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Maki

— ¡Vamos, vamos! Tenemos que encontrar la mejor mesa —tiró de mi brazo Hagakure.

— ¡Esperen un segundo! ¡Yo n-

— ¡Ahí esta! —Dijo feliz Ochaco.

Suspiré frustrada dejandome llevar por la corriente, era imposible que intente pararlas, estaban demasiado emocionadas porque hoy habia descuentos en la cafetería en los postres.

Cuando se empezaron a sentar notaron que yo no lo hice y me miraron confundidas.

— ¿Por que no te sientas? ¿Olvidaste como hacerlo?

— No, Mina —reí—. Pero si me dejaran hablar un segundo, sabrían que hoy voy a co-

— Conmigo —pasó su brazo por mis hombros arrogante—. Hoy Maki es de la clase B. ¡Lo siento héroes!

Sonreí de costado.

— Hoy prometí que comería con Monoma y los chicos. Lo siento...

— Esta bien, no pasa nada. Lamento no haberte dejado hablar...

— No pasa nada, descuiden. ¡Nos vemos! —sonreí saludando con la mano yéndome con el rubio.

— ¿Por qué siempre tienes que pelear con mis compañeros? Son buena gente...

— ¡Son de la clase A! Se creen superior y-

— Olvidalo, Monoma —suspiré divertida—. No tienes caso.

Este en ningun momento quitó su brazo de mis hombros, en este momento estabamos en la fila de la cafetería, esperando para poder comprar la comida.

— ¿Como te fue en las vacaciones?

— Nada fuera de lo normal... Ya sabes. De vez en cuando me junté con Kendo y Testsutetsu. ¡Lo bueno es que volvimos a clases y puedo usarte para molestar a la clase A! —rió.

— Eres un idiota —reí suave al escuchar su tipica sonrisa diabólica—. Por cierto, ¿Piensas quitar tu brazo en algun momento?

— Nop.

— Sabes que vas a morir si sigues haciendolos enojar, ¿Cierto?

—Pero tu vendrias a mi rescate, ¿Cierto?

— No respondas mi pregunta con otra pregunta, maldito rubio manipulador. Pero sí, lastimosamente te salvaría.

Sonrió triunfante y quitó su brazo.

— ¿Que vas a pedir? —volteó a verme.

— Muchos, muchos postres.

(...)

— ¡Tetsutetsu! —reí al ver como le caía jugo de naranja por la nariz— Eso te pasa por querer pelear con Monoma.

— Es algo... Idiota a veces, disculpalo —rió suave Kendo.

— Para nada, es gracioso verlo así. Ten —extendí mi servilleta para que se limpiara la nariz, la cual aceptó—. Son muy agradables, me gustaria estar en la clase 1-B, debe ser todo un espectáculo.

— ¿Are? ¡Quieres estar en nuestra clase? —elevó la voz Monoma— ¡Vaya! ¡Se ve que la clase 1-A de-

— ¿No descansa ni un segundo verdad?

Kendo negó agarrando la cabeza del ahora inconsciente, Monoma.

— Siempre busca pleito —reí mientras metía un bocado de comida a mi boca—. Cuando viviamos juntos a veces trataba de pelear conmigo para ver quien era mejor.

— Oh, es cierto. Ustedes vivian juntos, ¿Como es que se conocieron? —preguntó Tetsutetsu

— ¿Monoma y yo? —asintió— Nuestras familias son amigas.

— Wow, eso fue inesperado.

Reí.

— Supongo que si... ¿Como son sus clases? ¿A ustedes también los hacen entrenar hasta el cansancio?

— Ni que lo digas —suspiró Kendo.

— ¡Pero nada me detiene! —endureció su brazo— Soy demasiado fuerte.

Reímos.

En todo el tiempo que quedó no paramos de reír, son muy amables y graciosos. Tambien me contaron que iba a entrar un nuevo alumno a su clase.
Me caen sensacional, sobre todo porque soportan a alguien como Monoma.

La campana sonó, dando por finalizado el horario de comida.

Me estiré y luego de acomodar la mesa y despedirme de los chicos fui a clases.

— Oe. ¿Que haces con esos idiotas de la clase 1-B?

— Me alegra tambien verte, Bakugo.

— ¡No evadas la pregunta! ¡Te vi muy a las risitas con ese Monoma y en su mesa! —agarró mi ropa entre sus manos.

— Calmate, maldita sea —reí—. Veo que extrañabas con quien pelear.

— Tch —me soltó brusco y miró a otro lado incómodo—. Bruja fea.

— ¡¿Como que fea?! ¡Ven aquí, idiota!

•••
¡Hola y adiós!
No se olviden de dejarme su estrellita o comentario, no saben lo mucho que me apoya para poder seguir escribiendo. Gracias.

Líquidos || 2da temp Bnh y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora