3. Cigarrillo-Parte II
Okey. No voy a negar que necesitaba una buena abofeteada verbal de mi amiga para despertar.
Creo que todos en esta vida necesitamos una Emma como amiga, esa que te escupe sin filtros la verdad en la cara a pesar de que duela como la mierda, pero es un dolor por el cual tenemos que pasar pasa volver a encontrar el norte cuando lo perdemos.
Así que Emma, te doy las gracias por hacerme reaccionar, por hacerme volver a intentar buscar la Felicidad que me merezco. Hoy es hora de salir del cascaron. Al carajo todo.
—¿Qué mierda tiene la bebida? ¿Estoy drogada?—pregunta ella y yo rio al verla mirar su trago con desconfianza.
—Soy muy real, creo que te debo las gracias por...
—Solo te di un empujón verbal, el que merece los aplausos sos vos, tu eres el que está buscando su felicidad—sonríe—. Necesito decir algo sucio para suplantar la filosofía de vida, como por ejemplo: Te ves de puta madre, todo una baja bragas y levanta pitos.
—¡Oh, por dios!—digo mirando algo avergonzado—. No sé porque me sigue sorprende, si tu boca y tu maldad son un arma nuclear.
Ríe antes de entrelazar su mano con la mía para arrastrarme por toda la casa, donde se lleva a cabo la fiesta algo descontrolada. Tomos un par de cerveza, luego sigo con un poco de vodka el cual solo tolero medio baso, llegando por ultimo al famoso "Dr. Lemon" al cual me prendo como sanguijuela desespera, lo cual no dura mucho tiempo, ya que un malon de personas me chocan terminando con mi deliciosa bebida sobre la remera blanca.
—¡Más cuidado hijos de un repoyo! —escucho que grita Emma.
—Eso después no sale fácil, amigo.
Frunzo el ceño ante el comentario. Ahora si estoy cabreado.
—Yo no soy tu...—detengo mi hablar cuando mis ojos se detiene en otros grises y divertidos. Esto no es real.
—Lo siento, mis amigos suelen ser unos imbéciles cuando se lo proponen. Si quieres te puedo llevar al baño de arriba y lavar tu remera.
No contesto. Solo lo observo.
—El si quiere, Tobías—interviene Emma—, solo tiene la lengua dormida por el alcohol, solo espero que se te despierte pronto—bromea codeándome con fuerza las costillas. Me quejo.
—Perfecto.
Miro a Emma con desespero. Ella sonríe antes de decirme al oído: "Afloja el trasero por si la tiene grande", empujándome para que lo siga, lo cual hago en silencio hasta que de golpe colisiono con su espalda y su pequeño tacto, aunque sea accidental despierta un cosquilleo en mi interior. Algo similar a la adrenalina.
—¡No fallen en la habitación de mis padres!
—¿Esta es tu casa?
—Sí—murmura volviendo a caminar. —Ellos están de viaje y yo la cuido o al menos intento hacer eso—me cuenta abriendo uno puerta y al terminar me mira para decirme:—esta es mi habitación.
Me tenso al verlo perderse en la oscuridad de su...habitación y decirme: "-Entra" con algo de voz ronca. Me adentro sintiendo los latidos de mi corazón zumbarme los oídos y más aún al darme cuenta de que estoy en la habitación y baño privado de Tobías.
—Lamento la oscuridad pero hace unos días se quemó la bombilla—me informa mojando la punta de una toalla.
La respiración se me corta y todos mis sentidos se desequilibran como mi traicionero corazón cuando el acorta la distancia colocando la toalla empapada en mi pecho.
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LAS MEDIAS DE RED [+18]
Historia CortaHola lectora. Si llegaste a este libro, he de ser por alguna razón: ¿Acaso fue la portada? ¿Acaso fueron las piernas? O ¿Simple la curiosidad de lo perverso y la necesidad de más? "LAS MEDIAS DE RED" es más que un título, son recopilaciones de pequ...