CORAZÓN LEAL

Cap 58

*Calle*

Poché tiene un fuerte conflicto con la confianza. Llegue a pensar que no es que ella no confía en mi, si no, más bien, que no confía en ella misma. Siento que no sabe que la realidad es que a penas se da cuenta de cuan importante es para mi. De cuan importante es para sus seres queridos, y cuan importante es amarse.

Mi fin principal era que estemos bien juntas, que pueda confiar en mi, que la relación deje de tener estos bajos bobos. Pero en los momentos de preparación me di cuenta de que quiera mucho mas... que mi fin había cambiado completamente.

Sería gratificante que la mujer que amo sea totalmente feliz.

Juana y Paula habían sido mis principales cómplices, el titulo de "mejores amigas" les quedaba a la perfección. Juana se había encargado de reservar una mesa en uno de los mejores restaurantes de Bogotá, Poché ama la comida, así que nada mejor que empezar por hacer feliz a su estómago.  Luego, aprovechando de que mis padres no están el la ciudad les pedí prestado la casa, necesitaba el elemento principal para esta noche, el piano. No solía hacer esto para todos, era halagada por mi forma de cantar, pero no me animaba a hacerlo en público. Si, ya se, irónico para ser una figura pública, pero hablar se me daba mas... cantar no tanto. Pero podía hacer una excepción por mi amor, no? Y por último y menos importante regalitos y chocolates. Paula se había encargado de entretenerla, y de ayudarme con los últimos regalos, además de elegir el hermoso vestido que le había dejado sobre la cama.

La noche estaba estrellada, tenía un vestido azul pegado al cuerpo, me deje el pelo suelto, con un maquillaje sencillo pero elegante. Le mando un mensaje a Poché, iba a pasarla a buscar por casa y quiera saber si estaba lista.

-Preciosa, en 5 paso por casa, estas lista? -Mandé antes de encender el auto-
-Amooooooor!! si! -Esa entusiasmo que note en su mensaje, ya me daba buena espina-

Estacione en la puerta del edificio, desde donde podía ver la puerta del ascensor. Espere con ansias que esas puertas se abran para poder ver a mi mujer. Y se abrieron. Ella, había elegido al igual que yo el pelo suelto, pero algo me llamo la atención, su azul había desaparecido y en su lugar se podía ver un mechón blanco en su pelo, Paula no me dijo que habían ido a la peluquería. Su maquillaje resaltaba notablemente sus hermosos ojos verde y ni hablar del vestido, este había sido creado para ella.

-Amor... hola!? -Movía su mano delante de mi cara, había quedado hipnotizada con su belleza, no importaba el tiempo en que la veía, me volvía a volver loca cada mañana en que habría mis ojos y allí estaba ella-
-Perdón bebe, es que estas hermosa y mira como me dejas!! -agregué sin pensar, mirando el rubor que aparecía en sus mejillas- Bueno, vamos a ir a comer algo rico!
-Amor, estas hermosa! y me encantó el vestido, gracias! - Dice acercandose a mi para dejar un sueva beso en mis labios-
-Me alegro de que te haya gustado bebe.

El restaurante fue delicioso, o mejor dicho su comida. Compartimos un hermoso momento con Poché, donde hablamos un poco de todo. Le mostré que había bloqueado a Sam de mis redes sociales, para no tener mas problemas, pero también le deje en claro, cuales son mis intenciones y que siempre son las mismas, por las que no debería de desconfiar. Poché fue muy linda, pidiendo perdón por los malos momentos que pasando y explicando sus motivos. Una velada sin dudas maravillosa. El roce de su mano sobre la mía, el sabor del vino en sus labios y su riquisimo perfume habían sido mi droga.

-Y ahora que? A donde nos estamos dirigiendo? -Decía Poché mientras conducía y la notaba confundida, parecía no recordar el camino-
-A la casa de mis padres, tengo otro regalo-
-Amor, la cena y el vestido, eran suficientes...
-No, obvio no. Nunca es suficiente.

Llegamos a mi antiguo hogar. Poché aún no entendía que hacíamos en la casa de mis padres. Entramos, la oscuridad y el silencio reinaban. Lejos de encender las luces que iluminarían todo el comedor, solo enchufé las luces de navidad que había puesto de decoración al rededor del piano. Poché me escuchaba cantar cuando me bañaba y cuando escuchábamos música pero nada mas. Siempre jugando, nada serio. Agarradas de las manos nos acercamos a ese objeto iluminado. Nos sentamos delante del piano. Y antes de pensarlo mucho comencé a cantar. (All of me, John Legend)

What would I do without your smart mouth?
Drawing me in, and you kicking me out
You've got my head spinning, no kidding, I can't pin you down
What's going on in that beautiful mind
I'm on your magical mystery ride
And I'm so dizzy, don't know what hit me, but I'll be alright

My head's under water
But I'm breathing fine
You're crazy and I'm out of my mind

'Cause all of me
Loves all of you
Love your curves and all your edges
All your perfect imperfections
Give your all to me
I'll give my all to you
You're my end and my beginning
Even when I lose I'm winning
'Cause I give you all of me
And you give me all of you, oh

Miré a Poché un instante. Ella utilizaba sos dedos para quitarse las lágrimas que caían por su mejillas, pero con una sonrisa gigante en su cara. Sentía que esta canción expresaba todos mis sentimientos. Ella claramente no se esperaba esta sorpresa, y amaba ver su reacción.

How many times do I have to tell you
Even when you're crying you're beautiful too
The world is beating you down, I'm around through every mood
You're my downfall, you're my muse
My worst distraction, my rhythm and blues
I can't stop singing, it's ringing, in my head for you

My head's under water
But I'm breathing fine
You're crazy and I'm out of my mind

Terminé de cantar, Poché solo me miró a los ojos y se acercó lentamente a mi boca. Esa sensación de necesidad, ese gusto dulce y salado a causa de sus lágrimas y un poco de las mías, hacían mi corazón latir a mil por hora. La amaba, y ella me amaba a mi.