Estaba exhausto de todo, la conversación entre él y el señor Lee no había sido de lo mas cordial posible pero al final se logró llegar a un acuerdo que los beneficiaría a ambos, caminó con lentitud a su oficina y al entrar se sentó en su silla y soltó un gran suspiro de alivio que ni siquiera sabía que lo estaba reteniendo, echó su cabeza hacia atrás y bufó, toda su cabeza le dolía a horrores, tanto que hasta estaba seguro de que se desmayaría en cualquier momento inesperado, miró su reloj de mano y sonrió, pronto llegaría San, Mingi le había dicho que el peliverde llegaría a las tres de la tarde para visitarlo, algo que le alegró de inmediato, aunque no remedió su dolor de cabeza. Un golpecito se escuchó afuera de la puerta y, por instinto, dijo pase, cuando vio al pelirosa entrar sonrió, al parecer su amigo había terminado de hacer lo que le había puesto de trabajo.
-Wooyounggie, ya está listo lo que me pediste, aquí están las gráficas del primer proyecto y todo lo que este requirió, además de las cantidades exactas de cada material-Mencionó el pelirosa colocando dos carpetas negras sobre el escritorio del mayor.
-¿Cansado?-Preguntó Wooyoung con burla llamando la atención del contrario, el cual traía una cara aburrida, sin mencionar que la mirada que le echaba al rubio era una de esas de "te quiero matar".
-No que va, estoy contento-Dijo el pelirosa con sarcasmo, el rubio sólo se rió.
-Ohh vamos Siheon, ¿por qué te molestas si te di tu castigo? además...
-Si si si ya se, no volveré a correr por los pasillos de la empresa con un café en mano pero...¿se molestó mucho conmigo?-Dijo Siheon encogiéndose de hombros con una sonrisa nerviosa.
-No te preocupes Siheon, mi padre no se molestó, sólo me dijo que te pusiera un castigo y que a la próxima te fijaras por donde corres-Sinceró el rubio.
El pelirosa sólo bajó la mirada con un puchero en sus labios, no había sido nada bonito el haberle tirado en café encima al jefe Jung, el padre de Wooyoung, se había ganado ese gran castigo, y era castigo porque lo pusieron a buscar los documentos necesarios en el archivo viejo, el cual no estaba ordenado.
-Lo siento-Murmuró el pelirosa.
-Esta bien, no hay nada que perdonar, eso fue sólo un accidente, siempre pasa-Dijo el rubio para luego quejarse al tocar uno de sus hombros.
-Estás estresado, ¿verdad?-Dijo Siheon al mirarlo, el rubio sólo asintió-Bien pues...dejame sobarte, prometo no tirarte nada-Aseguró el pelirosa.
-Ok, sólo no lo hagas muy fuerte-Mencionó Wooyoung acomodándose en su asiento.
El pelirosa dio un brinquito de alegría y caminó hacia él para luego colocarse detrás y comenzar a masajear los hombros del rubio con suma delicadeza, una sonrisa se dibujó en sus labios cuando Wooyoung cerró los ojos para relajarse.
-Él está aquí-Dijo una voz a través del aparato que tenía aun puesto en la oreja.
-Bien-Susurró por lo bajo para que el rubio no le escuchara.
-¿Qué es esto?-Preguntó el rubio mirando un archivo mp4 en su barra de notificaciones.
-Abrelo-Le insistió el pelirosa, Wooyoung negó.
-Cuando llegue a casa, aquí no puedo abrir ese tipo de extensión o sino se le meterá un virus-Aclaró el rubio apagando su computadora, el pelirosa frunció su ceño pero luego sonrió.
Luego de eso se colocó al lado izquierdo del rubio y giró la silla de este para que quedara frente a él, Wooyoung abrió los ojos y miró con confusión al pelirosa.
-Mmm ¿pasa algo?-Musitó el rubio sin entender nada.
-Wooyounggie tu...tu me gustas-Soltó el pelirosa obteniendo una cara de sorpresa por parte del contrario.
ESTÁS LEYENDO
The secret // Woosan
Random-No soy antisocial porque quiera, es solo que tengo que hacerlo. Eso es lo que decía San, un chico para nada querido por los alumnos ya que decían que era muy antisocial. La mayoría del tiempo sus recuerdos lo atormentan cada noche sin que los pudie...