EDWARD : Para siempre juntos.

Capítulo 17 : "Ella estaba devuelta."

Capítulo 17 : "Ella estaba devuelta"

Todo quizás parecía ser confuso y lo entiendo completamente. ¿A quien no considerarían loco si corre a las afueras de un centro que esta completamente cerrado? Pero hay algo que tengo claro , yo no estoy loca. Yo se lo que yo viví en ese lugar y fue espantoso escuchar esas personas murmurar cosas , y esos niños reír. Mis mejores amigos pasaban de casualidad porque iban camino a casa , agradezco eso tanto ya que no se que hubiera sido de mi ahí sola.

-¿Entonces escuchaste...cosas?- habla mi madre un tanto insegura y no puedo evitar rodar mis ojos. Esto es en serio.

-Mamá , no fueron solo cosas. Yo escuché voces , murmullos y risas de niños y...

-¡Wendy eso es una locura! - ella gruñe y las ganas de llorar me atacan , pero llorar debido al coraje. Estoy hablando en serio , yo no estoy loca y tampoco alucino cosas.

-Madre te digo que...- cierro inmediatamente la boca al escuchar la puerta principal abrirse y seguido de esto escucho una risa. Su risa. El está aquí.

Enseguida una gran sonrisa se dibuja en mis labios y sin importar lo que sea , me levanto y corro hacia el pasillo con los brazos abiertos para entonces ahí encontrarlo.

-¡Edward! - mis mejillas en instantes se encuentran húmedas debido a la inmensa felicidad que este hombre me causa.

El se voltea y rápidamente corre hacia mi. -¡Wendy! ¡Wendy! ¡Wendy! - chilla y me atrapa entre sus brazos. Estos envuelven mi pequeño cuerpo y me siento en casa por fin. Ríe contra la piel de mi cuello así haciéndome suspirar completamente enamorada. Habían pasado horas sin verlo , ya casi el día de su cumpleaños termina y...no le eh dado su regalo. Debo hacerlo ya.

-Edward , antes de todo. Tengo algo para ti. - sonrío y luego de dejar un pequeño beso en la punta de su nariz , lo agarro de una mano y lo hago caminar hasta mi habitación.

-¿Que es? - cuestiona curioso con el ceño fruncido.

Me muevo rápidamente hasta mi armario y agarro la no tan pequeña caja envuelta con papel de regalo. Le va a encantar.

Emocionada me volteo y le extiendo la caja ya cuando estoy frente a frente a el.

Sus ojos se abren a todo tope y toma la caja con las manos temblorosas.

-Ábrelo , vamos. - ordeno mientras observo cada uno de sus movimientos. El toma asiento en los pies de la cama y lentamente con cautela rompe el papel pegado a la caja. Sus ojos verdes se mueven hacia los míos al ver la caja. -Continúa. - susurro y tomo asiento a su lado. El respira hondo y abre la caja enseguida.

Su rostro es todo un poema. Sus ojos se agrandan y una gran sonrisa adorna sus labios rosados.

-¡Un libro para pintar! ¡Wow! - da brincos en su lugar y comienza a ojear el libro.

No puedo evitarlo , siento como si mi corazón fuera a estallar. Era lo más hermoso de el mundo ver a este hombre sonreír. Sabía que iba a amar este libro para pintar , el hace las cosas pequeñas tan emocionantes. Es una de las cosas que amo de el.

-Y tiene las crayolas para que pintes todo lo que quieras y cuando quieras. - acaricio sus rulos y el ríe feliz.

-¡Wow! ¡Gracias Wendy! - deja su libro a un lado y se me lanza encima. -Te amo. - me susurra al oído así provocando que una electricidad corra por toda mi espina dorsal. Su voz algunas veces es tan ronca y profunda. -Gracias por amar a Edward , nunca me dejes Wendy por favor. - se aleja y vuelve con su libro.