Capitulo 15

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Íbamos de regreso al tren y todos se veían mas ansiosos que nunca, mas emocionados, mas osados de alguna manera buena.
Solo escuchaba como hablaban sobre una tirolesa, nuca había visto o subido a una y no me sorprendería que los osados se tiraran por ahí de vez en cuando. La curiosidad me gano y bueno tuve que preguntar sino pudiera ser que muriera y nunca supiera de que se tratara.
-- ¿Que es eso sobre la tirolesa?-- pregunté a Car.
-- Solo un rito de iniciación, pero creo que yo paso, no me gustan las alturas-- respondió.
-- Suena interesante.
-- Lo es, también dicen que es divertido y emocionante, ¿quieres venir?, yo tengo que probarlo-- dijo Calvin.
-- Mmm creo que lo intentare, no tengo nada que perder-- dije.
-- Bine, entonces vamos-- dijo Calvin.
-- Nos vemos al rato en tu departamento Car, no me esperes despierta-- dije con sarcasmo y guiñándole el ojo intentándola de molestar por mi ausencia con Calvin.
Ella solo rodó los ojos y yo sonreí y seguí caminando.
Cuando llegamos a un edificio al que todos los osados iban Clavin empezó a bajar el paso.
-- Sabes fue muy rebelde eso que hiciste para llegar a la noria-- dijo viendo hacia el piso.
-- Quería ir y no iba a dejar que nadie me detuviera-- respondí.
--¿Cual fue tu resultado en la prueba de aptitud?-- preguntó Calvin.
-- Es contra las reglas decirlo-- respondí. No iba a decirle y dejar que otros supieran no después de escuchar lo que dijo el abnegado en mi prueba de aptitud.
-- Es obvio que no te salió una, cosa sino varias, divergente, si es obvio para mi va a ser muy obvio para los demás en la siguiente parte de la prueba, dime, ¿eres divergente?-- preguntó otra vez en voz baja.
--¿Y qué si lo soy?
-- Estas en peligro, no debiste venir a osadía, te van a matar si se enteran, y se van a enterar sino me dejas ayudarte, quiero ayudarte-- dijo.
-- No necesito tu ayuda, puedo sola-- respondí enojada.
-- Si, si necesitas, esto que paso hay no puede volver a pasar, no tan abruptamente, tienes que ser mas discreta, déjame ayudarte-- volvió a insistir.
--¿Por qué quieres ayudarme de todos modos?
-- No lo se, tal ves sea solo que yo también soy divergente y somos amigos, o puede ser algo mas, solo se que quiero ayudarte.
Y por alguna razón la divergencia de Calvin no me asombro en absoluto.
-- Ahora que lo pienso, ¿donde quedo tu discreción?-- pregunté.
-- Bueno pues, como ves mi físico no es discreto, y lo intente, pero simplemente soy muy guapo para ocultarme en la sombras, un desperdicio de material-- y ahí estaba en Calvin arrogante que conocía.
-- Bien tengo que subir, no me quiero perder la diversión, nos vemos luego-- dije y me voltee para caminar y Calvin me agarra del antebrazo.
--¿Me vas a dejar y ayudarte?
-- ¿Si te digo que si me suelta su me dejas subir?-- pregunté
-- Si.
-- Entonces si, ahora suéltame.

Vuelto a nacerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora