Líquidos || 2da temp Bnh y tu

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__(tn)

— ¡Oh! ¡Está despertando!

Abrí los ojos y pude ver a Kaminari, Momo y Bakugo alrededor de la camilla. ¿Estaba en la enfermería?

Me reincorporé, sentandome en la camilla y llevé mi mano a la cabeza. Tenia un chichón.

— Eso fue del golpe... No pude agarrarte a tiempo, lo siento —se disculpó Momo.

— ¡Esta viva! ¡Esta viva! —dramatizó Denki. Yo reí por la estupidez de este.— Logré hacerte reír, ya cumplí con mi objetivo.

Recibió un golpe en su cabeza.

— Ten cuidado si no quieres tener una explosión en tu cara —amenazó—. Oye, fea. ¿Tan idiota eres de desmayarte?

Lo fulminé con la mirada.

— Ya no tengo nada que hacer aquí, adiós idiotas.

— Ahora se hace el frío pero cuando te escuchó caer y vio tu cuerpo en el suelo, empezó a gritar eufórico diciendo que qué te había pasado, estaba preocupado —habló Denki incrédulo con media sonrisa.

— Corre.

Al instante, Denki corrió por su vida ya que Bakugo, estaba dispuesto a quemarlo por lo que me habia dicho.

— Lamento si... Lamento si te tomé por sorpresa o si no te agradó que te ha-

— ¡No, no! —tomé sus manos rápidamente calmandola—. Nada de eso, me agradó que me dijeras lo que sientes por mí, Momo. Es solo que... Se me hace algo imposible de creer que a tanta gente le interese yo.

— ¿Por qué?

— Bueno... Soy... Yo, ¿Sabes? No veo nada fuera de impresionante que no tengas las demás, incluso tú. Momo, eres mucho mejor que yo eres perfecta. Ad-

Sus labios no me dejaron seguir. Mis ojos se abrieron impactados. ¡Dios mio!

— Fue la única manera que se me ocurrió para que dejaras de decir estupideces, y ademas... Hace tiempo queria hacerlo —se removió incómoda en su lugar.

— ¡__(tn)! ¡¿Estas bien?!

Deku apareció agitado de correr y con su semblante preocupado. Que cosita más tierna.

— ¿Tienes fiebre? Estas muy roja.

Me percaté de eso y rápido tapé mi rostro.

— ¡No,no! Estoy bien, tranquilo.

Dejó escapar un suspiro de alivio.

— ¿Que ocurrió Momo? Vine apenas me enteré.

— Le... Le bajó la presión.

— Oh, ya veo... ¿Estas mejor ahora? —asentí y en su rostro apareció una inmensa sonrisa que se suponia que debia tranquilizarme pero fue todo lo contario. Revolvió sentimientos en mí—. Me alegro mucho.

(...)

— Gracias, hasta luego —me despedí cerrando la puerta tras de mí.

Habia conseguido un descuento en ropa y eso me venia sensacional.

— Vaya, vaya... ¿Estas perdida pequeña?

Esa voz...

Volteé a verlo, este se encontraba recargado en la pared con una sonrisa para nada buena.

— ¿Que haces aquí? —me puse en guardia por si intentaba atacarme o hacer algo aquí mismo— Ten cuidado con lo que haces, Dabi.

Se reincorporó parandose frente a mí. Tenia ropa informal y una capucha que cubria su cuerpo, por lo que pasaba desapercibido.

— Solo queria ver como estaba mi vieja amiga.

Rechisté la lengua.

— ¿Que tal te va en la academia? Vamos, cuanteme...

— ¿A que juegas, Dabi? —escupí.

Este parece no haberle gustado con el tono en el que le hablé; Su sonrisa desapareció y elevó su mano, mostrandome su fuego.

— Vamos a caminar, __(tn). No me hagas enojar.

Miré a mi alrededor, habia gente, no podía ponerme a luchar en medio de la calle.

— ¿Compraste lencería para que yo la vea?

— No seas idiota.

— Aun sigo diciendo que te verías mejor del lado de los villanos, conmigo...

— ¿Que te hace pensar que querria estar contigo?

— Oh, vamos. No puedes negar el hecho de que cuando nos conocimos no sentiste cierta atracción hacia mi. No puedes mentirme, Maki. Sé que te gusta jugar con el peligro.

Reí corta.

— ¿Te duele la cabeza o algo?

— No te hagas la inocente —susurró en mi oído estremeciendome—. Te gusta jugar con fuego, yo puedo darte ese juego... Mira como reaccionas a mi cercanía —sopló levemente mi oreja y desapareció de mi vista, no sin antes escuchar su carcajada.

Maldito egocéntrico... No me hagas confundir...

¡Maldición, Dabi!

— ¡Debe ser mi día de suerte! —giré mi cuerpo viendolo— ¿Huh? ¿Y esa cara...? Oye, ¿Estas bien?

— Hawks —dije al verlo.

•••
¡hola y adiós!