Capítulo 17

8.8K 1.3K 562
                                    

«Espero que les guste»

Pensaba Koemi mientras terminaba de preparar el chocolate que les daría a sus amigos, solo faltaba ponerles sus envolturas.

Y ahí estaban, chocolates de diferentes tamaños en sus respectivas envolturas, la verdad, el más grande era para Chisato.
Sonrió satisfecha, no había arruinado el chocolate.

Colocó cuidadosamente todos los chocolates en una cajita para luego meterlos en el refrigerador.

«¡No puedo esperar a mañana!»

Era hoy... San Valentín, estaba emocionada, cuando llegó la hora de ir a la academia, saqué la cajita con el chocolate del refrigerador y me despedí de mi madre.

Fui rumbo a casa de Chisato, ella estaba esperándome en la puerta.

—¡Chisato! —caminé mientras ella me observaba, miraba la cajita que tenía en mis manos.

—¿Que traes ahí?

—Es una sorpresa, te la mostraré luego, ven —caminé un poco —se nos hace tarde.
Chisato me siguió.

Llegamos justo a tiempo a la academia, y veía que Chisato sentía curiosidad por la cajita.

—Te diré la sorpresa en el receso, ¿De acuerdo?

—De acuerdo —se resignó, me despedí de ella y corrí a mi clase, por suerte, el maestro aún no había llegado.

—Buenos días Satou.

—Buenos días Hirai —Satou sonrió, saludé a sus amigos y también a Yoriko.

Estaba ansiosa, tenía planeado regalar el chocolate en el receso, así que espere lo más paciente posible.

Hasta que al fin, la campana sonó. Saqué la caja con los chocolates.

«No se derritieron, que alivio»

Los primeros chocolates eran para Satou y sus amigos, ellos fueron muy amables conmigo.

—¡Muchas gracias Hirai! —los tres me agradecieron.

—Espero que les guste —sonreí.

Luego, un chocolate para Yoriko, ella fue la primera amiga que hice en mi clase.

—¡Eres muy linda Hirai! También te traje uno —ambas intercambiamos chocolate.

—Gracias Yoriko.
«se ve delicioso»

Mi siguiente objetivo, fue Toritsuka.
Lo encontré cerca de los baños de mujeres.

—Toritsuka, ¿Que haces? —él me miró un poco asustado.

—¡Hirai! Y-yo estaba, esperando a alguien —se recostó en la pared con un gesto gracioso —¿Que sucede?

—Toma, es para ti —extendí el chocolate hacia él, Toritsuka lo observó por unos segundos.

—¿E-es para mí?

—Claro Toritsuka —lo miré, su cara parecía muy emocionada y luego parecía que lloraría —¿Que pasa?

𝐶𝑎𝑓𝑒í𝑛𝑎〈𝑆𝑎𝑖𝑘𝑖 𝐾𝑢𝑠𝑢𝑜〉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora