Rodeada De Idiotas

Temporada 2. #11

Mi vida sigue hecha un lío. Hay muchas cosas en las que estoy confundida o incluso triste. Os explico. Desde mi discusión con Aarón hace exactamente 6 días no sé nada sobre él. He intentado contactar con él de muchas maneras; por mensaje, llamándolo o incluso por e-mail pero él parece ignorarme. En mi vida solo he tenido tres novios que ya conocéis: Darek, Ian y Aarón y parece que siempre acabo metiendo la pata con cada uno de ellos. Siempre hay algo que hace que nuestra relación se rompa o se deteriore. Asi que, no sé que pensar. Por otro lado, Ian ha estado mandandome mensajes y ha intentado quedar conmigo pero después de todo lo que pasó con Aarón he intentado evitarlo. Es una situación un tanto incómoda el tenerlo cerca. A una parte de mi le gusta que esté pendiente de como estoy porque de alguna forma eso significa que le sigo importando, pero por otra quiero mantenerme al margen debido a esta situación tan delicada en la que me encuentro con respecto a mi relación con Aarón.

Me esfuerzo todo lo que puedo para que todo esto no afecte en mi trabajo. Parece que disimulo bastante bien porque ninguno de mis dos compañeros parece haberse dado cuenta de nada.

-Grace, son las 18,08h. Puedes irte ya.- Dice Luke desde su mesa de trabajo frente a la mía.-Hace 8 minutos que deberías haber salido.- Ríe.

-Ya Luke, pero tengo que acabar esta colección qu...-

-Terminala mañana.- Responde sin darme tiempo a acabar la frase.

-No creo que a Tyler le guste el que me vaya sin acabar mi trabajo.- Digo recostándome sobre la silla.

-Tranquila, yo te cubro.- Responde.

-¿De verdad?.- Pregunto con demasiada emoción de repente. La verdad es que tengo bastantes ganas de llegar al hotel y simplemente dormir. Llevo demasiadas horas metidas en esta oficina.

-Claro, no te preocupes. Vete a casa.- Dice sonriendo ampliamente.

-Luke, te amo, te amo. te amo.- Digo después de levantarme y abrazarlo.

-Basta Grace, que tengo novia.- Se ríe.

-Lo sé, lo sé tranquilo.- Comento mientras le guiño un ojo.-Muchas gracias Luke, eres el mejor.- Digo en voz alta saliendo de el pequeño departamento mientras escucho la risa de Luke ante mi comentario. Mientras camino me coloco el abrigo porque fuera hace tanto frío que incluso da la sensación de que en poco tiempo nevará.

-¡Grace!.- Giro sobre mis talones.

-Alejandra, ¿Qué ocurre?.- Pregunto curiosa.

-Te buscan.-

-¿A mi?, ¿Quién?.-

-Si a ti.¿A quién si no?.- Rueda los ojos.- Es un chico guapo, alto y moreno.- Sobran las palabras para adivinar quién es ese chico.

-Creo que ya sé quién es...- Murmuro.

-Bien, pues está esperándote en recepción. Baja a buscarlo.- Dice mientras se va moviendo exageradamente sus caderas por el pasillo. Es su forma de caminar.

Supongo.

Últimamente no sé que es lo que le pasa a esta chica que está muy antipática. Almenos conmigo. Al principio me caía bien pero no sé que le ha pasado. El estrés, supongo. Me encojo de hombros y camino hacia recepción. Por el camino me despido de varias chicas, entre ellas maquilladoras o modelos que he conocido en estos últimos días y que me han caido lo suficientemente bien como para considerar ser su amiga. O almenos simpática con ellas. Llego a recepción y él se encuentra como siempre apoyado en el mostrador revisando su movil. Me acerco sigilosamente a él para que no se dé cuenta de mi presencia. Cuando estoy lo suficientemente cerca de él, lo sorprendo asustándolo por detrás. Él se gira con cara confusión pero enseguida se le dibuja una sonrisa al comprobar que era yo.

-Grace... Me has asustado.- Dice mientras me abraza.

-Si, parece que últimamente es costumbre el asustarte ¿no?.- Río al recordar la broma de la otra vez.

-Parece que si.- Suspira.

-Bueno y... no quiero parecer grosera pero ¿A qué has venido exactamente?.- Pregunto.

-A invitarte a comer.-

-¿Qué?.- Pregunto con la voz más aguda de lo normal.

-He venido a invitarte a comer. Siempre te mandaba mensajes y decías que no así que pensé en venir a buscarte para que así no te pudieses negar.- Responde jugando con el forro de el móvil.

-Eres imposible.- Digo mirándolo con una sonrisa que no he podido evitar.

-Hola.- Dice Alejandra coqueta volviendo a su puesto de trabajo.

-Hola.- Responde Ian tan... ¡Agh!, ¡No puedo!.

-Bueno Ale, nosotros nos vamos. Adiós, pásalo bien...- Digo arrastrando a el moreno fuera de las oficinas. Me golpeo mentalmente por el repentino ataque de celos que acabo de tener.

-Grace..- Dice Ian después de varios minutos de silencio.

-Dime...-

-¿Acabas de tener un ataque de celos solo porque la chica me ha dicho ''hola''?.- Pregunta mirándome ¿Sabeis ese emoticono con la carita pervertida del whatsapp?. Pues la cara de Ian una excelente copia de ese emoticono.

-No.- Espeto.

-Ya, claro. Haré como que te creo.- Dice aún sin quitar esa cara.

-¿Dónde iremos?.- Digo intentando cambiar de tema.

-Donde quieras.-

-Sorpréndeme.- Lo miro divertida.

-Quieres que te sorprenda nena, te puedo sorprender de muchas maner...- Freno en seco al notar que Ian no camina a mi lado. Giro sobre mis talones y casi al mismo tiempo tengo que tirarme a el suelo de la risa. Ian acaba de pisar algunos residuos que un perro decidió dejar justo en mitad de la acera.

O, excrementos hablando mal y pronto.

-¡Jode.r!.- Se queja mientras arrastra su zapato por la acera.-No te rías Grace, estoy haciendo el ridículo.- Se queja.

-Es... por eso mismo por lo que me estoy riendo...-Hago el intento respirar profundamente.- ¡Es que es muy gracioso!.-

-Grace hasta la ancianita que esta sentada en el banco se ríe de mi, por favor. No me dejes en más ridículo.- Comenta sonrojado.

-Vale, vale, Lo siento.- Observo a la ancianita que nos observa sonriendo desde el banco.-Awww, ¡si se ha sonrojado!- Digo picándole la mejilla.

-Cállate Grace.- Comenta divertido. -¿Aarón no se enfadará si... nos ve aquí juntos?.- Me tenso un poco al recordar su nombre.

-No me hables de Aarón.- Respondo cortante.

-¿Porqué?, ¿Qué ha pasado?.-

-Nada.- Camino más rápido adelantándolo para evitar el tema.

-Grace.- Me sujeta la muñeca.-¿Qué ha pasado?.- Pregunta haciendo pausa en cada palabra.

-Me he peleado con él.- Murmuro.

-¿Ya está?. ¿Sólo eso?.- Pregunta mientras eleva una de sus cejas.

-Si...- Vuelvo a caminar más rápido pero nuevamente me sujeta de la muñeca.

-Grace...- Sus facciones estás tensas haciéndo que yo también me tense.

-Ian, no quiero hablar del tema.- Digo mirando hacia el suelo.

-Grace te conozco desde hace años. Dime, ¿Te hizo algo ese hijo de put.a?.Te juro que si te hizo algo lo mato.- Espeta.

-Ian n...-

-Responde.- Exige.

-No... me trató demasido bien.- Digo cerrando los ojos evitando ver su cara y ''Rezando'' para que no cometiese ninguna locura después de esto.