No es un crimen si no hay un cuerpo

44. ¿La extrañas?

16 de Agosto, 11 de la mañana.

Después de que Leah se la pasara hablando acerca de lo genial que era su plan para que Oliver nos diera información, Darmian por fin aceptó.

En estos momentos el chico le esta haciendo unos cuantos retoques a los dispositivos que usaremos para esta misión.
Decidí acompañarlos para estar enterada acerca de todo, no quiero perderme ningún detalle; ambos quedaron de verse hoy a las dos de la tarde antes de que Oliver entrara a clases.

Si les soy sincera no creo que este plan vaya a funcionar, Oliver no se ve de los tipos que andan hablando de todo lo que pasa en sus vidas, se ve callado, algo amargado y un tanto misterioso, pero quien sabe, quizás si funcione, quizás nos de mas información acerca de su ex novia... ya lo veremos.

- ¿Estan listos?- les pregunto. Leah esta haciendo algunos snacks para comer allá, esta tan emocionada, cree que esto terminara en golpes pero Darmian no lo sabe.

- Terminé.

- Yo también- lleva una gran canasta con toda la comida.

- ¡Wow! Eso es demasiada comida- nuestro amigo intenta agarrar algo de ahí pero Leah le da un manotazo.

- Es para Edda y para mi, tendremos una tarde de picnic... estas invitado solo si consigues información- el chico pone mala cara, Leah le muestra su lengua y es la primera en salir.

Ella coloca la comida en la parte de atrás, se ve que todo esta súper delicioso y hace que me gruña el estómago. Cuando todos subimos al carro ella lo enciende para comenzar a conducir hacia nuestro destino.

Nuestro amigo lleva muy mala cara, como si fuera a vomitar de tan solo estar cerca de su amigo, lo cual es comprensible después de todo lo que le ha hecho pasar aquel chico. No entiendo como se seguían hablando después de todo lo que paso; quizás yo soy muy orgullosa o rencorosa como para hacer lo que Darmian, pasar tiempo con alguien que me traiciona no cabe en mi imaginación ni por un segundo.

Coloco algo de música para ver si asi logro distraer a mi amigo de sus pensamientos, no quiero que vomite en el carro de Leah, está muy bien cuidado como para que eso pase. Canto una que otra canción ya que en ocasiones siento que los fastidio a todos aunque se que mi voz no es horrible, ni siquiera cuando intento hacer notas altas, todo gracias a años de practica por obligación.

Al pasar una media hora o más llegamos a nuestro destino. Nos estacionamos a unos cuantos metros del parque.

- Úsenlos en cualquier parte, no importa cuanto nos alejemos siempre estarán escuchando todo.- dice Darmian tendiéndonos los dispositivos. Me coloco el audífono, Leah es la que llevará ambas cosas.

Dejamos que nuestro amigo sea el primero en bajar del vehículo, solo por si Oliver ya esta aquí, para que no vea que viene con nosotras y se aleje.

- Aun no llega- dice él. Leah y yo bajamos del auto también. Caminamos hasta el centro de la plaza en donde hay un quiosco con pequeñas mesas y bancas en el centro.

Leah tiende el mantel en una de las mesas, no hay absolutamente nadie aquí... probablemente porque es muy temprano y el sol quema como un infierno, además que es martes, así que mucha gente esta trabajando. Desde aquí podemos ver a Darmian a la perfección, de hecho se puede ver cada rincón del parque, incluso los sitios ocultos para los enamorados; dejo de ver a nuestro amigo para ayudar a Leah con la mesa, trajo de todo, incluso frutas.

- Traje de tus favoritas- me dice cuando observa que me le quedo viendo a las uvas, ¿cómo supo que me encantan?

- Gracias- le sonrío.