Capítulo 15

934 70 9
                                    

Editado el 26 de febrero, 2021.
10:57 pm

—Repite lo que dijiste y desatarás el infierno ahora mismo.

...

Atravesamos el umbral del salón, todavía no estaba ocupado por todos los alumnos.
Mientras caminaba a mi mesa, mis ojos chocaron con los de Barbie.

Le sonreí. Estaba sentada a un lado de su amiga rubia, trazando algo en un cuaderno mientras hablaban, parecían concentradas.
Un chico castaño se acercó a ellas, comenzaron a conversar, aunque parecía que era más entre Barbie y él.

Sentí un pequeño hueco en el estómago cuando él se sentó sobre la mesa de trabajo, sobre la hoja en la que escribía y le tocó el cabello a Barbie.
Rodeé el salón para quedar junto a Dereck, literalmente al otro lado del salón, antes de que nos sentaramos, lo detuve jalándolo del brazo.

—¿Por qué no nos sentamos más hacia allá? —le indiqué con mi cabeza.

—Este es nuestro lugar desde siempre.

Arrugó el entrecejo, me lamí los labios para pensar en una buena excusa.

—Es que tengo congestionada la nariz, y el viento frío me hace sentir peor.

Lo pensó, porque era cierto. Había una gran ventana que atravesaba todo el salón, como una pecera gigante. Un cuarto de ella estaba abierta para disipar el olor de concentración de tantas personas juntas, y nuestros asientos quedaban justo al frente de esa pequeña fracción de ventana abierta. El viento a las ocho y media de la mañana aún seguía siendo muy frío.

—No escucho tu voz de congestión nasal, aún sigues hablando como idiota —tomó su mochila y caminó lejos de nuestros lugares.— Pero esa voz de idiota normal.

Dirigí mi vista a Barbie, su carcajada tomó mi atención. Ella y su amiga rubia estaban muertas de la risa, supongo. Su cabeza estaba inclinada ligeramente hacia atrás  mientras se tapaba un poco la boca con su mano. Su amiga reía muy fuerte, el movimiento de sus hombros  era notorio. Y el chico solo sonreía abiertamente. 

—Aquí, Dereck. —me senté dos sillas atrás de  Barbie.

Mi amigo se sentó a mi lado, sacó sus útiles escolares y se dispuso a entretenerse en algo que no era de mi interés. Miré hacia el grupito que ahora reía escandalosamente, más que la vez anterior.

Mi mirada  chocó con la de su amiga, automáticamente su sonrisa se disipó un poco.

Me levanté de mi asiento y me dirigí hacia ellos, con la mirada clavada en algún punto para pretender estar distraído llegué, guardaron silencio y me observaron.

—Barbie, préstame un lápiz. —pedí, u ordené.

—Eh.. Sí, claro.

Me sentía un imbécil. El chico me miró sonriendo, qué bonita sonrisa. Necesitaba un buen puño.

Su amiga y el chico iniciaron una conversación aparte mientras ella buscaba un lápiz en su estuche. Volteé a ver a Dereck, seguía en su celular.

—Toma.

Tomé el lápiz.

—Gracias, nena.

—¿Nena? —interrumpió... aún seguía sin saber quién era.— ¿Están saliendo o algo?

Juntó dos de sus dedos, la rubia miró a Barbie con cierta preocupación en el rostro, juro que pude sentir cómo el otro grupito a un lado bajó la voz para escuchar.

—De hecho, Barbie y yo...

Unas risas resonaron en el lugar, Sophia entró con su amiga riendo escandalosamente. Su amiga frunció el ceño.

—¿Por qué tanto silencio? —hizo la pregunta abiertamente.

La boca de Barbie hizo una fina línea, el chico seguía mirándome con curiosidad, la rubia tosió con incomodidad.

—¿Y tú eres? —le pregunté.

—Roger, un gusto. Te preguntaría tu nombre, pero ya lo sé. Eres toda una celebridad.

—Já. —le di una sonrisa fingida.

Sophia corrió con Dereck para comerlo a besos.

—¿Entonces están saliendo tú y Barbie?

—¿Por qué no dejamos que ella responda a eso?

Unos aplausos resonaron demasiado cerca de mi oído, volteé. Ese chico, Justin, venía aplaudiendo como una foca idiota hacia nosotros.

—Roger, al fin conoces a estas dos estrellas del cine triple x en el campus, eh.

El salón se hundió en un silencio abismal, Barbie ladeó la cabeza, su amiga me miró con odio. ¿Ahora qué?

—Repite lo que dijiste y desatarás el infierno ahora mismo. —amenacé.

Justin rodeó a Roger con su brazo, sin hacerle caso a mi amenaza.

—¿Ya le pediste tu promoción?

Fruncí el ceño. ¿Promoción?

—Oh, es que él sabe que tengo un cuadro de ustedes. —me pegó en el hombro.—Son mi inspiración.

—Bueno, ¿tú eres imbécil o algo?

Me acerqué bruscamente hacia él. Las personas se pusieron alerta, Dereck se levantó de su asiento, había tensión, demasiada tensión en el ambiente.

—Cole... —me llamó Barbie.

La vi erguida en su lugar, tratando de  ocultarse de todo este espectáculo. Me sentí tan idiota, y con tanta necesidad de  protegerla.

—Muy bien, a todos ustedes cerebro de neandertales —elevé la voz, para dirigirme a todo el grupo.— No entiendo su puta obsesión con todo este tema. Barbie y yo cogimos, sí. Lo hicimos de las mejores maneras posibles, y se salió de control.

Bajé un poco la voz para tomar aire.

—Pero no sé por que se comportan como niños de 10 años, en esas épocas donde decíamos "Dijo pene" y nos reíamos como descerebrados. Lo que ella y yo hicimos no es algo que ustedes no hayan hecho o que vayan a hacer.

Fijo mi mirada en Justin. Pienso lo que diré, y me preparo para decírselo sólo a él pero que sea lo suficientemente audible para todos.

—Y para ti, Justin. Sé que tienes problemas con tu pene y por eso recurres a nosotros para pedir nuestras fotos, si necesitas más motivación, no dudes en contactarnos. —le doy una palmada en el hombro acompañada de un guiño.— ¡La invitación está abierta al público! 


Barbie sucia [Cole Sprouse +18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora