Midas-Bajo el frío del Oro

Capítulo 31: Un milagro

Narradora

Skye, bananin, Brutus y tina estaban en una habitación viendo un álbum de fotos de todas las aventuras que habían tenido todos juntos. Extrañaban a sus amigos y que su grupo estuviera unido. Miausculos ahora era una versión oscura llena de odio, maya estaba muerta y nadie sabía por que o como y Midas se había vuelto frío y distante. Extrañaban aquellas épocas dónde todos eran como una familia.

Midas y Jey estaban en una habitación. Ella había estado llorando la muerte de su amiga y el solo trataba de permanecer a su lado calmandola. Midas también sentía penas y tristezas pero siempre ponía a los demás antes que el. Jey había quedado dormida y midas simplemente estaba con ella cuando uno de sus trabajadores tocó a la puerta.

- ¿Que pasa?

- Jefe ¿Tiene un momento? Necesito que vea algo.

- Espérame afuera - Midas cuidadosamente se separó de jey para no despertarla. Salió de la habitación y caminó junto a la persona que lo llevaba hasta su sala de reuniones

- ¿Qué pasa? - pregunto midas extrañado.

- Hace como una hora el transmisor de santuario desapareció del mapa. Usted sabe que tienen un rastreador y no se puede desactivar a menos que sea destruido.

«¿Me habrá traicionado también?» fue lo primero que se presentó en su mente.

Midas desplegó el mapa holográfico - ¿Cuál fue su última ubicación? - su empleado señalo señorío de la sal.

- Aquí, más o menos pasó media hora y después empezó a moverse pero solo fue unos metros y se detuvo de nuevo por un tiempo, luego solo desapareció.

- Gracias por avisarme, saldremos en su búsqueda.

«¿Me dijo gracias?» pensó el empleado y solo salió de la sala con una cara de confusión.

Midas salió de la sala y fue a su oficina para tomar sus armas. Luego fue a la habitación donde estaban sus agentes para explicarles lo sucedido y después solo pidió que lo acompañaran a registrar el lugar donde estuvo por última vez. Salieron en helicóptero para llegar más rápido y al llegar hicieron un reconocimiento del lugar hasta que tina encontró el transmisor.

- ¡Oigan, encontré el transmisor! - todos se acercaron a la zona donde estaba tina

- Aa... ¿Jefe? - bananin llamó la atención de Midas - no creo que santuario lo haya traicionado...

Había visto los rastros de sangre que dejó la pelea entre miaus y santuario. Midas se acercó a inspeccionar el lugar y vio que había más sangre en un árbol y luego le seguía un camino de más sangre. Skye se adelantó corriendo siguiendo el rastro hasta que se perdió en un pequeño barranco. Ella se acercó lentamente a ver por el borde y divisó el cuerpo de santuario.

- ¡Chicos, aquí está santuario! ¡RAPIDO! alguien ayúdeme a bajar.

Todos se acercaron apresurados para también encontrarse con esa preocupante escena.

- Hazte a un lado pequeña - Brutus intervino y bajo por el barranco.

- ¡Apresúrate! ¿Sigue con vida? - midas pensaba de nuevo en que sombra era el responsable.

Brutus revisó a santuario y tomó su pulso que apenas era perceptible - ¡está vivo pero si no hacemos algo rápido va a morir!

- Estamos cerca del lago, llévalo a la orilla. Tina ve por la lancha ¡Rápido!