—Bien niños.—dice Emma mientras se para a lado de Alicia quien estaba vestida con una ropa diferente a la usual.—Vengan a despedirse de Alicia.
Los niños y niñas corren hacia su hermana de 9 años que había sido adoptada.
—Tienes que cuidarte mucho Alicia.—le dice Annie a la niña mientras cargaba a Carolina.
—Sí.—dice Donald mientras trata de no llorar ya que tiene a Antonio en sus brazos.
Las despedidas continuaron por algunos segundos hasta que Emma decidió que es hora de irse.
—Voy a dejar a Alicia.—dice Emma mientras sonríe pero realmente lo único que quiere es llorar.
—Adiós.—dice Alicia mientras sujeta su maleta y la mano de Emma.
—Annie.—le dice Emma a la niña de 11 años.—Por favor acuesta a tus hermanos menores.
La niña asiente con la cabeza y Emma sale del edificio con la niña agarrada de la mano y empieza a caminar.
Da unos pasos con la niña y se detiene.
—¿Qué pasa mamá?—le pregunto Alicia confundida.
Emma le sonríe, se agacha y carga a la niña quien abraza con fuerza a la mujer.
—Te voy a cargar ya que es la última vez que te voy a ver.—le dice Emma mientras le sonríe a la niña.
Alicia abraza fuertemente a Emma quien empieza a caminar y a cantar una canción.
A medida que Emma canta empieza a recordar.
Alicia abraza a su mamá y poco a poco se va quedando dormida debido a la fina voz de Emma y al calor corporal de la mujer.
Emma camina lentamente para que Alicia se quede dormida y así evitar que ella vea a los demonios.
A medida que se va acercando a la puerta siente como su pulso se acelera pero solo por un par de segundos ya que rápidamente se controla.
Ambas llegan finalmente a la puerta y Emma ve a 3 demonios y a su lado un vehículo.
—Hola Emma.—dice un demonio que viste de manera más elegante que los otros 2 demonios y sujeta una tabla.
—Esta lista.—dice Emma mientras acuesta a la niña dentro del vehículo y deja la maleta en el suelo.
—Otra que está dormida.—dice el demonio vestido de manera elegante mientras deja que los otros 2 demonios se encarguen de todo.
—Es lo mejor.—lendice Emma mientras cruza sus brazos y se queda parada a lado del demonio.
—Te comportas como todo una madre aún en tu posición.—le dice el demonio mientras veía a Emma.
Emma no contesta nada, ve en silencio como uno de los demonios sujeta a la niña dormida y el otro le enterraba una flor.
Una flor blanca que pasa hacer roja.
—Todo está listo.—dice el demonio que está a lado de Emma y que sujeta otra flor.
—¿Para que es esa?—le pregunto Emma al demonio mientras deja de cruzar sus brazos y ve la flor desconocida.
—Últimamente en las otras granjas la calidad no es la que esperamos.—le empieza a explicar.—Así que debemos clavarle otra flor a la carne.
—Ya veo.—dice Emma mientras ve como los demonios le quitan la ropa a la niña para meterla al frasco.
—Tú eres un ejemplo único.—dice de pronto el demonio mientras mira a Emma.
Emma se le queda mirando al demonio sorprendida por lo que dijo.
—La mayoría de las mamás son bastantes desagradables con nosotros pero tú eres bastante amigable.—le explica el demonio.
—Ya que vamos a trabajar juntos como mínimo podemos tratarnos bien.—es lo único que dice Emma.
—Ya veo...—le dice el demonio a Emma.—Bien hecho.—agrega al ver como los demonios cargan el frasco para meterlo adentro del vehículo.
—Espero que volvamos a vernos muy pronto.—le dice el demonio vestido elegantemente.—Mamá Emma.
—Adiós.—es lo único que dice Emma para después ver como los 3 demonios se suben al vehículo y se van.
Emma siente las ganas de llorar pero apreta sus puños con fuerza para recordar que debe controlarse.
Toma la maleta de Alicia... de la niña muerta y empieza a caminar hacia el orfanato cantando la canción que Isabella le enseñó.
A medida que se acerca al orfanato tiene cuidado de que la maleta no sea vista.
Entra sin hacer ruido y rápidamente va a su habitación.
Al entrar ve a Carolina, Olivia, Andrés, Christian y Antonio dormidos en sus cunas.
Emma se acerca al librero y mueve un libro en especial, el librero se mueve a un lado y deja ver una puerta.
Entra a la habitación y cierra la puerta con cuidado de no hacer ruido para despertar a sus niños.
Emma deja la maleta en el suelo, la iba a desarmar otro día.
Se acercó al único artefacto de comunicación que había en la casa y se sentó en la silla.
—Aquí 63194 de la plantación 3.—dice Emma después de unos segundos para que pudieran oírla.—La entrega del producto 38706 fue un éxito.
—Bien 63194.—dice una voz.—No hay más entregas hasta nuevo aviso.
La llamada se corta y Emma se quita el aparato.
Suelta un suspiro, se para y sale de esa pequeña habitación para poder dormir.
Al salir se acerca a las cunas de sus niños y al verlos dormir de manera tan tranquilamente no puede evitar llorar.
—Lo siento.—dice en voz baja mientras lloraba y se sentaba en la cama.—Lo siento Alicia... mi amada niña.
"Lo siento, lo siento, lo siento." Pensaba Emma mientras se abrazaba.
—Tengo que sacarlos a todos de aquí sí o sí.—se dijo Emma mientras bajaba la mirada para evitar ver a los bebés que dormían.—Debo sacarlos antes de que Annie cumpla los 12 años... por que... por que... no seré capaz de entregarla a ella también.
Emma se secó las lágrimas y se quitó el delantal y la ropa para ponerse el pijama.
Debía de haber una manera.
Una manera de adelantar su plan y así huir con sus amados niños.
No quería seguir entregando a los niños 1 por 1... sí esto seguía así tendría que entregarlos a ellos 3 también...
A los 3 hijos que había tenido y que vivían con ella en el orfanato.
ESTÁS LEYENDO
Mis amados niños (Yakusoku no neverland)
FanficEmma ve en shock como Mamá le rompe la pierna a Norman. Emma escucha en silencio como Mamá le dice que llegó la hora de su recogida. Emma sabe que es su final y está triste, no por que vaya a morir si no por que ya no podrá ver a su amada familia y...