Ella no sabía cómo reaccionar después de escuchar aquello que acababa de pasar. Buba le había pedido que fuese a buscar al italiano, ninguno lo había visto salir de la habitación así que la mujer tuvo que deducir que estaría en su habitación, pero grata fue su sorpresa al escuchar la conversación que Bruno estaba teniendo con alguien. ¿Qué lo descubrieran? ¿Matar a Buba? No podía ser cierto... dio un paso hacia atrás tratando de irse, pero para su desgracia una de las maderas del suelo rechinó fuertemente, obligándola reprimir un grito. Segundos después la puerta se abrió dejando ver al italiano con su cara de siempre.
-Oh, Shiva, ¿Necesitas algo?- ella frunció el ceño impotente -pasa un momento y hablamos dentro ¿Quieres?- preguntó dejándole espacio en la puerta para entrar, pero ella dio otro paso dispuesta a correr en cuanto tuviese la oportunidad, pero su plan fue desbaratado al sentir un fuerte agarre en su brazo, lastimándola -no me hagas usar la fuerza, sabes que no quieres que lo haga...- explicó con la voz tranquila -pasa- la mujer se liberó del agarre del chico de un movimiento brusco para seguidamente entrar en la habitación, temiendo por su vida -siéntate en la cama, tenemos que hablar- ordenó él apoyándose sobre un escritorio que había en la sala.
-Prefiero estar de pie, gracias- escupió llena de odio imitando su posición frente a él, Bruno rio ante su atrevimiento.
- ¿Cuánto tiempo más vas a fingir tener una seguridad que no tienes? - preguntó divertido.
- ¿Perdona? - preguntó apretando más aún el entrecejo.
-Nada, olvídalo- respondió riéndose levemente -pero cambiando de tema- Shiva tragó pesado ante una mirada que nunca había visto en el rubio, aquella daba miedo, incluso más que cuando Buba se enfadaba. Era como mirar a una cobra a los ojos - ¿Qué has oído? - preguntó sin dar muchos rodeos. Y al igual que una cobra no sabías por dónde atacaría.
-Lo suficiente como para que Buba y Blasko te maten y te tiren a un río hijo de puta- dijo alzando levemente la voz. Bruno apretó una de sus manos aun cruzado de brazos.
-No lo harás- explicó volviendo a un semblante impasible.
- ¿Qué te hace pensar eso? - dijo elevando una ceja la mujer. Bruno volvió a cambiar su gesto a uno entre divertido y coqueto.
-Se muchas cosas de ti Shiva- explicó desenredando sus brazos y dirigiéndolos a su espalda -sé que eres emigrante ilegal- siguió explicando, acercándose a ella y poniéndose muy cerca de su rostro prosiguió -y también sé que no debes volver a la India- aquello asustó a la nombrada - ¿Qué crees que te harían tu familia después de escapar de una boda que los haría ricos...?
- ¿Cómo sabes qué...? - fue interrumpida.
-Se muchas cosas de todos vosotros. Y también sé que puedo enviarte de nuevo a ese país solo...- chasqueó los dedos delante del rostro de la asustada mujer -chasquear los dedos- recalcó con burla.
- ¿Y quieres que no hable? - preguntó tratando de mantener la calma.
-No exactamente, ahora que sabes la verdad... quiero que te marches- explicó echándose hacia atrás.
- ¿Qué...? - tragó pesado - ¿Que me marche? - preguntó temiendo por su vida.
-Exacto, vete. Márchate de la ciudad, del país, abandona BubaStreet, simplemente...- pensó por un momento la mejor manera de decirlo -sal de mi camino- explicó finalmente.
- ¿Y si me niego? - no pudo ver nada de lo que había ocurrido. De un momento a otro estaba tumbada sobre la cama con las manos sobre su cabeza y con un cuchillo apoyado en la garganta, mientras encima de ella estaba el rubio con una mirada desquiciada, haciendo que respirara entrecortadamente.

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Buba el Patrón. Reeditado
HumorLa idea de "Mafia" a cambiado radicalmente con el tiempo, pero todo lo que conozcas sobre este tema dará un giro de tuerca cuando el Cartel de BubaStreet, una Mafia diferente, llegue a la cima. Sigue las aventuras de Buba el Patrón, un negro cocain...