Vuelta al pasado

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Se había quedado petrificado, el tenerlo tan cerca le hacía querer asesinarlo. Wooyoung entró a la oficina con lentitud y saludando al pelirosa con una sonrisa, lo que a San le causó coraje.

¿Cuanto tiempo había pasado desde la última vez que lo había visto? Se preguntó el peliverde.

Mucho, para ser sinceros ya había transcurrido cuatro meses pero...que importaba, pues aún el daño no estaba curado, ni una cicatriz siquiera. Había cierta cosa que le tenía inquieto...

¿Qué hacía él ahí y qué buscaba?

O peor...

¿Qué era lo que estaba tramando? Porque seguramente él estaba ahí por algo y no por nada.

-Sannie, te presento a Siheon, es y será mi mano derecha, mi padre lo recomendó por lo que acepté quedarme con él-Aclaró el rubio con una sonrisa-Siheon, él es...

-San, Choi San, soy novio de Wooyoung-Dijo el peliverde extendiendo su mano para que el dichoso Siheon la tomara.

-Es un placer el conocerlo, Choi-Mencionó el pelirosa pronunciando el apellido con burla y repugnancia.

Algo que al peliverde le hizo sentir como su hígado se retorcía del coraje.

-Bien, ahora que se conocen, Siheon, trae me dos vasos con agua por favor- Pidió Wooyoung caminando a su escritorio para sentarse del otro lado en una de las sillas.

-Por supuesto-Habló Siheon caminando a la salida, no sin antes detenerse al lado de San para susurrarle con una sonrisa segura y burlona- Ten por seguro que te dolerá, y será aún peor de como Hongjoong te trató, el juego apenas comienza, debes prepararte, no todos son flores-Finalizó el pelirosa para luego desaparecer detrás de la puerta.

San sintió un gran escalofríos recorrer toda su columna vertebral, lo sabía, él no había venido solo a trabajar sino también a golpearlo, y no con sus propias manos, claramente lo haría sin mover ni un sólo dedo.

¿A qué se refería con que no todos son flores?

No lo entendía pero estaba seguro que no era nada bueno.

-Woo-Pronunció el peliverde captando por completo la atención del mencionado.

-Dime-Dijo el rubio a la vez que hacía un ademán con su mano derecha para que San tomara asiento frente al su escritorio.

-Tengo algo que decirte y es urgente-Soltó San un poco alarmado, se comenzaba a poner nervioso-Ese tal Siheon no...bueno...ni siquiera es su nombre verdadero, escucha él se llama...

-Traje lo que me encargaste Woonnie-Mencionó el pelirosa entrando a la oficina con dos vasos con agua en manos.

-Muchas gracias Siheon-Contestó Wooyoung tomando los vasos para luego darle uno a San y beber un poco del otro-Mmm...ahora puedes retirarte, San y yo tenemos algo serio que hablar-Aclaró mirando al mencionado con su ceño fruncido.

-Bien, si me necesitas estaré afuera-Finalizó Siheon pasando lentamente su mano por el cabello del rubio para luego mirar a San con una sonrisa de lado, segundos después se retiró.

-Algo...¿Serio?-Preguntó el peliverde sin comprender nada.

-Sí, algo sumamente serio-Dijo para luego tronar su lengua y dar un suspiro a la vez que sacaba un sobre de papel del cajón izquierdo de su escritorio.

-¿Q-qué es?

-No lo se, tú dime-Mencionó con seriedad entregándole el sobre a San para que lo abriera.

San no comprendía nada, todo le era confuso. Tomó el sobre que su novio le había dado y lo abrió para luego sacar el contenido y quedar echo piedra, un respigo salió de su boca al mirar aquellas imágenes para nada familiares, él nunca haría algo así, y mucho menos con alguien más que no fuese Wooyoung, desvió y la mirada; su respiración era agitada al igual que sus latidos, temía por su relación y las consecuencias que esto traía, ya lo había visto muchas veces en películas y series como para no darse cuenta de que todo era una mala jugada, y era nada más y nada menos que de...

The secret // WoosanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora