Lena Luthor y Kara Danvers están casadas desde hace cinco años. Su matrimonio fue concertado por el interés de ambas familias. Sin embargo, después de una discusión el día de su boda, ambas perdieron el contacto y nunca más se volvieron a ver.
Pero...
Estaba harta de tener que soportar el comportamiento de Kara, ya estábamos cerca de cumplir seis años juntas y ella pocas veces me dedicaba el tiempo que merecía. Íbamos a cumplir seis malditos años juntas en pocas semanas y ella no me había presentado a sus padres, la única que conocía de mi existencia era Alex su hermana mayor a quien por cierto le caía fatal, era horrible todo.
Me levanté de la cama y tomé algunas prendas de vestir del clóset y las tiré sobre el sofá para después tomar una mochila.
Si Kara no estaba dispuesta a darme lo que necesitaba yo iría y lo buscaría en otra parte, estaba más que convencida de que Piper estaría feliz de recibirme por una temporada medianamente corta mientras Kara aprendía la lección.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra Kara.
Después de vestirme me limité a quedarme un segundo más en el departamento de Kate, a veces su comportamiento era tan nefasto y está mañana no tenía intención alguna de soportarlo.
Después de tanto tiempo juntas creo que la relación ya se había deteriorado lo suficiente, las dos éramos demasiado diferentes y por primera vez estaba segura de algo, seguir con ella no sería una opción.
Narra Maggie.
Ahora era cuando detestaba mi vida, otra vez había olvidado colocar las cortinas, salí de la cama, camine hasta el baño, cerré la puerta tras mío de una manera tan fuerte que estaba segura de que cuando saliera Alex me arrojaría lo primero que encontrará a mano.
La noche anterior habíamos asistido a una fiesta en casa de Winn mi mejor amigo y habíamos regresado al amanecer por lo cual contaba con dos cosas bastante malas, la primera una resaca de muerte y la segunda un sueño fatal. Me saqué las bragas y me metí en la ducha estaba más que convencida de que un café bien cargado cambiaría mi estado de ánimo, además hoy ni Alex ni yo podíamos faltar al trabajo porque mis queridos suegros habían avisado con con mucho tiempo que hoy todos los miembros de la familia teníamos que reunirnos.
