H O G A R|| La sociedad es una m*erda || Rubegetta

Extra: Noche de bodas

El traje blanco era muy bonito, si si, a la chingada el traje blanco!

Soy Akira, y vengo a darles porfín lo que todos estábamos esperando, la luna de miel.

Les seré sincera, no va a haber hard, después de mucho investigar y ponerme al tanto del tema tanto como  profesionalmente como superficialmente no creo que vaya a ser algo que este en mis historias.

Soy mas romántica, y sinceramente creo que no le va a mi estilo de escritura, sin embargo quizá algún día me anime, por ahora solo puedo ofrecerles diabetes.

Diabetes aguda.

Aunque si que intente hacer un capitulo mas...no se, lujurioso, dando también un poco de explicación muy leve, sin embargo no lo consideraría hard, mas bien una mezcla, entre lo romántico y lo lujurioso.

Atte: Akira.

[§]

Pese a la situación, querían ir lento, despacio, disfrutando cada sensación y sentimiento.

Para ellos no era solo "Sexo".

Mientras se amaran jamás lo seria.

Las manos del mayor sostenian con delicadeza la cintura del castaño, que gozaba de perderse en los labios de su esposo.

Esposo; que linda sonaba esa palabra.

El traje blanco fue retirado de a poco, empezando por la parte de arriba, dejando el cuello y pecho del oji verde expuestos, por alguna razón, Samuel estaba obsesionado con sus claviculas, es ahí donde solía perderse por varios minutos.

-Nunca entenderé esto-Murmuró Ruben entre pequeños jadeos, los labios del mayor le provocaba cosquillas y de alguna manera, un bochorno que conocía bien.

-Ni yo-Murmuró el contrario, dando un beso en la corbatura de su cuello, para mirarlo a los ojos y sonreir.

El traje del mayor ya no estaba en las mejores condiciones, tenia media camisa desabotonada y el saco se había perdido hace ya un tiempo, quizá estuviera cerca de la puerta de la habitación.

Ruben dejo que Samuel continuara con lo suyo, mientras deslizaba con delicadeza sus manos por el pecho de su pareja, deteniendose solo para desabotonar los últimos botones.

Samuel estaba trabajado, eso era algo que Ruben sabia perfectamente, pero siempre, siempre, sentir aquella piel cálida y fuerte en sus palmas le hacia estremecerse, lo gozaba mucho.

De ahí su obsesión con rasguñarle la espalda, la tenia levemente marcada, sin ser exagerado, y por ello, algunas veces cuando se movía, quedaba una "curva" en la parte de su espina dorsal, que hiba hacia el fondo, y entonces el se aferraba a su espalda, queriendo sentir cada movimiento,aunque algunas veces se pasaba, dejándose llevar por el éxtasis y el sentimiento.

Ruben pudo sentir como una de las manos del mayor dejaba de sostener su cintura, recorriendo con cuidado la orilla del pantalón de vestir, pudo sentir como Samuel sonreía de lado.

La camisa blanca del mayor empezaba a sobrar, así que empezó a quitarsela por los hombros, haciendo que el mayor tuviera que alejarse un momento para quitarsela del todo, Ruben dejo que sus ojos divagaran un poco por aquel cuerpo.

Samuel le miro con coqueteria en la mirada, inclinándose luego para darle un beso en los labios, donde Ruben le tomo del cuello para profundisarlo mas, pegándose también a su cuerpo.