|||NARRADOR|||
" fuerzas llenas de furia se apoderan de mi cuerpo,
La pesades con la que tus palabras llegan a mis oídos me deja poco a poco más sordo,
La sonrisa que iluminaba la oscuridad durante una pesada noche abrumadora ya no es la misma,
El sonido estridente de tus gritos ya no me emociona,
El palpitar de tu corazón pegado a mi oído ya no me hace sentir en calma, la voz que decía que siguera... Ahora me dice que pare... Y seguro estoy
De que no lo haré... "Las pisadas pesadas, arrastradas y llenas de cansancio de el joven castaño de brillantes ojos azules desesperaba poco a poco la poca paciencia que el joven de ojos carmín poseía, estaba a nada de soltarle un puñetaso a la espalda baja para que se enderezara y siguiera caminando correctamente.
- Borja, hasle un favor a tu columna y camina recto por favor... - soltó sin pelos en la lengua el menor de los dos, hace rato que ya volvían de el templo de Safiro y no habían tenido descanso desde que partieron.
- Auronsito... Déjame descansar, yo en cambio a ti me la paso dando órdenes y haciendo tareas pequeñas, no tengo resistencia de constructor pagado como tu... - reprocho con desgarre en la voz, el ojicarmin solo giro los ojos con frustración.
Con un movimiento ajíl de sus pies, el pelinegro hiso tropezar a su acompañante tirandolo de trasero directo al suelo....
- primero que nada, no me llames "Auronsito", pues no te has ganado ese derecho, en segunda tengo que llegar a la capital lo antes posible, oh a este paso Rubén ya debe haber sido degollado por el rey... - el pelinegro siguio avanzando por el sendero mientras el castaño se levantaba con molestia.
- por lo menos deja de pensar en el un minuto, no te hará ningún daño concentrarte en ti... - el castaño corrió hasta llegar a su lado para después mostrar un semblante serio.
-claro, como no, el es la cosa más importante incluso antes que mi propia vida... No puedo dejar de pensar en el aunque quiera... - las palabras de el pelinegro avían entrado como dagas en el corazón de el castaño, el inevitable picor de los celos se hiso presente unos segundos después de aquello.
La mirada azul de el más alto se había vuelto oscura, como era posible que aún con la posibilidad de que ellos fueran atacados por alguna criatura de el bosque, siguiera más preocupado por aquel sujeto el cual el castaño no conocía ni de vista.
El máyor tomó los hombros de él pelinegro deteniéndolo, su pecho avía comenzado a subir y bajar de forma pausada, las ganas de gritar de frustración se atoraban en su garganta, y las lágrimas de enojo se acomularon en sus ojos.- ¡TE AMO, ¿NO ENTIENDES ESO?, ODIO CUANTO LO MENCIONAS, CUANDO DICES QUE ES LO MÁS IMPORTANTE DE TU VIDA, ARDO EN CELOS SOLO DE RECORDARLO, DE ESCUCHARLO, ¿COMO CREES QUE ME SENTÍ CUANDO TE FUISTE DE KARMALAND PARA IRTE CON EL? ¿COMO?- cada palabra de el castaño salía más ahogada que la anterior, más dolorosa, más pesarosa, mientras más palabras comenzaban a salir de la boca de él castaño, su agarre en los brazos de el pelinegro se hacía más fuerte- ¡¿CUANTOS SUEÑOS DE TI MARCHANDOTE DE AQUÍ CREES QUE SOÑÉ?! ¿cuántas veces....crees que desperté recordando tu sonrisa y tus lágrimas...? - lo último se había atorado en su garganta de forma dolorosa...
El ojicarmin no quería llorar, pero sus piernas flaqueaban ante la voz destrosada de el castaño, estaba a punto de ceder ante el dolor.
- se que fui un estúpido, se que me porte infantil, se que tu también tienes tu vida y tus decisiones las tomas tu... Pero por favor, solo por favor, deja de pensar en el un minuto... Solo eso te pido, por favor...- la cabeza de el castaño había terminado derrotada en el pecho de el pelinegro, el cual tenía las lágrimas apunto de caer por sus mejillas.
- e-está bien... - la voz entrecortada de el pelinegro sonaba realmente desconcertada, era la primera vez que escuchaba la voz de Borja tan desesperada... - Luzu...-el ojiazul abrió los ojos sorprendido, había extrañado aquel apodo probeniente de esa dulce voz.
- ¿si? - la diminuta sonrisa que se había formado en el rostro de él castaño era fácilmente ocultada por la posición en la que estaba su cabeza.
- yo no me fui por Rubén ese día... - entonces fue cuando el castaño volteo a verle. - ese día me fui, porque te volviste un estúpido con migo... - el castaño se separo de el pelinegro con el seño levemente fruncido.
- ¿entonces tu... Entonces fue mi culpa? - el pelinegro acintio levemente después.- ¿pero y que paso con Lana... Acaso no la querías a eya también? -
- algo así, solo me había ido por enojo, después no tuve las ganas de volver, aunque hagas iluciones sigo enojado con tigo...y pues Lana, lo de Lana fue porque la quería ayudar a escapar de todo-
- entonces no fue ellos a quien querías... Era a... - los ojos azules de el castaño brillaron con fuerza. Se lanzó a abrazarle, sin importarle las múltiples quejas que soltó el pelinegro después.
- vámonos quieres, aún estoy enojado con tigo y tengo que buscar a Rubén... - el castaño miró mal al pelinegro, pero ahora con más burla que otra cosa - ya deje de pensar en el un minuto ay que seguir... - su voz fue cada vez más lenta pues la mano de el ojiazul tomó la suya con delicadeza, la mirada carmín miró ese gesto sonrojado levemente.
- perdóname... - ese tono de voz le había erizado la piel, su corazón había latido de manera estrepitosa de forma repentina y sus ojos se sentían arder. - por todo... Por cualquier cosa que pasara en el pasado... Y también por lo que voy a hacer... - entonces el tacto de los labios contrarios se estampó con los sullos, la mano de el castaño había pasado a la cintura de él ojicarmin, más este solo estaba en silencio, con las mejillas apunto de reventar, pero unos segundos después de sentir los labios de él castaño sobre los suyos, le correspondió...
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Espero que les aya gustado....
Díganme si hay errores ortográficos no sean ojetes por favor.........
Sin más que decir adiossssssssssss
1045 palabras xD
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BAJO TU MIRADA //rubegetta//CANCELADA
RandomAhí estaba un pequeño oso bebe, con suave pelaje castaño, pequeñas orejas abultadas y una nariz respingadita. Este corría divertido junto a lo que parecía ser su pequeño hermano y bajo la mirada protectora de su madre... De pronto una pequeña y deli...