Narrador Meliodas
Apenas Elizabeth empezó su prueba no pude dejar de pensar en todo lo que habíamos pasado para llegar aquí, sin siquiera desearlo había perdido a mi mujer y ahora batallaba por recuperarla mientras que ella estaba poniendo su propia vida en juego como tantas veces lo ha hecho, pude ver como los demás tenían miradas preocupadas y ansiosas al ver a Elizabeth en ese estado de trance, pero lo que nos sacó de esa burbuja fueron unos leves quejidos de dolor provenientes de mi diosa.
Elizabeth: No...¿Qué hacen?...
Meliodas: Eli ¿Qué pasa
Tara: Es la prueba, sus miedos la están dominando y ahora está sufriendo un colapso emocional. Está perdiendo la batalla
Diane: No Eli. Tu eres muy fuerte tienes que salir d esta.
Elizabeth: ¿P-porque?...Buaaa
No pude evitar mostrar preocupación cuando de sus labios empezó a escupir una gran cantidad de sangre y eso nos decía lo que ya sabíamos está muriendo. No dude ni un minuto y me acerque tomándola del rostro moviéndola suavemente para que despertará pero mientras más pasaba el tiempo más era la cantidad de sangre que derramaba y al bajar mi vista vi una gran herida en su abdomen que la debilitaba rápidamente. No sabía qué hacer y el hecho de que esta bruja no hiciera nada por despertarla me hizo desconfiar más de ella por haberla puesto en esta situación así que con todo el dolor del mundo y con el propósito de despertarla le lance una bola de llamas del infierno que inmediatamente cobraron vida en su cuerpo, sus hermosos ojos se abrieron abruptamente y con un grito desgarrador desplego su poder mágico apagando las llamas pero dejándola inconsciente en el proceso, estaba por acercarme a ella pero la criatura con alas, nuevo amigo de Eli, se apareció de la nada bloqueándonos el paso hacia ella y tomándola entre sus grandes garras se la llevo volando perdiéndose en las espesas nubes de la noche.
Meliodas: ¿Qué demonios fue lo que paso?...¿A dónde se la llevo?
Tara: Ella lo invoco a través de su vínculo, estaba muriendo y el banshee se la llevó al lugar más seguro para ella. Pero el caso es que no paso la prueba y de esa manera no podrá cumplir con su destino.
Elaine: Debemos ir por ella, está demasiado débil y la herida en su vientre se veía muy profunda.
Melioda: De acuerdo. Nos separaremos y si alguno la encuentra la traerá aquí sea como sea.
Tara: Cuando la encuentren no olviden preguntarle sobre su prueba y como se hizo la herida, el miedo a la muerte es el mejor estimulante para momentos de necesidad.
Meliodas: No se meta en esto maldita bruja.
No deje que respondiera nada y desplegué mis alas de materia oscura elevándome lo más rápido para encontrar a mi mujer, era difícil poder ver algo con la espesa niebla pero por alguna extraña razón podía sentir su presencia muy cerca de mí, así que sin dudar decidí seguir a mis instintos conduciéndome a lo que parecía una bahía muy hermosa pero al mismo tiempo denotaba un aire de tristeza. Busqué rápidamente con la mirada a mi mujer y pude ver dos siluetas escondiéndose en una cueva al lado de lo que parecía un enorme arrecife y descendí lo más sigiloso que pude para no molestar al banshee que la cuidaba pero apenas noto mi presencia se apresuró a atacarme cuando una débil voz lo calmo.
Elizabeth: No...N-no lo...l-lastimes.
Meliodas: - Corrí hacia ella y la tomé entre mis brazos mientras le acariciaba su hermoso rostro que ahora estaba cubierto por la sangre que había derramado- Eli, amor resiste. Vamos con los otros y Merlín te curará.
Elizabeth: M-meliodas...N-no puedo...N-no creo que...
Meliodas: Ni se te ocurra decir que te vas a rendir Elizabeth. La diosa de la que yo me enamore jamás hubiera estado dispuesta a rendirse tan fácilmente. Amor mío por favor sé que aun te queda magia para curar tus heridas solo concéntrate.
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Creí que me amabas
Fanfiction¿Profecía? Aun después de haber derrotado al Rey Demonio, una gran desgracia hará que los siete pecados capitales se arriesguen. Pero no solo el destino de Elizabeth estará en juego sino también su amor por Meliodas. Un amor de 3.000 años se vera en...