ℰ𝓁 𝒶𝓁𝒻𝒶 𝒾𝒹ℯ𝒶𝓁.

Amor mutuo.

Zenitsu terminaba de recoger todo el desastre que sus cachorros habían hecho, suspiro al sentir su espalda y cintura doler.

Antes de ir a su habitación, pasa por la de sus hijos, los dos dormían profundamente, sonrió al ver a su pequeño y desastroso Haruki dormido con un pie fuera de las mantas y con aquel peluche de ratón entre sus brazos,Hiroki por el contrario duerme completamente descubierto y con su peluche en el suelo, antes de salir de la infantil habitación, el rubio arropa a sus hijos deseándoles buenas noches en silencio.

Zenitsu termina de secar su cabello, miró la hora suspirando al saber que aún era demasiado temprano para dormir, sin nada más que hacer toma su cuadernillo de dibujo y un carboncillo para comenzar a trazar garabatos.

Miraba la hora, suponía que sus cachorros debían estar dormidos ya, en cuanto a su amado omega, tal vez estaria dibujando, suspiro al sentir el cansancio de varios días acumularse, lo unico que deseaba en ese monento era llegar a su hogar, tomar entre sus brazos a su amado omega y dormir hasta que el par de huracanes que tenía por hijos lo despertaran.

Cuando por fin llega  a su hogar, entra sin hacer ruido, suspira al sentir el aroma de su pareja y cachorros, en completo silencio camina hasta su habitación, permanece sin entrar al ver a su omega frente a la ventana, despacio se acerca dejando un beso en el cuello de Zenitsu, el rubio sonríe al saber que su amado alfa esta en casa.

— Te extrañe, me hiciste falta por las noches—, el alfa sonríe al escuchar a su amado rubio, suspira al sentir como Zenitsu se mueve despacio entre sus brazos para besarlo.

— También los extrañe—, Zenitsu sonrie, abraza a su alfa marcándolo con su olor.

— Alfa—, el alfa sonrie, sabe lo que su preciso omega quiere, tomandolo en brazos lo lleva al baño, Zenitsu mira atento los movimientos de su compañero y como poco a poco aquel extravagante y caro traje es retirado del perfecto cuerpo de su alfa.

El alfa sonríe al ver a su amado comérselo con la mirada, se acerca a el besándolo despacio, retira las prendas del cuerpo de el rubio para tomarlo entre sus brazos de nuevo.

Intentaba no gemir demasiado alto, las embestidas eran lentas pero profundas, sus ojos se encontraban cerrados pero sabia bien que el alfa lo miraba con intensidad.

- Zenitsu, mi lindo y precioso omega, te amo-, Zenitsu abre la boca sin ser capaz de hablar, solo jadeos y palabras a medias son lo que se escucha, su alfa aprovecha para acercarse a el y besarlo, el alfa lleva los besos hasta la marca de su pareja, clava sus colmillos haciendo al rubio gemir con fuerza, Zenitsu se aferra a la espalda de su pareja dejando marcadas sus uñas, las embestidas siguen hasta que los dos se corren.

Agitados y esperando a que el nudo baje la pareja toma su tiempo en recordarse mutuamente  cuanto se aman.