𝟏𝟑

931 83 9
                                    

HINATA

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


HINATA

Al día siguiente, cuando comienzan a circular por el instituto algunos rumores sobre los ojos morados de Sasori, me preparo para una posible represalia.
Y ocurre antes de la clase de cálculo, justo después del almuerzo. Shion se acerca a mi taquilla tan rápido como puede con unos tacones de aguja, y me espeta con esa voz aguda y penetrante, que resuena en los pasillos de cemento, que soy una persona horrible por dejar que mi hermanastro haya golpeado a Sasori.

-En el restaurante quedó claro para todos que ibas a liarte con él -dice ella, con los brazos en jarras. -Y gracias a ti el entrenador de béisbol lo ha echado del equipo por meterse en peleas.

-Llevaba un gorro y estaba escondido en el bosque. -¿Qué más necesita saber? me pregunté.-Es un idiota.

Shion me mira con frialdad.

-Voy a hacer todo lo posible para asegurarme de que tú y tu pequeño grupo de inadaptados no seáis invitados a la Spring Fling.
Toneri está loco, mira que querer que asistáis...

Aprieto los dientes. A mí no me importa mucho, pero Gaara e Ino se van a sentir desolados.
Se echa el pelo hacia atrás.

-No sé por qué le gustas tanto.

Aprieto los libros contra el pecho. ¡Dios!, estoy harta de este lugar. Estoy harta de chicas como Shion.
Pero, sobre todo, quiero largarme y encontrar un lugar en el que encaje... Un sitio cualquiera, en cualquier parte lejos de aquí.
Gaara aparece a mi lado de repente, y tiene la nariz arrugada como si estuviera oliendo pescado en mal estado.

-¿Algún problema?

-No -le digo, sin apartar los ojos de Shion.-No pasa nada. Shion ya se iba.

La aludida pasea la vista por el guardapolvos de cuero negro que Gaara lleva puesto con unos pantalones de color caqui y una camisa blanca, abotonada hasta arriba, y hace una mueca.

-Eres muy raro... -le escupe con desdén antes de irse.

-¡Menuda zorra! -dice, siguiéndola con la mirada antes de volverse hacia mí.
- ¿Estás bien?

Asiento con la cabeza. No quiero hablarle todavía sobre la fiesta.

-Sabes que en realidad me importa una mierda la Spring Fling, ¿verdad? -suelta como si me hubiera leído la mente.

Arqueo las cejas, y se ríe.

-Vale, me importa, pero si este episodio con Sasori te hace sentir incómoda, podemos dejarlo e ir a nuestro aire.

-¿Y perderte la fuente de champán y el DJ? -Sonrío con tristeza.

-Piensa en la gran cantidad de gente borracha de la que nos vamos a poder reír.

-Son todos unos imbéciles.
Sonríe.

-Todos menos nosotros.

Me río y lo abrazo. No importa lo que nos depare el resto del curso, me alegro de que sea mi amigo.
Después de ir al instituto, corro al dormitorio en la residencia, donde me deshago con rapidez de la falda a cuadros y la camisa blanca, que me cambio por unos vaqueros y un polo negro. Tengo prisa, y apenas me da tiempo a trenzarme el pelo antes de salir por la puerta para ir a trabajar, algo que espero con impaciencia. Necesito una distracción para no pensar en Naruto.

𝓚𝓲𝓾𝓫𝔂   ✶   𝒩𝐻 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora