“Para la siguiente actualización tendrán que llegar a los 35 votos.”
Hablemos del amor, específicamente, del romance, las relaciones. A lo largo de nuestra vida conoceremos a muchos, gustaremos de otros, querremos a varios y amaremos a pocos. Aunque algunos no lleguemos a lo último, ¿En realidad amamos?
Amamos a nuestras familias porque los necesitamos para sustentarnos, porque nos lo enseñaron desde el primer día. En cambio a nuestros amigos, parejas, pudimos elegirlos, porque no había un lazo de sangre que nos obligará a tener aprecio hacía ellos, una buena relación.
Pero en este momento, al tomar su mano, no se distinguir en qué parte estoy. Es algo que se me impone o algo que yo puedo elegir. Tal ves algún día lo resuelva.
Algunas personas salen se asoman de sus negocios para saludarlo, otros se acercan y preguntan cómo está. Apenas consigo no sentirme intimidada. Todos se ven físicamente mejor que otros humanos, más grandes, robustos, rostros amables y otros serios e imparables. Hasta las mujeres. Joder, ellas tienen miradas amables y sonrisas brillantes, pero si lo observas con cuidado, verás que cuando comienzan a girar la oscuridad abraza sus rostros.
—Todo aquí se divide en secciones—habla Elijah—. Por allá—señala—, estan gran parte de las casas y cabañas.
Comienza a explicarme con detalle, no es muy diferente a la ciudad, pero este lugar tiene un no sé qué, que lo hace ver más amigable y sombrío a la vez. Su voz es cada vez más lejana, solo observo a las personas pasar, detallo todo lo que puedo sus rostros, a los niños corres de un lado a otro, a los ancianos alejados de bajo de la sombra de los árboles. Pasan las horas y seguimos caminando entre calles, de un lado a otro hasta llegar a las cabañas que están en construcción.
Hay algunas que apenas tienen la estructura, algunas camas o colchones sobre el pasto. Pero ninguno parece tener problema con eso. Caminamos más lento y le agradezco.
Al terminar de ver esa sección siento algo raro. Frunzo el ceño mirando a los lados, buscando lo que lo provoca, mis manos hormiguean. Detengo a Elijah de avanzar, soltando su mano y volviendo a las últimas cabañas.
Las heridas en las palmas de mis manos vuelven a doler, clavo mis uñas con furia. Una pareja vuelve de la parte trasera de la cabaña, él sostiene a la chica del brazo, tirando de ella para entrar. Un jadeo se me escapa cuando lo veo jalarla del cabello. Casi corro.
El hombre voltea a verme cuando escucha mis pasos apresurados. A la mierda dialogar. Tomo todo el coraje que tengo y me le lanzó encima, tirándolo.
—¡Cabrón!—me pongo a horcadas de él, golpeó su cara tanto como puedo, hasta que de un empujón se avienta fuera de su regazo.
Me paro tan rápido como puedo. La chica también está en el suelo y grita el nombre de cabrón, "Tomás". Él también se levanta y se acerca, la diferencia de altura es notable y no sé cómo pude taclearlo. Levanta el puño con la intención de golpearme, pero lo detienen apenas lo hace.
ESTÁS LEYENDO
Revenge In Red
WerewolfSe contaban leyendas de seres que habitaban los bosques de todo el mundo, bestias con un lado salvaje y otro humano. Olvidados por el tiempo solo pocos conocían de su existencia, temiendo de ellos más que a cualquier otra cosa. Decían que destrozaba...