Por las calles de South Park, un taxi circulaba hasta cierto destino , dentro de este un rubio de cabellos despeinados y una joven de cabellos negros se encontraban adentro, charlaban de forma animada, iban de camino hasta la cafetería del primero.
─Te veo mas contenta Wendy ─le dijo mientras desviaba la mirada del paisaje que ofrecía la pequeña ciudad del pueblo y clavar sus ojos en ella.
─Realmente si, esta bebé me da tanta alegría, y tenerlos a ti y a Trent, y de alguna forma a Craig, apoyándome me hace sentir bien.
─Es gracioso que andando aun en el pueblo ni tus padres se enteren de tu paradero ─soltó con gracia.
─Y no me sorprende, ahora explícame algo, ¿Por qué carajos viajamos en taxi y no en el auto de tu marido? ─se quejo cruzándose de brazos.
─Craig no es mi marido ─soltó muy sonrojado ─Y es que Trent tenia que estar temprano en el colegio y bueno lo llevo, además no estamos muy lejos, pero con tu embarazo ya ni quieres caminar ─dijo mirándola de reojo y vio como la chica reía nerviosa por eso. Al ver que llegaron, el taxista estaciono a la vuelta del café ─Toma, paga el taxi yo iré abriendo el local.
La chica asintió ante el pedido del chico, este salió afuera y se encamino a las puertas del negocio, estaba abriendo la puerta cuando sintió como una mano se poso en su hombro, volteo a ver de quien se trataba pero solo sintió una punzada en su estomago, abrió los ojos sorprendido y bajo la vista al ver la navaja que lo atravesaba, levanto la mirada y vio la cara de su atacante.
─Por tu bien, será mejor que sueltes a ese mocoso y me lo entregues, si no quieres estar cortando margaritas en el cementerio ─dijo aquel tipo que despedía un olor a alcohol y cigarros del barato.
No pudo pronunciar palabra alguna, el tipo saco el filo del cuerpo del joven y salió del lugar antes que llamara la atención de alguien, se apoyo contra la puerta y descendió sentándose en el suelo llevando su mano cubriéndose la herida. Justo en ese momento la chica embarazada llega y grita horrorizada por lo que vio, se aproximo hasta el y como pudo se agacho hasta su altura viendo que aun estaba despierto.
─¿¡Tweek por Dios que paso!?. ¡¡Ayuda!! ¡Que alguien me ayude!. ¡Mi amigo se muere! ─gritaba con la voz ya cortada por las lágrimas. Al sentir los llamados de la chica la gente se comenzó a acercar, pudo divisar como alguien llamaba por teléfono, seguro a una ambulancia.
Sentía que ya no podía mantener la consciencia, todos los ruidos a alrededor comenzaba a dejar de escucharlos, sus ojos pesaban y un sabor cobrizo comenzó a sentir en su boca, trato de mirar a la chica, pero ya no podía más, todo quedo en la nada para el, y su mundo se volvió negro.
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•En la primaria de South Park, el azabache junto al niño caminaban por los pasillos del establecimiento. El mas grande traía una mirada nostálgica a cada paso que daba recordaba su infancia en el lugar. El menor lo miraba de reojo, curioso, y apenado, no era necesario que también lo acompañara al teatro de la escuela, donde iba a ensayar.
─Papá, no es necesario que me acompañes ─se quejo.
─No no, tenia muchas ganas de volver a caminar por estos pasillos, donde conocí a tu papá, y las travesuras que nos mandamos, ¡oh! y como vivía ahí sentado ─señala justo a la dirección.
El chico puso una mirada incrédulo por lo que le contó, continuaban caminando, pero de la nada el menor se detuvo, llevando su mano a su pecho, sosteniéndola como si le doliera, esta acción llamo la atención del más grande y miro preocupado.
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ℒ𝑜 𝓆𝓊𝑒 𝓃𝓊𝓃𝒸𝒶 𝓈𝑒 𝑜𝓁𝓋𝒾𝒹𝒶
FanfictionPaso el tiempo desdé que se graduaron de la preparatoria de South Park, cada quien hizo su vida aparte, solo uno se quedo en el pueblo, aquel pequeño rubio adicto al café. Después de varios años se vuelven a reecontrar, pero nadie sabe que tantas co...