Mis amados niños (Yakusoku no neverland)

Capítulo 26: La horrible noticia

Sarah corrió lo más rápido que pudo hacia el orfanato.

"¿¡Quiénes son ellos!? ¿¡Mamá-Mamá va a estar bien!? ¿¡Mamá a volver!? ¿¡Ellos van a volver!? Tengo que decirle al resto a Annie, a Donald, a Eru y al resto ¿Me van a creer? Espero que sí." Pensó la niña mientras corría.

Los pensamientos de Sarah no tenía fin alguno, parecía un remolino.

Era un remolino de pensamientos.

Un remolino que no tenía fin, ideas iban y venían sin detenerse, preguntas aparecían sin tener respuestas y la ansiedad aumentaba.

Mientras que Sarah corría para avisarle al resto de sus hermanos y hermanas sobre los extraños visitantes, los niños se encontraban esperan a su mamá y a Sarah.

—¿Por qué mamá no viene?—le pregunto Michelle a Daniel.

Los niños ya llevaban algunos minutos esperando a ambas pero aún que pasaba el tiempo ninguna de las 2 llegaba.

—Mamá se esta demorando.—dijo Norman en voz baja mientras abrazaba su conejo de peluche.

A lado de Norman se encontraba Phil quien tenía a Ray entre sus piernas.

El menor se encontraba durmiendo mientras se apoyaba en el torso del mayor.

"¿Por qué mamá se esta demorando tanto? Esto no tiene sentido." Pensó Phil mientras veía al resto de sus hermanos.

—Creo que deberíamos ir a buscarlas.—le dijo Marie que le sujetaba la mano a Isabella.

—¡Vamos a buscarlas!—opino James mientras sonreía.

—Vamos por mamá y por Sarah.—dijo Donald mientras veía a los más pequeños.

—No.—dijo Annie de pronto haciendo que todos la vieran.

Annie realmente quería ir a buscar a su mamá pero no podía solamente ir y desobedecerla.

Su mamá no les mentía.

Ellos no tenían porqué desobedecerla.

Annie no quería que su mamá se fuera a enojar con ella o con algunos de sus hermanos y hermanas.

Tampoco quería que el resto fueran al bosque preocupados por que mamá no llegaba.

Podría ser peligroso.

—Solo esperemos un poco.—les pidió Annie sonriendo mientras le acariciaba la cabeza a James.

Todos los niños aceptaron la petición esperando a que su hermana tuviera razón.

Phil miro de reojo a Annie y abrazo a Ray.

—¿Sarah?—pregunto Ángela que estaba sentada a lado de Donald.

Phil miro a la niña la cual corría hacia ellos.

—¡Es Sarah!—grito Daniel más tranquilo al ver a la niña.

Natalie se levantó justo a tiempo para agarrar a Sarah quien por el cansancio estuvo a punto de caerse.

—¿Sarah?—le llamo Mark, preocupado, a su hermana al ver como la niña tomaba grandes bocanadas de aire.

—Ayuda... mamá.—dijo Sarah que era ayudada por Natalie, quien la ayudo a sentarse.

—¿Paso algo?—le preguntó Thomas a Erukiel mientras le sujetaba la mano.

—Mamá... ayuda...—volvió a decir Sarah mientras se dejaba caer sobre el césped.

—Sarah.—le llamo Phil a la niña mientras se le acerca a con Ray en brazos.—¿Por que pides ayuda?

Sarah cerró sus ojos y poco a poco unas lágrimas empezaron a caer.

La niña se levantó de inmediato y se tocó las mejillas que estaban húmedas.

¿Porque lloraba? ¿Era por su madre?

De pronto Sarah se tocó la cabeza.

Había visto algo pero no sabía si era imaginación o un recuerdo.

Era una figura extraña de gran tamaño y con 2 ojos en una posición extraña.

En vez de estar uno a lado del otro estos estaban uno encima de otro.

—Duele.—dijo Sarah mientras se agachaba y lloraba aún tocando su cabeza.

—Sarah ¿Qué ocurrió?—le preguntó Emily a su hermana.

—Tenemos que ayudar a... mamá.—dijo Sarah con mucho dolor al decir la última palabra.

—¿Qué le pasó a mamá?—le preguntó Ángela preocupada.

—Personas extrañas... me sujetaron... y a mamá también... mamá me salvó... pero ella...—la frase de Sarah quedo a medio decir ya que de sus ojos salieron más lágrimas.

Los niños menores se asustaron y abrazaron sus hermanos mayores.

—Phil.—dijo Norman mientras le sujetaba de la mano al mayor quien aún cargaba a Ray.

Ray poco a poco empezó a despertarse y vio el rostro preocupado de sus hermanos y hermanas.

—¿Qué paso?—le preguntó Ray a Jessica que estaba cerca de ellos.

Annie trago un poco de saliva y no supo que hacer.

—Mamá.—dijo Isabella preocupada por Emma.

—Tenemos que ir por mamá.—decidió Phil tratando de sonar sereno.

Donald asintió con la cabeza.

—Se me ocurrió algo.—dijo Lucas que abrazaba a Michelle quien estaba asustada.—Que algunos vayan a buscar a mamá y el resto esperamos.

Phil se puso adelante del grupo.

—Ya se que hacer.—dijo el niño al cual se le había ocurrido una idea.—Que Annie, Donald, Erukiel, Daniel y yo vayamos por mamá mientras que Natalie y Lucas cuidan de los más pequeños.

Los niños se miraron entre si y rápidamente algunos se pararon.

Phil solía sacar 300 en las pruebas diarias así que confiaba en él.

—Phil tú te quedas aquí.—le dijo Daniel al menor preocupado por el.—Ayuda a Natalie y a Lucas a cuidar al resto.

Phil negó con la cabeza y se acercó a Annie.

—Annie deja que yo también vaya por favor.—le pidió Phil a su hermana mayor.

—Me gustaría que te quedaras aquí.—le volvió a decir Annie.—Van a necesitar ayuda para cuidar a los más pequeños y a los bebés.

—Annie.—le llamo Phil a su hermana mientras le sujetaba la mano.—Por favor ella es mí mamá.

Annie miro a Phil algo confundida.

Las últimas 2 palabras que dijo Phil no sonaba como siempre.

Todos la llamaban mamá, Annie había oído a sus hermanos y hermanas llamar a su madre miles de veces.

Sin embargo las palabras de Phil sonaban extrañas.

Annie soltó un suspiro.

—Bien haremos esto Donald, Erukiel,
Daniel, Phil y yo vamos a buscar a mamá.—les dijo Annie a sus hermanos.—Mientras tanto Natalie y Lucas tienen que cuidar a los bebés y a los pequeños, Jessica y Ángela ayuden a Natalie y en especial a Lucas para que no se enferme

—¡Yo también quiero ayudar!—dijo Isabella mientras levantaba su mano.

Marie y Emily también levantaron sus manos.

—Bien ustedes 3 se harán cargo de la seguridad.—les dijo Annie dejando confundido al resto.

—¿Seguridad?—le preguntaron todos.

—Sí.—respondió Annie.—Vamos a llevar algunos platos y algunos vasos para poder defendernos, se lo vamos a tirar y si se rompen a lo mejor nos sirvan mucho más.

—¿Nosotros también usaremos platos y vasos?—le pregunto Mark a su hermana.

—Sí.—respondió Annie seriamente.—¡Ahora a prepararnos!