El sonido de su celular le hizo removerse en su cama a la vez que estiraba su mano hacia el buró que estaba al lado de la misma, tomó el celular y miró la pantalla de este con sus ojos entre abiertos, una llamada de un número desconocido. No tenía ni idea de a quien rayos se le ocurría llamarlo a las cuatro de la mañana sin pensar en las consecuencias.
Sin más, se sentó en su cama y optó por contestar, aunque en realidad no debía hacerlo ya que luego le costaría trabajo levantarse.
-Diga-Contestó con voz soñolienta.
-Debes prepararte para lo peor-Dijo la voz al otro lado de la linea.
-¿Quién rayos eres? ¿Por qué me dices esas cosas?-Preguntó ya un poco mas despierto, quería averiguar porque lo trataban así.
-Solo te estoy previniendo, él y tú deben estar más unidos que nunca o todo se saldrá de control, escucha, no confíes en nadie, entiendes, en nadie; no te dejes engañar, es una advertencia-Finalizó el contrario y colgó, dejándolo en total blanco.
De nuevo esas palabras de protección, de nuevo aquella voz que le advertía de todo y nada a la vez, de nuevo ese chico extraño del que no sabía su nombre.
☆☆☆☆☆☆☆☆
La mañana había llegado, trayendo consigo un gran aguacero, además de mucho viento, se levantó de su cama con con flojera, caminó a la ducha y se dio un corto baño para luego vestirse con ropa abrigadora; un pantalón de mezclilla color rojo, una playera blanca y un suéter color negro, usaba solo eso ya que no deseaba sentirse sofocado el mismo. Ya listo, bajó a la sala para dirigirse a la cocina, no quería comer pero debía hacerlo o sino le comenzaría a doler el estomago.-Maldición!!!-Grito en el momento en que el jugo calló sobre su suéter manchándolo.
El timbre de la puerta principal se hizo presente en todo el lugar, frunció su ceño y caminó a la puerta con calma a la vez que sacudía su suéter con ambas manos para tratar de secarlo, deslizó sus manos por su ropa para alisarla y abrió la puerta.
-Hola cariño-Saludó el contrario con una sonrisa.
-Hola Wooyoung, pasa-Dijo el peliverde asiéndose a un lado para que el rubio pasara.
-¿Qué te pasó? ¿Por qué tu suéter está así?-Pregunto el rubio señalando la parte manchada en la ropa de San.
-Yo...tiré el jugo sobre mí sin querer-Sinceró el peliverde con una leve sonrisa.
Wooyoung, además de haberse percatado del incidente de su novio en su ropa, se había dado cuenta de que algo andaba mal con él; su mirada se tornaba triste y decaída y su semblante era pésimo, era algo así como si se hubiese enfermado.
-Hay Sannie-Mencionó el mayor a la vez que lo abrazaba con cariño, como si quisiera protegerlo de todo lo que le rodeaba.
San soltó a llorar, su corazón dolía al igual que su alma, no podía soportar la idea de que alguien fuese tan cruel como para querer separarlos. Abrazó mas fuerte a Wooyoung, no quería soltarlo para nada, no deseaba dejarlo ir, no quería volver a sufrir como antes, no quería estar solo de nuevo, no quería...sentir mas dolor y sufrimiento, no otra vez.
-W-woo, no q-quiero ir a l-la escu-cuela-Murmuró el peliverde con voz cortada en el pecho del rubio mientras se aferraba mas y mas al cuerpo de su novio.
-De todas maneras no te iba a llevar, el clima está muy mal-Pronunció Wooyoung sobando la espalda del peliverde de arriba a abajo para tranquilizarlo, odiaba verlo llorar y no saber el por qué de sus lágrimas-Sannie, bebé, no llores, esta bien si no quieres ir, yo estoy aquí pero...no puedo ayudarte si no me dices que pasa-Dijo para luego besar levemente el cuello del menor.
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The secret // Woosan
Random-No soy antisocial porque quiera, es solo que tengo que hacerlo. Eso es lo que decía San, un chico para nada querido por los alumnos ya que decían que era muy antisocial. La mayoría del tiempo sus recuerdos lo atormentan cada noche sin que los pudie...