Caro [KookTae]

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Jungkook bajaba las escaleras del edificio con prisa mientras su respiración se encontraba agitada, no podía cagarla en ese momento, iba a matar a Yeonjun si llegaba abrir la boca. Se detuvo en la puerta de su edificio apoyando sus manos en las rodillas recuperando el aire, sus ojos brillaron cuando vio al peliazul caminando hasta el parque que se encontraba al frente de su apartamento, hablaba por teléfono. Mierda.

-¡Choi espera allí! -el nombrado volteó su rostro confundido al ver a su familiar caminar hacia él, intentaba llamar a su novio pero este no atendía, le ponía los nervios de punta ya que Taehyun siempre contestaba.

-¿Primo? ¿Qué haces aquí? Lamento haberte interrumpido con Kim, pero ¿No deberías estar aprovechando el momento a solas con él? -Yeonjun se rindió, miro su teléfono frustrado por no poder comunicarse con su pareja. Elevó la vista bacia el rostro de Jeon quien lo miraba cruzado de brazos, ¿Estaba molesto?

-No malinterpretes la situación. Taehyung esta pasando por un momento difícil y solo le daba un hombro en el cual llorar, somos amigos. -le dijo al menor quien frunció el ceño y elevó una ceja incrédulo, ¿Acaso Jungkook creía que era idiota? Algo torpe tal vez e incluso olvidadizo, pero jamás idiota.

-Bien, él se sentó sobre tus piernas y se enrollo a tu cuerpo solo para ¿Llorar? ¿Sabes lo ridículo que suena eso? ¿Él tiene cuantos, veintidós o veintitrés años? No es un niño para hacer esas cosas, realmente me parece que esta necesitado de atención, Jungkook.-el pelinegro apretó su mandibula empezando a molestarse con el contrario, sí lo era. Taehyung llorando entre sus brazos era como sostener a un pequeño niño que rogaba que alguien para él, más no buscaba atención. Rió suavemente para negar al ver la mueca en su familiar.- ¿Qué? ¿Acaso Kim Taehyung y tu tienen algo?

-No importa, de todas formas ¿Qué carajos te importa a ti? Solo venía a a aclararte la situación por que Tae realmente esta mal y no necesita más mierdas como la que acabas de soltar, Yeonjun. -el peliazul abrió la boca algo sorprendido por lo que el mayor le habia dicho, nunca lo habia tratado de esa manera. Sintió su pecho un poco oprimido, aquella mirada que estaba recibiendo le quemaba.- Al parecer eres igual a los imbeciles de la universidad, solo críticas y te dejas llevar por lo que ves en la superficie. Estoy algo decepcionado, joder.

Jungkook dio media vuelta y sintió sus ojos picar, ¿Por que la gente amaba hablar tanto? No sabían por lo que pasaba aquel chico platinado, no lo había visto abrumado y derrumbado en los baños de la universidad ni lo vacíos que se encontraban sus ojos a veces.

No sabían nada.

Suspiró revolviendo sus cabellos meintras subía las escaleras del edificio, su cabeza empezaba a doler levemente y elevó la vista confundido cuando se topó con Kim bajando las escaleras, su rostro se encontraba mejor y sus ojos un poco hinchados.

-¿Ya te vas? -Taehyung se sorprendió un poco ante la pregunta y le tendió las llaved algo incómodo al contrarío. Debía ir a trabajar, lo habían llamado hace minutos y se habia negado a ir pues el cliente era alguien demasiado agresivo.

-Tengo que ir a trabajar. Intentaré ir mañana a la universidad, por favor no intentes llamarme hoy.-susurró viando Jeon tomó las llaves del lugar y asentía algo decaído. Kim dudó pero abrazó el cuerpo del menor quien se tensó un poco pero luego le correspondió.- Gracias, por ser tan terco y entrometido.

Jungkook soltó una pequeña risa al escucharlo y luego se separó sonriendo débil, su estómago estaba algo revuelto. Quería decirle que no fuera a trabajar, que lo dejara, que buscara otras opciones pero ya era tarde, Kim Taehyung ya estaba saliendo de aquel edificio con prisa.

El chico platinado caminaba con la frente en alto y respiraba profundo, sabía lo que le vendría. Quemadas, mordidas, golpes, ataduras, se estremeció ligeramente repitiendo mentalmente que la paga valdría la pena.

Sintió un empujón hacia una pared y como alguien tomaba su camisa con fuerza, abrió los ojos confundido r intentando soltarse de aquel chico peliazul que mantenía un rostro serio.

-Kim, no se que mierdas buscas de mi primo Jeon pero créeme que no lo encontrarás. Aléjate por tu bien, si inentas sacarle dinero es algo que no lograrás, si quieres meterlo en tus dorgas o lo que sea, eso tampoco ocurrirá. Jungkook no será manipulado por ti, así que deja de buscarlo.

Taehyung se soltó y le dio la vuelta a la situación rápidamente, tomó la camisa del menor con los ojos cristalizados pegándolo con fuerza a la pared sin importarle si lo lastimaba o no.

-¿Qué coño te ocurre? ¿Manipularlo dices? Tu jodido primo ha pasado semanas pegado a mi como una lapa, hablándome y buscándome. ¿Por que mierda iría yo tras él? Déjame en paz mocoso. Búscate una puta vida y dejame vivir. -los soltó mirándolo con algo de odio tenía unas tremendas ganas de llorar y no lo comprendía. ¿Por que se sentía así?

La bocina de un auto negro y akgo costoso sonó el claxon, Taehyung ignoró a Yeonjun quien acariciaba su nuca por el golpe que se dio en la cabeza. Kim suspiró mientras caminaba hacia el auto, su jefe lo había ido a buscar, miro por última vez a aquel chico peliazul y pensó en lo diferente que era de Jungkook.

- ¿Todo en orden, Caro? -la mujer colocó los seguros al auto y encendió la radio mientras le daba una calada a su cigarillo. Taehyung odiaba el olor del humo con demasía.

-Si, todo en orden.-Kim empezó a retirar sus ropas para tomar la bolsa que se encontraba en el asiento trasero, empezaba a cambiarse. La mujer lo observó divertida, trabajaba con varios chicos de bajo recursos y les daba una oportunidad, ah, este platinado le estaba haciendo ganar muchísimo dinero.