CORAZÓN LEAL

61 - Milo

*Calle*

Salí de nuestra casa dando un portazo, bastante desesperada y atónita, aún podía escucha su llanto desde el ascensor. Camine sin rumbo sobre las largas calles de Colombia, con la cabeza a mil por hora, en un día nublado. Todo pasó demasiado rápido, no lo vi venir. ¿Qué se supone que debería de hacer? Apoyarla? Esto no iba a pasar desapercibido por su cabeza. Mis pies ya no respondían y apenas visualice un lugar donde sentarme, ahí puse mis nalgas. Sabía que esto iba a traer grandes consecuencias. Lo que hizo no es legal, que historia voy a inventarme... o peor aún, que historia voy a inventarle a la policía cuando pregunten como sucedió y lo vean en perfectas condiciones?. Soy una estúpida, algo pasaba, la notaba extraña, debería de haber regresado con ella pero mi representante insistía en que al ser un canal compartido, las empresas nos querían a ambas, así que dos semanas en Londres fueron en los que me mintió... capaz menos, pero no lo se. Debería creer su historia? Lo conservó sin pensar en que podía pasar.
Fueron segundo que parecieron horas en las que lo tuve en mis manos y aún sentía su olor, su suaves manos y sus ojos en los míos. Mi teléfono sonó por milésima vez, sacándome de mis pensamientos, pero esta vez no era la mujer de mi vida, si no mi mejor amiga. Respiré profundo, colgué la llamada. Tenía que volver antes de que anochezca y solucionar todo esto. Pero no sin antes hacer una importante parada.

*Poché*
Una semana y media antes

-Jajaja que boba Paula, yo no hago eso. -El día esta perfecto para que nos veamos con mi mejor amiga, bebidas frías, una manta, comida (nunca podía faltar) y charlas era todo lo que necesitamos. Había hablado con Calle antes de salir a mi encuentro, Dios la extraño tanto-
-Solo digo que darle ganitas a Calle no esta de más... Antes de que otra quiera hacerle compañía, ya sabes que tu mujer es muy codiciada.
-Calle no haría eso, por mas codiciada que sea, y pues que use su imaginación si quiere tocarse, ya me conoce en-te-rii-taaaa...
-De eso estoy segura, pero darle una motivación no viene mal... Hay que mantener la llama encendida.
-Y esa es tu idea?
-Bueno también pueden tener sexo por video llamada
-Jajajajja -Reí mientras golpeaba su brazo-

Me despedí de mi amiga para dirigirme al departamento nuevamente, no me gustaba dejar tanto tiempo solo a Ramón, peligraba su vida, y la vida de la casa. Ese perro siempre es tan inquieto.
Mientras caminaba mirando las vidrieras, una me llamó la atención. ¿Y si le hacía caso a Paula y me compraba algo de lencería erótica para sorprender a Calle? Tampoco es que no usaba esa ropa, solo que no solía posar delante de la cámara así. Capaz, mi mujer si podía, ya que se grababa siempre con Juana y las cámaras no le daban miedo... pero para mi eso es muy nuevo, y de hacerlo estoy segura que no sería desnuda..

-Uy perdón - Dije al sentir el golpe, cuando en realidad fui yo la perjudicada. Era una mujer, un poco mas grande que yo, que parecía desesperada, o perdida tal vez. -Estas bien? Te puedo ayudar en algo?- Posando una mano sobre su hombro. Comenzó a llorar fuerte, lo que hizo que su mochila también lo hiciera. Espera, su mochila?-
-Yo lo siento mucho, pero no lo quiero- La miro sin entender de que me hablaba mientras frunzo mi ceño.
-Esta bien, cálmate, que puedo hacer por vos? Quieres que llame a alguien?
-No no...Solo necesito que me tengas esto - Dice dándome la mochila que no paraba de llorar, me agarro miedo, no sabía que hacer, ni como reaccionar. Mucho menos después de ver a la mujer salir corriendo-

Abrí la mochila con mucho cuidado y lo que vi hizo que mi corazón se rompiera. Un bebé, seguramente recién nacido por su tamaño, desnudo, seguro congelado del frío. Rápidamente saque la manta que había llevado al encuentro con Paula, que no había usado porque ella había llevado la suya. Lo envolví con cuidado, para luego sacarme la campera y también abrigarlo.

¿Qué hacía? El bebé, ahora parecía ahora estar calmado. Debería de llevarlo al orfanato? o tal vez a la policía?

Llegue al departamento con mi brazo dormido, al igual de la mini personita que tenía en él. Deje las bolsas sobre la mesa, mientras intentaba que Ramón deje de ladrar por mi llegada.
Lo coloque sobre la cama con muchas almohadas al rededor, para que no cayera. Agarré mi celular para llamar a Calle, desbloquee mi celular y vi su foto. Que me diría? Lo volví a bloquear y me dispuse a lavar las cosas que había comprado para el bebé.

*Calle*

Entré a nuestra departamento, intentando no hacer ruido. Necesitaba meterme en la ducha y sentir el agua caliente resbalando por mi cuerpo para deshacerme de los nervios que colman mi cuerpo.

-Calle... - Escucho a mi novia llamarme con apenas un hilo de voz. No esperaba encontrarla en el sillón. La miró y noto sus ojos rojos, imaginaba que de tanto llorar. Decido ignorarla y seguir mi camino hacía la habitación. - NO PUEDES IGNORARME DANIELA- Grita, haciendo que paré mi caminata de golpe. Me giro para verla. Su carita estaba mojada, pero ahora no solo veía dolor en sus ojos, sino también mucha rabia-
-Hago lo que se me da la gana Maria José- Le contesto a su grito, ya no estaba enojada con ella, pero de esa forma me había nacido contestarle-
-Amor... - dice acercándose más a mi- Necesito que me entiendas, no sabía que hacer, quise llamar a la policía, quise contarte pero no pude, no se porque... y luego me terminé encariñando de él.
-Maria José...
-DEJA DE LLAMARME ASÍ... SOY TU MUJER MALDITA SEA!!!- Vuelve a gritar interrumpiéndome-
-También es tu nombre... -Conteste calmadamente- Las dos sabemos porque no dijiste nada. Querer tener un hijo no esta mal, de hecho, yo nunca dije que no quería tenerlos, pero lo que hiciste es ilegal. No podemos quedarnos con un bebé que te encontraste en la calle. Las cosas no funcionan así.
-Pero si llamamos a la policía van a sacármelo... -Me acerque a ella y nos dirigimos al sillón en silencio. La amaba demasiado para verla sufrir-
-Poché, necesito que me escuches -Digo logrando que sus ojos se dirijan a mi- voy a hablar con el abogado de mi familia...
-No, noo, eso noo!
-Shhh shh, le voy a explicar la situación, como se dieron las cosas, TODO - Hago silencio esperando alguna reacción- y le diré también que queremos la tenencia de Milo.
-Calle, me estas hablando en serio?? -Contenta, me mira con una sonrisa y con ojos brillantes-
-Si, quiero que Milo sea parte de nuestra familia pero legalmente. También tenes que saber que es probable que se lo lleven en algún momento.
-Amoor, no por favor - Dijo casi suplicándome-
-Bebé hay que hacer las cosas bien... si no, no vamos a poder ni inscribirlo a la escuela... Solo quiero que estés preparada para cuando eso pase... - Poché volvió a su ya conocida posición de bolita, que hacía cuando estaba triste por algo. Me levanté del sillón para buscar líquido para ambas, pasé mis manos por mi cara cuando recordé lo que había comprado. Me dirigí a agarrarlo y volver con ella- Mira amor, me había olvidado de que compré un par de cositas, solo espero que le guste. -Levantó su mirada a la bolsa delante de ella. Lo abrió y encontró una manta muy abrigada junto a ropita para el bebé por el que pelearía. Poché me abrazo fuertemente-
-Calle, esto es hermoso, te amo - Me besa. Un beso lleno de emociones y pasión, nos habíamos extrañado demasiado y era hora de demostrarlo-