08. Guardarropa

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Auron

Me sentía muy culpable con lo que le pasaba a Luzu, me fastidiaba que solo había bastado un día para que alguien me quisiera hacer una broma y sin ningún motivo, tenía muy claro que fue Fargan, no tenía pruebas, pero era el único que sabía sobre los libros, ya me la pagará y eso lo tengo clarísimo.

Llegué al salón y cuando entre gire a ver a Willy y Fargan que estaban mirándome sorprendidos, ahora estaba más que confirmado que no solo fue Fargan, busqué a Vegetta, que cuando lo encontré estaba sentado con Rubius.

-Hola Vegetta, eh no sé ni cómo explicar mi bienvenida al cole, pero alguien me quiso jugar una broma estúpida y Luzu lo impidió, por eso ahora esta lleno de pintura.-

-Vaya, quisiera sorprenderme, pero algún día debía tocarle a él, esta bien?- Bueno, al menos Luzu tenía razón y no era un caso aislado, aunque no sabía si eso era bueno o malo.

-Pues si... Siempre esta en modo cuento de hadas?- Luzu era sorprendente, no sabía si no había ni un gramo de odio en su cuerpo o si tenía tal capacidad para contenerlo.

-Y en este caso el sería tu príncipe encantador, chaval- Rubius dijo eso con una sonrisa en la cara y empezó a reír y Vegetta igual pero mucho más bajo.

-Bueno, Ruben tiene un poco de razón en eso, igual Luzu siempre es así, un sacrificado por el otro-

-Vegetta! No me digas Ruben, así solo me dice mi madre, dime Rubius-

-Si si, lo que digas, Ruben- La pelea que empezaba me quitaba la existencia frente a ambos y solo podía verlos atacarse.

-Dos podemos jugar a eso, Samu-
Ignoré sus comentarios tontos que comenzaban a ser una pelea interrumpiendo.

-No tendrás algo de ropa para que se pueda cambiar?-

-Mmm...no- Vegetta estaba pensativo.

-Oh! Yo tengo!- Rubius levantaba la mano.

-Me le podrías prestar? Bueno a Luzu-

-Claro, ven, adiós Samu- Vegetta quedó con ganas de replicar, pero Rubius me sacó rápido del salón.

Nos dirigimos a su casillero, lo abrió y...joder, apestaba horrible y pude ver de todo menos libros.

-Mmm...recordaba tenerlo aquí, puedes sostener esto?-

-Si,claro, bonita lata de refresco, las coleccionas?-No podía creer que no pudiera tirar una lata en un basurero.

-No seas criticón, que no ves que Luzu te necesita, soporta un poco- después de decir eso me puso un sándwich rancio en la mano, no dure ni dos segundos y se lo lancé a la cara.

-Tranquilo, macho!- Rubius tenía esa característica de reírse de todo un poco.

-Bueno no me toques las pelotas poniéndome mierdas en la mano, tenme un poco de respeto - Quería seguir con mi alegato, pero me ví interrumpido.

-Listo! Esta es mi preciosa- Estaba en un punto donde no podía creer lo que veía, la sudadera más random del mundo, era como con estampados de un cómic con caras de chicas teniendo un orgasmo.-También tenía el pans de esta preciosura, pero no recuerdo donde, solo tengo un deportivo negro, no se ve tan bien, te sirve?-

-De donde sacas tú estas cosas? Me estas empezando a dar un poco de miedo-

-Pero qué dices?! Si es hermosa! Mirala!- La tenía extendida y la acercó a mi cara, por suerte no olía mal, creo que estaba dentro de una bolsa o mochila.

-Tienes problemas, pero ya te ayudaré a buscar un psicólogo luego, mientras debo ir con Luzu, gracias por la ropa - tomé la ropa que me ofrecía aunque su cara era de disgusto por mi último comentario, justo cuando me giré para irme lo oí.

-Corre Cenicienta que son casi las doce - Revisé mi reloj y entendí todo, habían pasado 5 minutos de la clase, igual no me importaba perder la clase, pero no sabía si Luzu pensaba igual, corrí a los vestidores entré, pero no oía agua y no había nadie fuera.

-Luzu!-

-Auroncito, aquí!- la voz se escuchaba en una de las duchas me acerqué.

-Luzu no has terminado de bañarte?-

-Si, pero no tenía toalla y no había algo con que secarme aquí- Luzu tenía una risa nerviosa que me hacia sentir mal, lo más probable es que tuviera frío o que estuviera incómodo.

-Bueno, he conseguido algo de ropa, pero no una toalla, puedes abrir la puerta?- Quería apresurarme a ayudarlo y sacarlo de este momento tan horrible.

-Muchas gracias, Auroncito- Después de eso Luzu abrió la puerta un poco, pude verle el cabello mojado en la cara; tenía una sonrisa enorme y agua escurriendo por su torso. Sin darme cuenta me quede viéndolo hasta que al contrario de mi Luzu se dio cuenta, se sonrojó y cerró la puerta rapidamente después de tomar la ropa. Él era muy guapo, no pude ni siquiera apartar mi mirada de él el tiempo que estuvo mirándome... Me imagino que Lana no debe ser la única chica interesada en el.

-Oye Auron, Vegetta te prestó esta mierda?- Luzu se estaba carcajeándose sin parar.- ¿Pero que coño es esto?- Salí de mis pensamientos para regresar a la plática.

-No, es de Rubius, es lo único que pude conseguir, perdón, pero se te va a ver bien eh, algo fuera de la rutina- Esperaba que Luzu siguiera riendo hasta que se diera cuenta de que debería usarlo todo el día.

-De dónde coño saca Rabis todas estas cosas? Todo el mundo va a pensar que estoy pasando por mi etapa otaku- No pude soportar la risa.

-Lo más raro es que vas a salir duchado con esa cosa-

-Espero no romper este universo- Después de eso Luzu salió y se veía muy bien, demasiado para traer la mierda esa de sudadera y eso era bastante para el esperpento que usaba.

-Oye y por qué se te ve tan bien?- Quise jugar un poco con Luzu, haciendo que se sonrojara un poco.

-No lo creo, es demasiado rara para quedarle bien a cualquier persona del cosmos-

-Bueno, quieres ir a esperar la segunda clase?-

-Oh fuck! No me digas que ya nos perdimos la primera-

-Exactamente, pero tampoco se veía que fuera muy necesaria, por ahora podemos quedarnos en el patio, haciendo actividades realmente didácticas, como comer o ver a las palomas caminar- Luzu rió y suspiró resignado

-Ya después le pediré los apuntes a Vegetta, vamos a nutrir nuestras mentes con tus propuestas tan interesantes.-

Adorable Encuentro l Donde viven las historias. Descúbrelo ahora