74. ¿Es el final?

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23 de septiembre, 7 de la mañana.

Este será otro día divertido, para comenzar tengo que ir al banco, mi nueva víctima estará esperándome afuera para hacer un depósito, en la ocasión anterior cometí el error de hacerlo por mi cuenta, afortunadamente nadie decidió buscar ahí. El deposito es solo para disimular, todo eso será dirigido a la familia de Jacinto, para que logren pagar un buen abogado y liberarlo, todo esto fue idea del comité, si por mi fuera lo dejaría adentro de la cárcel durante el resto de su vida.

La que si me importa es Vera, se que ella tiene agallas y podrá arreglárselas sola allí adentro pero de igual manera no quiero que se quede ahí. Es mi máxima inversión.

No me he puesto en contacto con ella directamente desde que la arrestaron, tengo miedo que alguien se entere de mi, ya corrimos bastantes riesgos. Como siempre, todo fue idea del comité.

Me levanto de la cama para ir a mi tocador, cepillo mi cabello rubio de abajo hacia arriba, tal como mi madre lo hacía. Me acerco mas al gran espejo para ver mi pequeño granito, de seguro salió por culpa del polvo corriente que me pusieron el día de ayer en la sesión fotográfica, que asco. Tendré que aplicarme mas base de lo usual para tapar esta monstruosidad.

Necesito ropa nueva, mi armario esta lleno de cosas que ya no necesito.

- ¡Mariela!

- ¿Si señora?

- Cuando termines de hacer tu trabajo, tira toda esta ropa a la basura o... dónala, si quieres quédate con algo de ahí, iré de compras mas de rato.

- Si señora.

- Es todo- ella sale de la habitación.

Mariela lleva trabajando para mi desde hace ya bastante tiempo, es una chica unos cuantos años menor que yo, es bastante atractiva a decir verdad, de hecho, ya tiene la edad suficiente como para presentársela al comité, de seguro le encontrarían un buen lugar en otro país y nos darían una fortuna por ella.

O tal vez no lo haga, sus padres han trabajado en esta casa desde que me mudé e incluso antes de que yo naciera, cuando vivía con mis padres.

Ahora que lo menciono, tengo una cita con mi madre en la tarde.

- Vic, agrega un recordatorio, cita con mamá a las cuatro de la tarde.

- Recordatorio agregado- mi celular se vuelve a apagar.

Escogí un outfit casual, hoy no tengo mucho que hacer, solo estaré en mi oficina todo el día. WSW está en la cima desde hace un mes, necesitamos mantenernos así, la competencia en el mercado no es algo fácil, nosotros somos la primera revista en llegar al puesto número uno de ventas en todo el país en tan poco tiempo.

Todo eso es gracias a mis fans, no se que haría sin ellos.

Salgo de mi casa, mi chofer está esperando en la camioneta con la puerta abierta.

- Buenos días, Gustav.

- Buenos días, señora- su acento francés no hace mas que enloquecerme, en el buen sentido.

Gustav es el padre de Mariela, el señor vivió toda su vida en Francia pero nació aquí en Northell. Según mi madre, vino aquí en busca de un gran empleo, cuando fue rechazado la mayoría de veces optó por trabajar para nosotros, como había dicho antes, lleva muchos años aquí.

- Hacia el banco, Gustav.

- Si señora.

Gustav conduce como el ancianito que es, en ocasiones me da miedo que el lo haga, él dice que su vista es perfecta pero lo dudo mucho, afortunadamente nunca ha puesto en peligro nuestra vida.

No es un crimen si no hay un cuerpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora