INKED ♡━мιиѕυиg.|| αdαpтαcιóɴ

「82」

Minho tuvo que concentrarse para respirar, se trató de convencer de que Jackson mentía, pero en el fondo sabía que no era así.

Entonces intentó convencerse de que eso no le sucedería a Jisung. No podía odiarlo. El solo pensamiento de odiar a Jisung se le hacía tan imposible, y estaba seguro de que su novio se sentía de la misma manera.

Escuchó los sonidos del ascensor, se miró al espejo para intentar parecer natural cuando saliera de él. Le entregó la bolsa de la comida a Eun Hye y pidió que lo actualizara, ya estaba a punto de terminar.

Unos minutos después vio muchas personas entrando y saliendo de la habitación, seguramente limpiando, trató de convencer olvidarse un momento de lo que dijo Jackson, ya lo discutiría más tarde con Changbin. Finalmente, un hombre fornido que se había presentado como el encargado de la operación salió de la sala.

—Todo ha salido perfecto —dijo Woojin con una sonrisa, tratando de tranquilizar a los presentes—. Ahora mismo está dormido gracias a la anestesia, pueden verlo, en cuanto despierte alguien será enviado para ayudar.

Siguiente a eso, estrechó las manos de los tres y se dirigió al ascensor.

Jisung estaba acostado en una camilla en el centro de la habitación, una venda se encontraba alrededor de sus ojos, Minho vio una pequeña línea en la parte de atrás de su cabeza. Eun Hye y su esposo se sentaron en el sofá que se encontraba ahí a esperar que Jisung despertara, y Minho se quedó de pie a su lado, tomó la mano de su novio, vio la marca de su cuello intacta y alivio lo llenó. No quería pensar en lo que podría pasar.

Sabía que Jisung no iba a sentirlo al instante, según lo que dijo Jackson fue algo gradual, así que si algo iba a pasar tenía tiempo de solucionarlo.

Habían muchas cosas diferentes en lo que le hicieron a Jackson y lo que le hicieron a Jisung, empezando con que a Jisung le habían hecho cientos de estudios y había sido llevado a cabo por profesionales, no como Jackson que la persona que lo operó no se había ni graduado.

Pasó más o menos una hora cuando Jisung empezó a despertar, y Minho se encargó de presionar un botón en la pared para llamar a alguien. Una chica entró a la habitación, después de saludar empezó a revisar los signos vitales de Jisung, el corazón de Jisung empezaba a acelerarse mientras despertaba más y más.

—En cuanto se quite la venda, si puede ver tenemos que tener cuidado ya que sus ojos no están acostumbrados a la luz —la chica dijo, apagó las luces de la habitación para que la única luz que entrará fuera la natural, y bajó una persiana para que fuera aún más tenue. Presionó un botón en la camilla de Jisung que hizo que levantara la espalda, quedando sentado.

—Volveré en unos minutos para darles indicaciones.

Jisung dio un apretón a la mano de Minho.

—Estoy listo, déjame verte, amor.