INKED ♡━мιиѕυиg.|| αdαpтαcιóɴ

「36」

Minho llevó a Jisung hasta su casa, besándose sin aliento en la puerta.

—Hasta mañana, amor —fue Jisung quien lo dijo, Minho lo abrazó con fuerza.

—No te despidas aún —Minho lo estrujó entre sus brazos.

Jisung rió. — ¿No te quieres quedar?

—Mhm. Claro que quiero, pero debo recordarte que arruinamos mi tarea, así que tengo que volver a hacerla.

—Para que la dejabas encima de la cama, tonto —Jisung negó con la cabeza.

— ¿Cómo iba yo a saber que tu semen iba a alcanzar hasta ahí? —Minho dijo, y pronto ambos estaban riéndose.

—Mañana, entonces —dijo Jisung y lo besó por última vez antes de entrar a casa.

Minho quedó sonriendo, incluso después de que Jisung entró, y empezó a caminar de vuelta. Era difícil entender como todo con Jisung parecía mejor, pero ahora estaba de vuelta a pensar en conspiraciones, pensó en su vida sin las marcas, en su vida sin Jisung y creía que no era capaz de soportar algo así, porque nunca había sido tan feliz, pero se sintió mal al instante, porque si bien su tatuaje arregló su vida, había dañado la de muchos, como la de su propia madre, que sin las marcas seguiría con Siwon. (aunque eso no era tan bueno), le habría ahorrado tanto dolor.

Se forzó a quitar esos pensamientos de su cabeza. Este era el mundo ahora, y eso no iba a cambiar.

—🌈

Lamento haber tardado tanto en actualizar. Pero ahora que ya acabé mi semestre, espero actualizar más seguido.