Episodio 20.

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- Bueno... está bien. Tal vez no me recuerdes, pero... te extrañé mucho, Avocato.- Lo abracé, y le dí un beso en la mejilla. Por un momento, sus piernas se debilitaron, casi se cae.- ¿Estás bien?- Lo miré a la cara, sus pupilas estaban del tamaño de sus ojos, dejándolos completamente negros...- Dime Avocato... ¿Qué te pasa?

- Nada, solo... déjame solo un momento...-  Me quedé petrificada.- ¡Largo!

Me fui caminando y oí como Avocato le pegó al vidrio, casi a punto de romperlo.

Esas palabras me quebraron el corazón, solo... nunca creí que alguien como Avocato me fuera a hablar así... Empecé a llorar como nunca lo he hecho en mi vida, y corrí a través de la nave y me topé con el resto de la tripulación en el Puente.

- ¿Qué te pasa _______?- Me preguntó Gary.- Oh, Avocato...

- ¡Callate Gary! ¿Dónde está mi habitación? ¡Llévame a mi habitación, maldita sea!

- Eh... bueno.- Me agarró mi mano y me condujo a través del pasillo. Abrió una puerta y había una habitación enorme, muy buen decorada, con flores, cuadros, y... una foto de Gary y yo cuando aún éramos niños, y papá...

- ¿Hiciste esto... para mí?

- Si...

- Gracias.- Abracé a mi hermano.

Entré en mi nueva habitación y me senté en la cama a pensar...

" ¿Por qué?"

"Lo salvé de morir y... ¿Así me agradece?"

"Yo... nunca creí que Avocato me fuera a hablar así..."

"Pero... no es culpa de él"

"No puedo culpar a Avocato de que esa explosión le haya borrado la memoria..."

"Pero eso no le da derecho a hablarme con ese tono"

"Pero..."

"¡No! No es momento de peros"

"Aún así, no creo que Avocato me haya hablado así por nada."

Alguien tocó a mi puerta, me sequé mis lágrimás.

- Pase...- Inmediatamente la puerta se abrió y la figura de Avocato apareció ante mí.- Oh, hola.



Cosas del Destino. (Avocato x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora