salir de la cama, o a meterse en ella.
El hombre se quitó el sombrero de castor de copa alta y misterio resuelto. Un cabello oscuro con una mecha blanca resplandecía al sol. Lord Zayn había llegado. «Lord Mofeta», le llamaban los burgueses por su cabello, pero _____  pensaba que el apodo se ajustaba también a su personalidad. El hombre le había propuesto matrimonio una vez, a pesar que ella no le había dado ánimos en absoluto. Daba por hecho que lord Zayn no podía resistirse al brillo de su dote. Había intentado ser educada cuando le rechazó y, desde entonces, había intentado evitarle educadamente.
Se apartó de la ventana para echarse agua en la cara. Iba a ser extremadamente difícil evitarle en la fiesta.

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— ¿Te has levantado temprano para darme la bienvenida, Felicity? Si hubiera sabido que estabas aquí, habría llegado ayer para evitarte el problema de tener que levantarte de la cama.
Zayn se acercó a ella, pero se apartó.
—Aquí, en frente de la casa, no.
— ¿Por qué no? —Se quitó el sombrero y miró al edifico—. ¿No me digas que te has vuelto tímida?
—No, por supuesto que no. Pero la habitación de Harry da en esta dirección.
—Ah, aún sigues intentando cazar al conde, ¿no?
—Naturalmente. —Se giró y empezó a caminar sobre la hierba. Andrew se puso a su lado—. Puede que necesite tu ayuda.
— ¿En serio? —La miró con lascivia—. Te costará lo tuyo.
Zayn le gustaba. No se sobrecargaba con escrúpulos.
—Esperaba que así fuera. —Se dirigió hacia el camino de gravilla y lo siguió a través de los jardines afrancesados de Niall, pasados los parterres y los ridículos arbustos con forma piramidal y esférica, bajo un arco. Giró a la izquierda, entre dos setos hasta llegar al interior del decorado jardín. Sabía exactamente a dónde iba. Había encontrado aquel lugar ayer mientras buscaba a Harry.
Zayn se detuvo para examinar unos arbustos podados que formaban una orgia. Bueno, no una orgía para Felicity; si discernía el sexo de los tres arbustos correctamente, había sólo un hombre y tres mujeres.
—El jardinero de Niall es bastante creativo.
—Sí, lo sé. Vamos,Zayn. —Recorrió su frente con los dedos—. Hay un lugar ahí delante donde podemos... hablar.
— ¿Dónde tengamos las lenguas ocupadas? Estoy listo para una larga y profunda charla.
—Bien. —Se humedeció los labios, notando la extensión de los hombros de Zayn, el músculo en sus muslos, era más bajo que Harry, pero parecía mucho más grande. La nariz, las manos, el... Sentía escalofríos por la excitación que le llegaba hasta la entrepierna.
Zayn parecía que había estado cargando cajas en el puerto en vez de cajas de vino en las salas de estar de los aristócratas.
—Ya hemos llegado. —Pasó por entre unos setos altos y caminó hacia el banco de piedra que había en el centro de la densa zona. Estaban alejados de la casa, pero cualquiera que pasara junto al claro del jardín les vería. La expectación volvió a darle rápidos escalofríos. Juguetear a puerta cerrada era aburrido. La amenaza de ser descubiertos añadía un poco de picante a cualquier encuentro.
—Los putos arbustos de Niall son bastante inspiradores, Feli. Le dan a cualquiera todo tipo de ideas interesantes. —Zayn le puso una mano en la mejilla y le acarició el labio inferior—. Puede que me cueste trabajo decidir la mejor manera que me devuelvas el favor.
Ladeó la cabeza de tal manera que pudo lamerle el pulgar.
—Cogí las esposas y el látigo cuando supe que venías.
— ¿De verdad? —La miró con ojos intensos y avispados—. Maravilloso. ¿Qué necesitas que haga?
Una idea obscena le vino a la mente pero se contuvo.
—Sabes que tengo planeado casarme con Harry.
—Toda la burguesía lo sabe. —Levantó una ceja—. Y sabes que no soy íntimo suyo. Si buscas a alguien que le persuada, yo no soy tu hombre.
Felicity se sentó en el banco. Aún estaba frío y húmedo por el rocío. Era magnifico sentirlo contra su calor.
—Yo me encargaré de Harry. Tengo otro trabajo para ti. —Levantó la mirada hacia él—. Tiene que ver con una mujer.
— ¿De veras? —Se acercó y se quedó de pie junto a ella.
Felicity puso la mano delante de sus pantalones y sonrió. Ya la tenía dura.
—Puede que implique un estupro.
El bulto se le movió.
— ¿En serio? Suena muy interesante. Puede que sea yo quien tenga que pagarte.
—Probablemente. Creo que te encantará hacerlo con esta particular joven dama.
—Pero requerirá que me case con ella.
Felicity se encogió de hombros.

—Es lo más probable. No obstante, viene con un montón de dinero, y si te parece aburrida, estaré encantada de entretenerte yo misma.
Dejó uno de sus pechos al descubierto. Arqueó el cuerpo, haciéndole más fácil que le apretara el pezón. Le encantaba sentir el sol y sus dedos en la piel.
— ¿Quién es ella? ¿Lady Caroline? Es gorda y fea.
—No, no es lady Caroline. —Felicity rió con burla—. Una vez le propusiste matrimonio a esta dama.
— ¿Lo hice? —Zayn le apretó con más fuerza y ella aulló—. No me digas que es lady _____  a quien quieres que desvirgue.
—Eres tan astuto...
—Dios. —La besó, clavándole la lengua hasta la garganta—. Me encantaría ponerme encima de esa puta. —le agarró los dos pechos, apretándoles con brusquedad—. Tú eliges, Felicity. ¿Cómo quieres que lo haga? Lo haré como más te guste.
Felicity empezó a desabrocharle el pantalón.
—Deberíamos, para terminar, hablar de las condiciones.
—Ya he oído bastante. Estaré encantado de llevarla a cualquier lado, donde tú quieras. Incluso en el salón de baile de Almack, delante de las narices de todos.
— ¿Delante de su hermano?
Zayn dejó de mover las manos.
—Joder, no me pidas eso, Feli. Me mataría antes de metérsela.
Felicity rió.
—No, no te pediría eso. Y no estoy del todo segura que sea virgen, así que no te sientas decepcionado si no hay sangre.
— ¿No? ¿Esa pequeña puritana se ha abierto de piernas delante de alguien? Me siento engañado. ¿Con quién ha estado fornicando?
—Harry.
Zayn rio.
— ¿Harry? Todo lo que puedo decir es que el tipo apenas sabe cómo desabrocharse los pantalones para mear.
Felicity terminó de desabrochar los botones de los pantalones de Zayn y dejó al descubierto su encantador y grueso aparato.
—Al parecer, domina la técnica. Estoy completamente segura que estuvo en su habitación, en su cama y desnudo, antes de anoche. Y los vi salir del invernadero de Niall anoche. Los dos parecían bastante desaliñados, como si hubiesen estado haciendo algo más aparte de admirar las plantas de Niall.
Zayn  hizo un gesto de negación con la cabeza.
—Fascinante. —Luego inhaló aire mientras Felicity le inhalaba a él.
—Lo más fascinante es que no ha habido ningún anuncio de boda. Quiero que siga siendo así, al menos en lo que respecta a lady ______. El único anuncio que quiero que haya es el del nombre de Harry y el mío.
Zayn  la cogió de los pechos con fuerza. Ah. Si fuera el hijo mayor, heredaría un ducado. Pero tenía tres hermanos mayores con buena salud. Sólo un ******* apostaría a que sería él quien consiguiera el título. Y ella no era *******.
Felicity acarició el encantador y enorme órgano entre las manos. Si una parte de Harry resultaba ser pequeña y decepcionante, podía imaginar la parte que no lo era: los bolsillos. La música de monedas tintineando conseguiría que bailara muchos valses de alcoba.
—La fiesta continuará mañana en alguna ruina, creo que Niall dijo que en un viejo castillo. Habrá muchos lugares donde podrás robarle algunos minutos a solas. —Llevó los dedos desde las bolitas que tenía entre los pantalones hasta la punta—. No debería llevarte mucho tiempo realizar la hazaña.
Zayn rió.
—Casi nada, si acaso unos segundos. Pero espero tener más tiempo. Me gustaría befarme de ella un poco. Ver si consigo hacer que grite. Dios, eso me encantaría. La putita se comportó con tanta frialdad cuando rechazó mi petición...
Felicity le lamió una pequeña humedad salobre de la punta.
—Podrás bromear con ella hoy, será divertido de ver.
—Sí. —Le frotó el pezón con los dedos pulgar e índice—. Se me ocurren muchas maneras de hacer que se sienta incómoda.
—No te excedas. No queremos que se asuste y salga huyendo hasta de tu sombra.
Felicity se la llevó a la boca de nuevo. ¿Quería tenerle ahí o por detrás? Los dos lados tenían sus ventajas.
Zayn tenía ahora las manos en su cabello, sujetándola hacia él. Habían hablado suficiente de Harry y lady ______. Ella se echó hacia atrás. Zayn la mantuvo un poco más de lo que ella hubiese querido y luego la soltó.
—Prefieres por el otro lado, ¿verdad? —La levantó y le dio la vuelta. Felicity sentía cómo la erección empujaba contra ella—. ¿Tienes miedo que alguien nos descubra?
Le apretaba los pechos con las dos manos. Le pellizcaba los pezones con los dedos. Ella jadeó y se inclinó.
—Es parte de la diversión. Ahh...
Felicity dio el visto bueno con un grito mientras Zayn expresaba su satisfacción con un gruñido.
Cuando el señor Dodsworth llegó corriendo para investigar acerca del alboroto, los dos estaban sentados discretamente en el banco, el uno al lado del otro.

El Conde Desnudo - Harry Styles -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora