Cosas del Destino. (Avocato x Lectora)

Episodio 5.

Avocato estaba sentado, esperándome con su galleta en la mano.

- Dejemos a esos tortolitos solos. ¿No crees?- Me dijo, me sonrojé inmediatamente.- Ven siéntate.

- Mu-muy bi-bien- Tartamudeé. -Me senté y lo miré a los ojos. Puse mi mano sobre la mesa, y él puso la de él sobre la mía. En ese momento, me dí cuenta de que él sentía lo mismo por mí, que lo que yo siento por él, amor- Nunca me dijiste cómo es Ventrexia, Avocato.

- ¿Quieres que te sea sincero? 

- Si.

- Es un planeta maldito.- Amo cuando dice malas palabras- Si eres humano el Señor Comandante te mataría.- Me asusté. Él se dió cuenta de que me había asustado, entonces, puso su otra mano debajo de la mía.- Pero si no quieres, no vayas, y creeme que yo nunca te lastimaría, linda. Ahora estoy del otro bando.

- Pero... ¿Por qué cambiaste?

- Mira, yo era la mano derecha del Señor Comandante, el Amo de la Muerte. Todos seguían mis órdenes, siempre y cuando vinieran de la boca del Señor Comandante. Pero un día, no pidió lealtad matando a nuestro primogénito. Todos lo hicieron, menos yo. Entonces el Señor Comandante secuestró a Little Cato. Y eso nunca se le perdono a nadie.

- ¿Little Cato es tu hijo?

- Sí, y aún tengo fe en que siga vivo.

- Si tu tienes fe, yo también, Avocato. Iremos por tu hijo. Pase lo que pase.- Lo miré a los ojos, él me miró a los míos.- Lo juro.

- Muy bien, solo con que tú estés de acuerdo me basta, gracias. Te lo agradezco mucho.- Dijo sin despegar sus ojos de los míos. Me penetraron el cuerpo hasta llegar a mi corazón, me enamoré.

"Oh Dios, me he enamorado de un Ventrexiano" Pensé...

"Nunca creí que pasaría"

"Él es guapísimo"

- Yo...- En ese momento Gary atravesó el Galaxia Uno hasta llegar a nosotros, por segunda vez nos soltamos las manos inmediatamente, Gary se nos quedó viendo con cara de extrañado, y... salió corriendo a su habitación llorando.- ¿Qué le pasa?- Corrí detrás de él, y Avocato detrás mío.

- ¿Por qué?... Lo más lógico sería que hayas fingido amnesia, yo hubiera fingido amnesia Quinn.

- ¿Que pasó? Oye bro, dime.- Le pregunté.

- Pues... ahora Quinn no sabe quién soy...

- Ella es una cualquiera, hay muchas mujeres allá afuera.

- Creo que sí.- Llegó Quinn y salí de la habitación de Gary para dejarlos solos, de nuevo. Entré a mi habitación y Avocato tocó mi puerta semiabierta.

- ¿Están bien ambos?- Preguntó, preocupado.

- Yo si, Gary no. Resulta que Quinn no se acuerda quién es Gary.- Se sentó al lado mío en la cama, y me abrazó. Le respondí el abrazo.

- Que bien que estés tú bien. Es lo único que me importa ahora.- Me sonrojé, soltó el abrazo y me miró a la cara. Me quitó el pelo de la cara,- Eres hermosa.