Capítulo 3

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No estaba concentrada, todo iba bien hasta que esa canción cruzó mi mente, me encantaba la música y podía memorizar sin problema la letra y melodía

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No estaba concentrada, todo iba bien hasta que esa canción cruzó mi mente, me encantaba la música y podía memorizar sin problema la letra y melodía.

La canción sonaba en mi cabeza mientras el maestro explicaba, hasta que tuve que acabar la canción porque el maestro me preguntó algo con respecto al tema, por suerte lo respondí correctamente.
La clase continuó hasta que la campana del almuerzo sonó, saqué mi almuerzo y quería ir a la clase de Chisato.

—¡Oye! Hirai.

Volteé y ví a Satou con la mano levantada.

—¿Que sucede?

—¿Quieres comer con nosotros? —señaló a otros dos chicos, uno gordito y el otro más delgado.

—Lo siento, comeré con otra persona —digo apenada.

—No te preocupes, ten cuidado en los pasillos.

—Gracias —Salí y me dirigía a la clase 3.
«Satou es muy amable»

Mientras caminaba me topé con ese chico de cabello morado de mi clase.

—Hola, ¿Hirai, no? Soy Toritsuka Reita y soy un médium —el chico estaba recostado en una pared.

—¿Médium?

—puedo ver y hablar con fantasmas e incluso puedo ver los espíritus protectores. —sonrió —¿Quieres saber el tuyo?

—¿El mío? —en realidad me pregunto cómo será —está bien.

—Tu espíritu protector es —me observó atentamente —una cantante.

—¿En serio? —sonreí.
«Eso explicaría mucho»

—Y muy linda —Toritsuka empezaba a mirarme raro.

Cuando iba a hablar, Chisato apareció de repente.

—¡Koemi! Estaba buscándote.

—Yo también. —recordé que Toritsuka seguía ahí —Gracias por decirme mi espíritu, Toritsuka.

—Fue un placer.

Chisato me llevó a lo que parecía la cafetería, nos sentamos en una mesa y empezamos a hablar sobre como me había ido en mis primeras clases.

—siempre fuiste un poco distraída —Chisato reía.

—lo sé, por suerte pude responder — también reí, hasta que oí que el estómago de Chisato gruñía.

—¡Casi me olvido!— en el lugar donde transportaba mi comida, había dos cajitas, le acerqué una —toma, hice un almuerzo para ti.

—Koemi... ¡Gracias! —ella tomó los palillos y empezó a comer «Espero que le guste» —está delicioso ¿Dónde aprendiste a cocinar?

—Mamá me enseñó, y vi unos tutoriales.

Las dos reímos. Mientras comía, una canción alegre cruzó mi mente, estaba distraída hasta que alguien llamó mi atención.

—Hola ¿Tú eres la alumna nueva?
«oh, ella... Es muy bonita»

—s-sí, me llamo Hirai Koemi, mucho gusto.

—Un placer conocerte Hirai, me llamo Teruhashi Kokomi ¿Puedo sentarme? —asentí —Hola Mera.

Las dos chicas hablaron un poco, para que luego Teruhashi pusiera su atención en mi, me dijo cosas como "¿Cómo te fue en tu primer día?" "Espero que te sientas cómoda en la academia" además de otras cosas.

«Ella es lo más cercano a la mujer perfecta, pero si fuera perfecta perdería lo humano, como sea, todos la miran, ¿Quien los culpa? ¡Hasta yo puedo ver como su aura brilla!»

La campana sonó, el almuerzo había terminado y tenía que volver a mi clase.

—¡Oh! Ya tengo que irme, si necesitas algo puedes decirme, estoy en la clase 3 —la chica me sonrió, al mismo tiempo que oí al menos seis suspiros —adiós chicas.

—adiós, muchas gracias Teruhashi.

Guardé mis cosas, me despedí de Chisato y fui a mi clase.
«Bien Koemi, ya casi termina tu primer día»

«Terminó mi primer día, me fue mejor de lo que creí»

Fui a buscar a Chisato, estaba guardando sus cosas aún en el aula.

—¡Chisato! —ella volteó a verme.

—¡Ya voy! —terminó de guardar sus cosas y se dirigió a mí.

—¿Lista para nuestra primera caminata de vuelta a casa?

—¡lista! —un ruido nos interrumpió, era su estómago, ella se sonrojo un poco.
«tiene hambre»

—¿Que tal si pasamos a comer algo primero? Yo te invito— sus ojos parecieron brillar.

—¿Dijeron ramen? —un chico muy alto se acercó a nosotras
«su mentón es gracioso»

—¡Déjalas Nendou, las asustas! —un chico de cabello alborotado más o menos de mi altura le gritaba al de mentón gracioso.

—Koemi, ellos son mis compañeros —Chisato señaló a tres chicos. 

—H-Hola, soy alas so- ¡Kaido Shun!

—¡Y yo soy Nendou Riki! ¿Ya vamos por ramen?

—Saiki Kusuo.

—Es un placer conocerlos, me llamo Hirai Koemi.
«parecen buenos chicos»

Espera a conocerlos mejor.

Oí que irán a comer, ¿Podemos acompañarlas? —Kaido se acercó a nosotras.

—¡Vamos a comer ramen!

—¿Por qué no vamos todos? —Chisato habló —será divertido Koemi.

—por mí está bien, vamos. —empecé a caminar mientras Chisato y Nendou me seguían.

—¡Vamos Saiki! ¡Tenemos que proteger a los demás por si hay un ataque de la unión oscura!

Santo Cielo.

Ya en el restaurante, todos empezamos a conversar, aunque Saiki se mantenía callado.
«Creo que Saiki no quería venir, ahora me siento culpable, debió sentirse obligado»

No es tu culpa, ellos siempre me arrastran.

Cuando terminamos de comer, cada uno se fue a su casa, yo me fui junto a Chisato.

—Gracias por el ramen Koemi, te veo mañana, descansa.

—hasta mañana —observé a Chisato entrar a su casa para luego dirigirme a la mía.
«¡Mi primer día fue un éxito!»

Estaba feliz, volver a esta ciudad fue lo mejor.
En mi mente empezó a sonar una animada canción, al ver que no había nadie en la calle empecé a cantar un poco alto, incluso imitaba los instrumentos musicales con mi voz.

Si que está feliz, sigue cantando, quiero ignorar los deprimentes pensamiento que escucho.

Si que está feliz, sigue cantando, quiero ignorar los deprimentes pensamiento que escucho

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𝐶𝑎𝑓𝑒í𝑛𝑎〈𝑆𝑎𝑖𝑘𝑖 𝐾𝑢𝑠𝑢𝑜〉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora