CAPÍTULO 9: AMIGOS

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P.O.V Severus

Me encontraba caminando de un lado al otro, mi corazón estaba acelerado, me siento tan nervioso, eran las nueve de la noche y Harry no aparecía por mi puerta, aunque dudo que lo haga con todo lo que pasó este día. Gracias a Merlin la orden logró llegar a tiempo, lográndose armar una pequeña pelea en el ministerio contra los mortífagos, al parecer querían conseguir la profecía para el señor tenebroso, luego el mismo Lord apreció y se metió en el cuerpo de Harry lo bueno es que Albus ya había llegado y ayudo para que pudiera expulsarlo de el, luego de eso todo fue un alboroto, el ministerio llegó justo a tiempo para ver qué Voldemort si había regresado, todo esto me enteré gracias a Remus que me mandó un patronus para informarme de todo.

Estaba por  dirigirme a mi habitación cuando escucho unos pequeños golpes en la puerta, rápidamente me dirijo a esta y la abro, encontrándome con la nada misma, me hago a un lado y espero un rato, me giro y cierro la puerta, de repente siento como un cuerpo se presiona en mi espalda y unos brazos rodean mi cintura hasta juntarse en mi estómago.

- Potter, deberías estar descansando.- Siento como coloca su cabeza entre mi cuello y mi hombro, lentamente me giro sin deshacer el abrazo quedando cara a cara, puedo ver lo cansado que se encuentra.

- Necesitaba verte. - dice en un pequeño susurro, mientras una de sus manos acariciaba mi mejilla- Soy un estúpido ¿Verdad?

-No digas eso- mis manos viajan por su espalda, tratando de hacerlo sentir mejor.

- Hermione me advirtió que podía ser una trampa, y no le hice caso.

- Solo estabas preocupado por el bienestar de tu padrino, seguiremos con las clases de oclumancia y verás que serás excelente en ello.

- Gracias Sev. - Siento su aliento chocar en mi cuello y como deja un pequeño beso, me separo rápidamente, ese simple roce hizo que  un calor viajará por mi cuerpo, estaba cerca de mi celo, y mi cuerpo se ponía sensible.

- Vamos Sev, no te alejes - dice haciendo un puchero.

Me acerca de nuevo a sus brazos, me lleva hasta el sillón, se sienta y me jala para caer en su regazo, mis mejillas se calientan terriblemente, enserio que al estar con el se ha vuelto una costumbre. Su cabeza viaja a mi fuente de aroma y roza su nariz un par de veces antes de hablar.

- Tu olor se siente un poco, ¿no has tomado la poción ? - mis ojos se cierran ante las caricias.

- Si, mi celo está cerca es por eso que mi aroma se percibe un poco.

- Déjame ayudarte con tu celo.- Mis ojos se abren  de golpe.

- Harry, apenas nos estamos conociendo.

- Por favor, llevamos años conociéndonos, y estos últimos cuatro meses solo han servido para conocernos aún mejor.

- Creo que eso podemos hablarlo otro día. Quiero saber cómo te encuentras tu, te vez tan cansado. - digo acariciando sus manos que se encontraban en mi estómago.

- Es un hábito tuyo cambiar el tema... pero te responderé, la verdad si me siento algo cansado, Remus me contó que fuiste tú quien les aviso y que ya te había avisado todo le que pasó.

- Si me mandó un patronus contándome los hechos.

- Fue horrible, sentir a Voldemort dentro de mi, pensé que no podría controlarlo, tenía tanto miedo Sev, miedo de que viera dentro de mis pensamientos y se enterara de lo nuestro, no podría vivir si te pasará algo. Se que puedes pensar que todo esto que siento es demasiado apresurado, pero debo confesar que desde que te vi por primera vez sentí algo por ti, claro que simplemente era un niño de 11 años y cuando tuvimos nuestro encuentro en la primera clase me sentía furioso porque ni siquiera nos conocíamos cómo para que tuvieras algo en mi contra, y muchas veces sentía coraje cuando eras injusto conmigo, pero nunca he llegado a odiarte.

Es caprichoso el azarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora