6. No necesito que tú lo acabes, Ángelo Marchetti

10.8K 1.1K 119
                                    

Beatrice:

La cabeza aun me da vueltas cuando abro los ojos y la imagen es borrosa, pronto descubro que Ángelo está a mi lado, sentado en una silla mientras yo estoy en una habitación color crema.

Intento moverme.

—No lo hagas.—Me pide, su voz es baja, me hace acostarme otra vez.

Mi mirada se detiene sobre la suya y nuestros ojos se encuentran, por un momento Ángelo se me queda viendo, pero hay algo en su expresión, algo que entiendo que no está bien.

Ángelo vuelve a sentarse sobre la silla y yo trato de recapitular todo, aunque solo son flahback.

—Hubo una explosión.

—Nos atacaron.

—¿Y cómo fue que estamos..

—Solo fue un ataque, no iban por nosotros, nos querían muertos.

Me querían muerta a mí.

Todo comienza a regresar y al notar la mirada de Angelo, es facil atar cabos.

—¿Está muerta?

Ángelo pone sus ojos dolidos sobre mí.

—¿Gabriella Rizzo está muerta?

No me lo dice, me lo muestra.












(*)









Es la "Casa" de Dante Grimaldi al lugar donde estamos, no, ahora que es una persona buscada no me queda duda de que este debe ser uno de sus tantos lugares donde se refugia.

No hago preguntas hasta que llegamos a la habitación, dentro esta Dante y está sosteniendo la mano de Gabriella, llevándola a sus labios.

El estado en el que esta debe ser crítico, porque tiene un respirador en la boca y esta inconsciente.

—Te dije que no se te ocurriera entrar.—Dante gruñe, su mandíbula se aprieta, pero aunque trata de mostrarse serio, puedo ver sus pies sin dejar de moverse.

Conozco esa conducta, la he visto en muchos hombres y jamás imagine verlo igual a él.

Dante Grimaldi realmente es una persona muy diferente a la que conocí y ya es tiempo de que vaya acostumbrarme,

Han lastimado a la mujer que ama, es probable que quiera asesinarnos a mí y a Ángelo.

—Yo quise verla.

Dante abre los ojos y deja la mano de Gabriella.

—Tú tampoco eres bienvenida aquí.

Dante se levanta y se acerca a nosotros, sus ojos están rojos, tan rojos de haber llorado que me dejan sorprendida.

—Todo aquí es tu maldita culpa.

Separo los labios.

—¿Acaso le has dicho?

—¿Me ha dicho qué?.—Yo me tenso y Angelo va directo hacia mi.—¿Beatrice...?

Trago saliva.

—¿Qué cojones, Dante?

Dante completamente furioso como un toro, coge del cuello de la camisa a Ángelo y lo estampa contra la pared.

—¿Te lo advertí, no agente?

—Maldita sea, Dante.—Hablo yo.

Sus oídos me ignorar y Ángelo no intenta nada, de alguna forma debe creer que todo esto es su culpa.

—¡Te advertí que si mi mujer salía lastimada, yo iba a matarte!

—Suéltalo, Dante.

No lo hace, nada puede detener a Dante Grimaldi ahora.

—¡Mírala, hijo de puta! ¡Mira como ha quedado Gabriella por tu culpa y por culpa de esa zorra!.—No deja de gritar, la vena de su cuello está a nada de estallar y sus ojos rojos irradian enojo incontrolable.—¡Matarte es lo que debería hacer ahora mismo! ¡Debería matarte en este instante, Ángelo Marchetti!¡Matarlos a los dos!

—¿Piensas que eso quiere, Gabriella?

—Ni se te ocurra mencionarla.—Lo amenaza, su agarre sobre Ángelo se aprieta.—No te atrevas a decir su nombre.

—Ella no quisiera que hicieras esto ¿No? Así es Gabriella... lo acabare.—Le responde Ángelo.—Encontrare a quien hizo esto y lo acabare.

Mala idea.

Dante lo golpe contra la pared una vez más y luego lo suelta, observo sus puños apretados marcando las venas dentro de su cuerpo.

—No.

Dante observa a Gabriella, hay dolor en su mirada.

—No necesito que tú lo acabes, Ángelo Marchetti.

Se vuelve hacia Ángelo y completamente enojado, lanza una promesa.

—Esto ya es personal. Yo mismo terminare esto.

Mis ojos se abren.

—No voy a dejar que se quede así. Antes de que Gabriella despierte, yo ya lo habré terminado.

Separo los labios y él se vuelve hacia mí.

—Y tú.—Me ordena.—Ya díselo todo, puta mentirosa.

Abro los ojos, me da una mirada furiosa antes de salir de la habitación completamente furioso.

Me quedo en silencio y Ángelo no tarda en enfrentarme, mi mirada sube al tenerlo delante de mí y no sé por dónde empezar.

—Ahora tu y yo vamos a hablar .—Me asegura el Ángelo.—Y vas a decirme todo, Beatrice.

Hay un jodido nudo en mi garganta.

—¡Vas a decirme cada maldita palabra que me has ocultado!

De alguna forma, ya estoy preparada.





Gabriella sigue viva y Dante ira detrás del responsable :O :O

¡Esto se super prendió! :o

Hoy nos quedamos aquí.

Nos leemos.

>>Yiemir.

Nacidos en la Mafia (#6 Hijos de la Mafia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora