Capítulo 24

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-¡Con un demonio! Olivia en el hospital y no tuviste la decencia de llamar Stabler - exclamó Alex caminado de un lado a otro en la Unidad.

Era muy temprano y ya se escuchaban discusiones por todo el departamento. Alex había pasado a revisar algunos documentos sobre un caso que debía llevar a la corte y se enteró del desmayo de su amiga, estaba histérica.

-Ya tranquila, abogada. Por suerte no fue nada grave - respondió Fin.

-Igual, cualquiera de ustedes pudo tomar el teléfono y avisar.

-Estabas en la corte ayer toda la mañana Alexandra.

-¡Huh! - acomodó se cabello detrás de sus orejas - ¿qué le dijeron? ¿cuál fue el motivo de su desmayo?

-Estrés.

-Y me imagino que le dieron algunos días de descanso porque no esta aquí.

-No, está trabajando - comentó Fin - Es más, ahí viene.

La rubia volteó a ver.

-Olivia... ¿qué haces aquí?

-Aquí trabajo... - arrugó la frente y soltó una pequeña risita.

-Escuché que...

-No es nada... sólo fue estrés y ya estoy perfectamente - fue a su escritorio y abrió algunos cajones.

Elliot la veía desde el suyo muy atento.

-¿Tomaste las vitaminas que te recetó Brennan? - comentó mientras mantenía los codos en la mesa y las manos apoyando su mentón.

-Ah... - se detuvo.

-No, ¿cierto?

-Lo haré luego.

-¿Qué puede ser más importante?

-Atrapar a Cotler, es lo que haré en este instante.

-Olivia...

-El Capitán ya me dio la orden, además tendré un escuadrón de apoyo.

-¿El Capitán? No he escuchado nada al respecto...

-Pero miren quien está aquí... Mi detective favorito, el idiota del precinto 16... Que gusto verte.

Con esa entrada y esa manera de bromear era claro quien estaba llegando a la Unidad. La rubia lucía esplendorosa esa mañana.

-Me gustaría decir lo mismo, querida Kathe - respondió Elliot volteando al verla.

-Eres un amargado - le dió un golpe en  su hombro.

Mientras esos dos se desgastaban haciéndose bromas mutuamente, Olivia aprovechó para escabullirse entre ellos e irse a las cunas pero, Alex pudo notar su fuga y seguirla.

-Me gustaría hablar contigo - añadió Kathe con un tono serio.

-¿Y qué estamos haciendo? ¡Oh! Es cierto lo olvidaba, tu definición de "hablar" Es totalmente distinta a la mía, tú solo bromeas.

-No, Stabler es enserio... ¿Podemos, podemos ir a un lugar más privado? De verdad es importante.

-Bien - al ver que no podía descifrar su expresión (era una que no conocía) supo que se trataba de algo importante.

(...)

-¡Wao! - exclamó Alex desde la puerta de las cunas. Se impresionó ver a su amiga aplicarse un tono de labial más intenso.

-¡Maldición! Me asustaste - rió un poco - ¿qué haces aquí?

-Alex, hola... Que gusto verte, a mi también me da mucho mas gusto verte, Liv - agregó con sarcasmo - sabes que fue muy descortés de mi parte no llamarte, si lo sé cómo estuviste en el hospital y nadie tuvo la descensia de avisarle a esta rubia estúpida sobre que su mejor amiga tuvo un desmayo repentino, muchas gracias.

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