Camila Cabello (ADAPTACIÓN CAMREN)

Cinco Meses II

– Está bien - dijo Brooke después de que Normani y Camila dieron sus versiones de lo que sucedió. – Kordei, regresa al cuartel y ayuda a los demás a limpiar el desastre que ayudaste a hacer.

– Sí, señora.

Genial, pensó Camila cuando Normani salió de la habitación. Estoy en muchos problemas.

– Solo puedo suponer que hay un clon tuyo que asiste y se sienta en mi clase de Control de la ira -dijo Brooke.

– Ella trató de matar a la instructora Jauregui, señora –dijo Camila.

– En primer lugar, no creo que una caída en un pantano vaya a matar a nadie, aunque puede haber apestado un poco –dijo Brooke. – Y aun así eso no te da el derecho de poner tus manos sobre otra persona, no importa cuán enojada estés. Lo sabes.

– Lo sé, señora –, dijo Camila.

– Puedes pensar que nosotras no sabemos lo que sucede fuera de las aulas –, dijo Brooke. – Pero sé mucho más de lo que piensas. Sé que Laura y sus amigas te han etiquetado como la puta de Terror.

Camila asintió con la cabeza.

– Son solo palabras, señora.

– ¿Te molesta?

– No, señora, solo están tratando de provocarme.

– Pues parece que funcionó -dijo Brooke. – Podrías haberla lastimado seriamente cuando la estrangulaste.

– Ella no debió haber cortado esa cuerda, señora.

– ¿Estarías tan molesto si alguien más hubiera estado en la cuerda cuando se rompió? –Preguntó Brooke.

– Yo ... no sé, señora -dijo Camila. – Supongo que dependería de quién fuera.

Brooke dejó de pasearse y se sentó en la silla plegable.

– La instructora Jauregui no necesita que pelees sus batallas.

– Lo sé, señora. Es solo que ... –Camila apoyó los codos sobre los muslos y enterró la cara entre las manos. – No puedo explicarlo. No lo entendería, señora.

– Realmente debe ser un clon tuyo el que va a CI si crees que no soy capaz de escuchar y comprender. ¿Qué está pasando, Camila?

– No puedo hablar con usted sobre eso, señora.

– Entonces habla con la instructora Jauregui.

Camila resopló.

– Definitivamente no puedo hablar con ella al respecto.

– ¿Es algún problema con ella?

¿Con ella? Es ella.

– Es mi problema tratar con esto, señora. No puede ayudarme.

– Camila, si necesitas hablar, estoy aquí -dijo Brooke.

– ¿Tienes que decirle de lo que hablamos ahora?

Brooke extendió la mano y apartó las manos de Camila, obligándola a mirar a la instructora.

– Si se tratara de lastimarte a ti mismo o a alguien más, sí, lo haría.

Ya estoy sufriendo. Cada vez que la miro.

– Me gusta la instructora Jauregui. –Arriesgándose, miró a la instructora. – Quiero decir que ella realmente me gusta.

– Ya veo -dijo Brooke. – ¿Has hablado con ella sobre esto?

Camila sacudió la cabeza.

– De ninguna manera. Ella me enviaría a punta de patadas a la enfermería hasta la graduación. –Se frotó las manos juntas. – Por favor, no le digas nada.