Insomnio

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Eran las cinco de la tarde y él se encontraba bagando por la calle cuando divisó un bar al otro lado de la calle, casi no era lo suyo pero tenía ganas de un trago, sin más ni menos se adentró al lugar, pudo notar que no era un bar cualquiera si no uno en donde el ambiente era un tanto agradable y la música sonaba a todo volumen, se acercó a la barra y pidió un wisky, una vez que lo obtuvo se dirigió a una mesa vacía que tenía sillones en lugar de sillas.

Comenzó a mirar las personas del lugar yendo y viniendo, sonrió ante eso, se le figuraban a pequeñas hormigas que bien podían ser pisoteadas en cualquier momento.

-Hola-Escuchó que le hablaron y giró la cabeza para ver quien era, al notarlo sonrió y le invitó a sentar.

-¿Cómo me encontraste?-Preguntó mirándolo con curiosidad absoluta.

-Sinceramente no creí que estuvieras aquí, vine por un trago, además...no tenía otra cosa que hacer-Aclaró el contrario.

-Todo esto se está saliendo de control, ¿Estoy seguro de que ya sospecha?-Aseguró mirando su vaso con preocupación.

-Hey, tranquilo, eso es lo de menos, creo que...ya todos lo saben pero...tenemos que continuar, para eso estamos haciendo esto, está bien si él sospecha, de todos modos no le estamos haciendo daño al él, si no al hyung-Aclaró el contrario regalándole un beso en la mejilla al menor.

-Tienes razón-Suspiró-No debería preocuparme tanto-Dijo para luego reír al miso tiempo que el contrario.

-La verdad...-Mencionó el contrario llamando la atención del otro-Sabes fingir demasiado bien, casi te creo eso de que odias a Wooyoung-Dijo entre risas, el contrario lo miró y agachó la cabeza con tristeza y el ceño fruncido.

No era ninguna broma.

-No estaba fingiendo-Aclaró con voz dura a la vez que tomaba su vaso de la boquilla y comenzaba a hacer círculos con el.

El mayor lo miró sorprendido, no sabía que decir pues creía que el contrario estaba mintiendo.

-¿Qué?-Cuestionó mirándolo con el ceño fruncido.

-Como lo oíste, él me considera un amigo pero...yo no lo considero uno, cada que le digo una verdad suya se empeña en criticarme o gritarme, por eso no lo soporto-Aclaró con molestia para luego levantarse de su asiento e irse de ahí dejando al contrario solo.

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-¡¿Qué?!-Gritó con desespero.

-Como lo escuchaste, él se fue, y estoy seguro de que algo planea-Aclaró el menor.

-¡¡¡Maldición!!!-Volvió a gritar a la vez que lanzaba un jarrón de porcelana a la pared con coraje, por obvio éste se rompió.

Todos los presentes lo miraron y desviaron la mirada, el carácter de su amigo dejaba mucho que desear.

-Hongjoong ya sientate quieres, me estas...mareando con tanta estupidez-Dijo uno de los presentes a la vez que rodaba los ojos con sumo fastidio.

-Tú mejor ni opines Ravn-Se quejó el mayor señalándolo a la vez que lo fulminaba con la mirada.

-Tu horripilante mirada de conejo enojado no tiene efecto en mí-Mencionó Ravn cruzándose de brazos con desden.

-Hongjoong, cariño, ya calmate, no lograrás nada si te enojas en vano-Pronunció el pelirosa al mismo tiempo que abrazaba al mencionado de la cintura por detrás y colocaba su mentón en el hombro del mayor.

-Está bien-Dijo dándose por vencido para luego ir a sentarse a un sofá de la sala en donde estaban.

El peliazul ya quería matar al peliverde, pero con el hecho de que se había enterado de que Wooyoung, tal vez, tenía algo planeado, ya no sabía que hacer y estaba completamente nervioso y harto, tenía que encontrar una manera de que nada pasara.

The secret // WoosanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora