"Para el siguiente capítulo tendrán que llegar a los 40 votos"
Me gustaría decir que todo continúo igual, que me mantuve implacable y serena, aunque a la vista de todos fue así. Cada noche me acompaño una soledad y tristeza terrible. Ni siquiera pasamos tanto tiempo juntos, no había contacto físico ni nada por el estilo, pero lo sentía, sentía que algo me faltaba.
Esa misma tarde se fue, no me dejó responder o salir de mi trance para procesar todo. Me abrazó contra su pecho y beso mi frente. Y se fue. De eso han pasado tres días, en los cuales me mantengo ocupada en todo lo que puedo, hablando con las chicas de la cocina, algunos guardias, con Elizabeth y afinando detalles con Tadeo.
No vas a dejarlo.
Nunca, sin importar cuánto duela. Mis planes son los mismos y me prometí a mi misma y a ella seguirlos, sin importar mis sentimientos.
Tres días en los que afiance la relación con Elizabeth, o como le gusta que le diga, Beth. Ella es la única que me dice que es lo que pasa, parece no estar del todo informada de mi estancia aquí. Es tan amable que me da cierta pena aprovecharme.
Además de todo eso, no hay rastro de mi padre, a lo que me han informado es como si la tierra se lo hubiera tragado.
Camino por el pasillo hasta llegar a la habitación donde paso gran parte de mis mañanas, no más salir al jardín, no hasta que las aguas se calmen. Vuelvo a ver las preciosas pinturas, conteniendo mis ganas de tocarlas. Me pregunto cuál será la historia de cada una.
Cada trazo parece calculado, nada fuera de lugar, figuras en desorden que no puedo explicar, me gusta lo que hace. Reviso de nuevo los cuadros recargados sobre la pared. Detallo el hermoso rostro de una mujer castaña, es el único cuadro así, además del mío. La mujer tiene una enorme sonrisa, mirada brillante, detrás hay un bosque, todo ella grita perfección.
Dejo todo en su lugar de nuevo, solo que ahora con un mal sabor de boca.
Me siento en el piso, indecisa en quedarme o bajar a desayunar. Me decido por la primera, pasando la mirada una y otra vez por los cuadros. Es fantástico que don pintura y un pincel puedan crear estas obras de arte. Cierro el ciper del suéter, metiendo las manos en los bolsillos de este. Veo por la ventana y ha comenzado a llover, esa es una buena señal.
»Por lo que llorabas todas las noches«
No derramé una sola lágrima sincera después de ese día, al contrario, fueron por los que me llene de coraje y valentía. Pero hubiera preferido ser cobarde y nerviosa con tal de tenerla a mi lado, lo que daría por un abrazo suyo, por una de sus melodiosas risas y brillantes sonrisas. Y ahora parece que a él también lo perdí.
Casi gruño cuando alguien toca la puerta. Me pongo de pie cansada, acomodando mi pantalón negro.
-Te ves del asco-es lo primero que dice al verme.
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Revenge In Red
WerewolfSe contaban leyendas de seres que habitaban los bosques de todo el mundo, bestias con un lado salvaje y otro humano. Olvidados por el tiempo solo pocos conocían de su existencia, temiendo de ellos más que a cualquier otra cosa. Decían que destrozaba...