No tenemos remedio

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Zenitsu veía mal a Tengen, Uzui no hizo más que resoplar y esquivar la secadora de cabello que el rubio le lanzó, el motivo

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Zenitsu veía mal a Tengen, Uzui no hizo más que resoplar y esquivar la secadora de cabello que el rubio le lanzó, el motivo... no le era claro.

-Eres un idiota Uzui, lo que tienes de... de altolo tienes de baboso- Uzui miro al rubio, Zenitsu estaba con los ojos llenos de lágrimas.

El alfa suspiro, asintió mientras escuchaba al omega llorar, cuando Zenitsu se controló un poco, Tengen se aventuró en abrazar a su fiera quien de inmediato se aferró a él.

 —¿Qué pasó Zenitsu?, ¿qué hice?— el rubio sollozo de nuevo, con las mejillas rojas de tanto llorar miro mal a su pareja antes de contestar.

 —Ser tan perfecto, vi como te miraban esas betas y omegas en el restaurante... odio eso y más tu coquetería— enojado de nuevo el rubio golpeo a su alfa en el pecho, Uzui suspiro mientras se dedicaba a besar el cuello del rubio en un intento de hacer que su enojo se fuera.

 —Tu crees que a mi me agrada ver como todos te miran, pequeño omega encantador, no tienes idea de las veces que he querido golpear a más de un atrevido desvergonzado que te mira con deseo— el alfa aprovecho que su pequeña fiera le miraba con sorpresa para besarlo, resignado Zenitsu correspondió al beso.

— Mi celoso rayito, que no ves que solo tengo ojos para ti, jamás, jamás,pero en verdad jamás, nadie podrá ocupar tu lugar, celoso— Zenitsu asintió, abrazo más al alfa que correspondió con gusto.

— Si te vuelven a ver de esa forma voy a morderlos— Tengen no evito soltar una carcajada, si conocía bien a su omega sabia que lo haría, la pareja permaneció dándose pequeños besos hasta que ambos se dieron cuenta de algo.

— Esta muy silencioso...— Zenitsu asintió, se separó del abrazo cuando recordó que los niños estaban solos en la sala, solos, con plumones y pintura a su alcance...

Y ahí estaban de nuevo, discutiendo mientras bañaban a los niños llenos de pintura y brillantina.

— Sabes algo Zenitsu, no tenemos remedio, somos un par de locos que se complementan bien— Zenitsu asintió, beso la mejilla del alfa mientras seguía limpiando la pintura del cuerpo de sus cachorros.

ℰ𝓁 𝒶𝓁𝒻𝒶 𝒾𝒹ℯ𝒶𝓁.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora